La tecnología avanza con el fin de facilitar el día a día de las personas. Si hay algo que puede cambiar para que a la hora de usarlo sea más cómodo, es un punto a favor. Actualmente es muy común toparnos con conectores USB cada día, desde nuestro cargador de pared para el smartphone hasta una memoria USB donde guardamos algún archivo. Si se mejoran estos conectores para que sean más ágiles y fáciles de poner, pues mejor, ¿no?
El USB tal y como lo conocemos ha tenido saltos muy importantes a lo largo de su vida. Ahora estamos en la era del USB 3.0, donde tenemos unas velocidades de transmisión mucho mejores que la anterior versión. Pero estamos ante un inminente salto hacia otra nueva era del USB y es que pronto nos encontraremos con el USB 3.1 y el USB Type-C o USB-C.
USB 3.1: Equiparándose a Thunderbolt y sus 10Gbps
En primer lugar hablaremos del USB 3.1, la nueva generación que vendría incluida en futuros ordenadores así como en dispositivos de almacenamiento. Si tenemos un cable con una tasa de transferencia considerablemente mayor, habrá que aprovecharlo. Ni más ni menos que una tasa de velocidad de 10Gbps en los dos sentidos. Habrá que ver si los dispositivos aprovechan tal ancho de banda para la transmisión de datos.
Además, no sólo serán mejoras en la transferencia de archivos a través del cable, sino que requerirá de menos energía que la versión 3.0 actual. Esto se debe a una mejor gestión energética y una optimización de los componentes.
Por último y no menos importante, este cable será capaz de proporcionar hasta 100 vatios de potencia, es decir, una corriente de 5A / 20V. Ideal para la carga rápida que empiezan a añadir cada vez más fabricantes a sus terminales.
USB-C: Reversible y universal, todo lo que necesitas
Hemos hablado del USB que sustituirá a la versión 3.0 pero uno de los cambios fuertes que vendrán junto con la nueva generación de USB es la nueva versión de conectores para dispositivos portátiles como smartphone o tablets. El USB Type C o USB-C como se conoce más comúnmente se conoce. Un conector que por lo que más destaca, es por ser reversible. Podrás conectarlo con los ojos cerrados.
Aclarar que el USB-C es sólo la forma del conector, el cable puede ser la versión 2.0. Esto quiere decir que no significa que teniendo un conector USB-C tengamos altas velocidades ni gestión de altas cantidades de potencia. Pero sí que nos ofrece la posibilidad de ser un conector casi universal y esto es debido a los variados protocolos que soporta: HDMI, DisplayPort, VGA, PCIe, Ethernet, etc. Claro está, todo depende del cable incorporado pero la salida, en este caso el conector Type-C da soporte a protocolos variados.
Un detalle importante es el que encontramos con respecto al flujo de corriente, ya que si conectamos dos dispositivos a través de un USB-C, podremos cargar uno con el otro. Es decir, cargar nuestro móvil con la tablet, etc.
Algo importante a destacar. No por el hecho de contar con un conector USB-C tendremos altas velocidades de transferencia de datos. Todo eso depende de la tecnología incluida en el cable. Es decir, podemos tener un moderno conector USB-C reversible y un anticuado cable 2.0.
Dispositivos compatibles, cada vez son más los que se unen
El objetivo de este conector universal y reversible es poder crear un estándar en los cables. De este modo, no habría problemas a la hora de prestar nuestro cargador a otra persona o bien, como dijimos antes, cargar un dispositivo a través de otros. También se busca llevar todo a un único conector, ya hemos visto que es capaz de soportar hasta DisplayPort en su versión 1.3, capaz de emitir vídeo 4K a 60Hz.
Uno de las marcas que apostó más fuertemente por este nuevo conector fue Apple con su MacBook nuevo. Un solo puerto USB-C donde, mediante un adaptador, podríamos conectar otros muchos cables como el Thunderbolt, jack de audio, HDMI, etc. Pero no sólo Apple está apostando.
USB-C, el futuro de los conectores en Android
Fabricantes de dispositivos Android también aportaron su granito de arena como lo hizo la Nokia N1, la tablet de la famosa firma finlandesa. Y como, tal y como nos comunica OnePlus, lo hará el OnePlus 2. Apostar por un conector en una fase tan temprana es una forma de demostrar su ímpetu por hacer que prospere cuanto antes esta tecnología.
La apuesta más fuerte fue Google cuando dijo que sus próximos dispositivos Nexus llevarían un puerto de este conector. Es decir, los Nexus de este año incluirán un conector USB-C. Sin embargo será un USB 2.0/3.0 ya que el Snapdragon 810, el procesador más potente, no soporta USB 3.1 de momento.
Esperemos que esto haga que el resto de marcas también apuesten por este tipo de conector y en los buques insignias que nos quedan por ver y los del próximo año incorporen un USB Type-C en lugar del microUSB que vemos a día de hoy.
Los fabricantes han de apostar por las nuevas tecnologías para que estas avancen. El USB Type-C como estándar universal llegará a serlo cuando las marcas lo usen en todas sus gamas: altas, medias o bajas.