Una carnicería humana por el futuro de la humanidad, una nave del misterio con seres de arriba, unas pinceladas de pasteleo por aquí y por allá, y un porrón de enlaces a Google Maps y a YouTube: he leído Endgame, y esto es lo que he encontrado entre 528 páginas de ciencia ficción tintadas de realidad.
Hace relativamente poco más de un año, el equipo de Google detrás del conocido Ingress, Niantic Labs, anunció que su equipo estaba detrás de un proyecto para convertir esta serie de libros en un juego de realidad aumentada a la Ingress, un juego que ha gustado mucho entre el público por su manera de combinar realidad y ficción.
No tenemos ni rastro del juego para Android e iOS que se supone que saldría en 2014 (aunque dicen que los planes de lanzarlo siguen en pie), aunque tenemos otra cosa igual de interesante: un juego de realidad alternativa (ARG) en el que nosotros podemos jugar un papel clave en la trama, y hacernos con una buena cantidad de oro auténtico si desciframos el misterio que encierra el libro.
Si tenéis entre vuestros planes leer el libro, no seremos nosotros los que os lo reventaremos: este artículo está libre de spoilers, así que puedes seguir leyendo sin miedo.
¿De qué va Endgame?
Hace 12.000 años, ellos vinieron. Descendieron del cielo en medio de humo y fuego, crearon la humanidad y nos dieron reglas con las que vivir. Ellos necesitaban oro y crearon nuestras primeras civilizaciones para minarlo por ellos. Se fueron cuando tenían lo que necesitaban. Pero antes de irse, nos dijeron que un día volverían, y cuando lo hicieran, comenzaría un juego. Un juego que determinaría nuestro futuro.
Nos subimos a la nave del misterio nada más comienza la sinopsis: una raza extraterrestre nos creó hace nosecuantos años para conseguir montones de oro, todo con base en las innumerables teorías existentes de magufos sobre que la raza humana tuvo origen, de una manera u otra, en los seres de arriba (que alguien avise a Enrique de Vicente, por favor). Es más, el propio libro nos advierte nada más empezar de que la historia es ficticia, pero que cuenta con una base real (algo que comprobaremos más adelante), y lo interesante comienza con ese juego que mencionan.
En un mundo habitado por 12 linajes milenarios, cada uno de ellos entrena a un joven jugador para que sea capaz de afrontar un acontecimiento catastrófico. Ha llegado el momento. Los 12 jugadores de los 12 linajes responden a La Llamada que les llevará a emprender una búsqueda por todo el mundo para encontrar tres llaves antiguas que salvarán su linaje y el mundo. Endgame ha comenzado. Y sólo uno de los 12 jugadores puede ganar. Los perdedores no sobrevivirán. ¿Te atreves a jugar?
Llegados a este punto, no puedo evitar hacerme la pregunta de si nuestra protagonista se va a llamar Katnip, o si algún antagonista va a tener el nombre de Ice o similar. Efectivamente, el libro ha sido criticado por sus coincidencias con la trilogía de Suzanne Collins desde sus inicios. Por no decir que, al parecer, el autor de Endgame está considerado como un capullo entre la comunidad lectora por resultar ser un mentiroso integral.
Dejando a un lado todo esto, y entrando en el terreno de lo personal, el libro es entretenido: se hace potable, aunque hay que admitir que tiene partes buenas y partes que es mejor no comentar. No soy muy de recomendar libros porque para gustos los colores, pero os gustará si os van todas estas historias de ciencia ficción con un puntillo de realidad, y si os gusta profundizar en la historia por lo que os vamos a contar a continuación. Eso sí, dejamos el comprobar si lo de los extraterrestres es verdad a los agentes Mulder y Scully del FBI.
Endgame ARG, el gran aliciente del juego final
Sin embargo, no me quedo con Endgame por su historia o la trama que nos presenta: me quedaría con Endgame por el atractivo juego de realidad alternativa (ARG) que Niantic ha montado en paralelo a los libros (y futura serie/película). Para los que no sepáis en qué consiste un ARG, podríamos decir que es una narración interactiva que utiliza el mundo real como soporte: es una mezcla de juego y puzzles que se nos presenta en forma de historia, y que tiene su base en buscar y compartir información.
Esta es la causa por la que, dentro del libro, nos encontramos decenas de enlaces que nos llevan a diferentes rincones de Internet: coordenadas con un enlace a Google Maps, enlaces a Wikipedia y búsquedas en Google que profundizan en la trama, frases crípticas que nos llevan a un vídeo en YouTube o a una de las muchas páginas creadas para la ocasión… incluso cada personaje tiene un perfil en Twitter y Google+ (aquí tenéis un ejemplo).
Además, nos encontraremos diversos «actores» detrás de las páginas web y vídeos de YouTube que también juegan un papel (secundario) dentro del juego, como este usuario de YouTube que afirma encontrar todos sus vídeos en la deep web mientras trata de establecer una conexión entre ellos. Todo parece tener una conexión, pero nosotros somos los que debemos establecerla.
Aquel que consiga resolver todas las pistas del juego, y dar con la llave, conseguirá hacerse con un premio de 500.000 dólares en oro real, almacenado en el Caesars Palace de Las Vegas. Un jugoso premio para aquel que consiga resolver el enigma y dar con esa llave, aunque ya os adelanto que no estáis solos en la competición: no son pocos los jugadores que afirman encontrar conexiones entre las pistas, sea cierto o sea un farol.
Sumado a este ARG principal, también tenemos otro ARG en forma de Endgame: Ancient Societies, que nos anima a seguir a Stella (una personaje creada para la ocasión con un pasado misterioso) para descubrir la verdad acerca de Endgame, e influir sobre la trama en las futuras novelas y películas de la saga. Eso sí, todo sincronizado con nuestra querida cuenta de Google+, algo que no debería extrañarnos sabiendo que Niantic Labs está detrás de todo esto.
Los libros electrónicos, un formato todavía a explotar
Lo cierto es que, alejándonos de la trama, Endgame no parece un libro hecho para el papel o los lectores de libros convencionales (aunque esté a la venta en esos formatos): todos esas puertas hacia Internet lo hacen perfecto para leer desde una tablet o un ordenador (ya os adelanto que el navegador experimental de Kindle sufre con Google Maps), dispositivos con los que poder profundizar de verdad en la trama, con todos esos enlaces que nos van conduciendo de un lado a otro de la red.
Además, Endgame también es un ejemplo perfecto del potencial que tiene el soporte electrónico para los libros: esa oportunidad de llevar nuestra experiencia más allá, de no quedarse sólo en el papel, y darnos más ganas de profundizar en el misterio que se nos plantea. Desde algo tan simple como enlazarnos ciertos términos, hasta llevarnos a un auténtico misterio que nos absorba por completo. Se pueden hacer grandes cosas con los libros electrónicos, lo único que falta son creadores con ganar de aprovechar el potencial que dan todas estas nuevas herramientas.