Tras una larga espera llena de rumores, al fin los nuevos Nexus se encuentran entre nosotros. Dos terminales con distintos enfoques fabricados por dos de los fabricantes más destacados del momento, LG y Huawei.
Uno de los puntos clave en los Nexus es la elección de fabricantes que Google toma para cada terminal, decisión que varía en cada año, y que nos incita a debatir sobre que fabricante será el elegido para el siguiente dispositivo en llevar la marca Nexus.
Un Xperia Nexus, la gran petición de los fans
En todos estos debates que surgen todos los años siempre ha habido un denominador común que los fans más acérrimos de Android, pero que con el tiempo ha ido perdiendo fuelle en las discusiones. Nos encantaría ver un Nexus hecho por Sony, y no nos faltan razones para ello.
La marca Nexus tradicionalmente se ha considerado un punto de unión entre Google y los mejores socios que apuestan por Android, siendo una apuesta segura para los usuarios que más disfrutan de Android. Dispositivos con el mejor hardware posible y abiertos para que la comunidad pueda disfrutar de ellos.
Sony es un fabricante que siempre ha sabido transmitir diseño en sus terminales, tanto en apariencia como en características, creando terminales con gran construcción y acabados, resistencia al agua, y todo ello sin sacrificar ninguno de los extras más valorados como la radio FM, tarjeta microSD o NFC.
Quizás el punto débil de Sony se encuentre en el software, con una capa de personalización que sin tener un mal funcionamiento, no terminaba de enamorar a los fans. Esto ha cambiado de forma radical con Android Lollipop, donde la versión de Sony se acerca a la pureza de Android que Google imprime en sus Nexus.
Parecerse al Android de Google no nos parece suficiente. Queremos un sistema optimizado al límite, con sus actualizaciones inmediatas y el buen soporte de Google a largo plazo, queremos que nuestro Xperia reciba el apoyo de la comunidad que reciben los Nexus, para que cuando Google decida que su vida útil ha finalizado, sigamos recibiendo la última versión, con custom ROMs donde los bugs brillan por su ausencia.
Google podría aportar mucho a Sony con el desarrollo de un Nexus, reafirmando su compromiso como socios de un mismo negocio, a la vez que mejora la imagen de la compañía nipona en territorios donde la popularidad de Sony como fabricante de smartphones no hace justicia a su buen hacer.
La relación entre ambos fabricantes beneficiaría sin duda a Sony, pero las relaciones siempre son cosa de dos. Google también podría salir ampliamente beneficiada en múltiples aspectos en una colaboración con Sony.
Si tuviese que definir a la marca Nexus con una palabra, probablemente sería cool o guay. No solo hablamos de la sensación de que todo vaya como la seda, sino que al representar sus modelos como una referencia para los fabricantes, suelen apuntarse muchos tantos que nos han encantado a lo largo de los años. Por citar algunos, podríamos hablar de la conectividad NFC, las pantallas curvas del Nexus S y Galaxy Nexus, la carga inalámbrica, los botones en pantalla o photosphere.
Esos pequeños detalles en gran parte de las ocasiones o no son útiles, o no los aprovechamos, pero están ahí y realmente marcan la diferencia. Con el ascenso en rendimiento de la gama media, la gama alta debe ir un paso más allá de ofrecer especificaciones, y todos estos detalles suman puntos. La resistencia al agua es otra características que cuando la ves en acción se te escapa un que guay, me gustaría que mi Nexus fuese resistente al agua.
Pero la resistencia al agua no sería la única lección que Sony podría darle a Google. Al ser la compañía japonesa el fabricante de cámaras móviles más grande del mercado, un Nexus de Sony podría optar a los mejores sensores del mercado, esos que desarrolla Sony y que incluye de forma exclusiva en sus dispositivos, mejorando uno de los puntos flacos de la marca Nexus, al igual que por otro lado mejorarían la autonomía.
Una de las características más famosas de Sony es el modo STAMINA, desde el cual podemos aumentar la autonomía de nuestro dispositivo. Una colaboración entre Sony y Google podría ayudar a crear el Nexus más eficiente en autonomía, integrando una implementación más genérica del famoso modo de Sony.
A estas alturas de la película no parece que en el futuro veamos un Xperia Nexus, aunque francamente nos encantaría, aunque fabricar un Nexus también tiene sus riesgos. En el desarrollo de estos dispositivos Google suele imponer sus decisiones con puño de hierro, y si llegase un Nexus de Sony al mercado puede que nos llegase un Xperia Nexus sin radio FM, sin slot para tarjetas microSD ni protección frente a líquidos.
Quizás antes de pedir un Xperia Nexus deberíamos mirar al pasado. Antes de la llegada del Nexus 6, los foros se encontraban repletos de gente que pensaba que un Motonexus sería el teléfono definitivo, y la historia nos ha demostrado que las cosas nunca salen como pedimos. Quizás pedir un Xperia Nexus donde Google tiene la última palabra no sea la mejor de las decisiones ¿nos la deberíamos volver a jugar pidiendo algo que no sabremos como saldrá?