De vez en cuando aparecen estudios que tras preguntas aparentemente estrafalarias lanzan datos interesantes. En este caso a alguien de Avast Software se le ocurrió preguntar a la gente si preferían ver violada la seguridad de sus datos bancarios o sus fotos desnudos una gran mayoría prefirió mostrar sus encantos al mundo antes que sus finanzas -aunque es posible que en muchos casos sólo encontrásemos telarañas se filtrara lo uno o lo otro-.
Pero como se empeñaba en demostrar el Dr Gregory House, todo el mundo miente. Preguntados si les preocupa la posibilidad de que alguien acceda a la información que tienen almacenada en el teléfono, según el país (la encuesta se realizó en once países) el sí se llevó desde el 90,6% de Brasil al 69,0% de la República Checa, dato que contrasta con el número de gente que bloquea su teléfono con un pin o patrón. En este caso los españoles somos los más precavidos, con un 87,6% de respuestas positivas, pero el dato cae por ejemplo a un 38,98% en el caso de Brasil o un 27,1% en el de Argentina.
Whatsapp y la galería fotográfica, las apps más bloqueadas
Cuando la pregunta fue qué tipo de información sería más doloroso para ellos que se filtrara al mundo, en todos los países la respuesta fueron datos financieros, excepto en México donde esta empató con datos personales con un 23,3%. Sin embargo, las aplicaciones que la gente tiende a bloquear más son Whatsapp 14,3%, las galería fotográfica (13,2%) y Facebook (9,4%). Las apps bancarias ni siquiera entran en el ranking de las diez primeras.
El terror tiene forma de madre
Otro dato curioso que deja este estudio es el pavor que despierta la capacidad de indagación de las madres, siendo la entidad cotilleadora en Francia, Argentina o Rusia, aunque en general los encuestadores temían más a los cibercriminales y al espionaje gubernamental, como en EEUU y Reino Unido. Por contra, la pareja es la persona que menos preocupa que entrase en estos datos.
En Latinoamérica, más indiferentes a la publicación de fotos íntimas
Como colofón final a la encuesta, se preguntó si preferían que se accediera a sus datos bancarios o a sus fotos desnudo -al más puro estilo de ese amigo que todos tenemos que te pregunta si prefieres a un orco o un troll para las cosas del amor-. En todos los países la respuesta políticamente correcta fue la más elegida: mejor que nos vean desnudos que la cuenta corriente. Es curioso ver como en el mundo anglosajón fue la respuesta ampliamente elegida -76,73% en EEUU y un 72,33% en Reino Unido- y en cambio la balanza se equilibra en los países latinos -61,51% en España y bajando hasta un 52,71% en México o un 51,28 en Argentina-.
La era de lo políticamente correcto
Una amplia mayoría asegura preocuparse más por sus datos bancarios que por sus fotos íntimas, sin embargo, mucha más gente bloquea el acceso a sus fotos o aplicaciones de mensajería. Como decía el doctor, todo el mundo miente.
Vía Arstechnica