Cuando la imaginación se traslada al mundo de la tecnología surgen un montón de conceptos que a todos nos gustaría ver materializados. De hecho, si miramos a las películas de ciencia ficción grabadas hace un par de décadas y las comparamos con la actualidad, veremos que muchas de las ensoñaciones tecnológicas terminaron por hacerse realidad. Y estamos realmente cómodos con ellas sin que apreciemos su enorme nivel de innovación.
Conceptos como el que planteó Project Ara y otras marcas que también se fijaron en la opción de fabricar móviles por piezas para que cualquiera pudiese armarse justo el smartphone con el que soñaba. Tal cual, parece un sueño, pero es realidad: actualmente podemos expandir las posibilidades del LG G5 con sus Amigos los módulos; y no tendremos que esperar mucho para que llegue Project Ara a los desarrolladores; y mucho menos para que veamos el Moto Z y sus MotoMods. Módulos por doquier. Pero ¿son como los imaginamos?
El concepto de móvil modular: el smartphone a lo bloques de lego
Quizá lo más cercano al móvil modular que se nos ocurre es poder construirnos el smartphone juntando diferentes piezas, como si fuese un Lego. PhoneBlocks tuvo esta idea que acabó desembocando en Project Ara: una base genérica sobre la que se asientan los componentes elegidos por el usuario.
Éste es el móvil modular soñado y también elegido como estándar, pero no es el concepto por el que parece que apuesten las marcas. Fijémonos en LG y, suponemos a tenor de las filtraciones, también en Lenovo con Moto. Ambas marcas apuestan por ofrecer un móvil ya completo como base sin que el usuario pueda modificar los aspectos clave del hardware. Aunque eso sí: puede añadir módulos con los que mejorar un punto concreto del uso.
A tenor de lo ya probado, más que móvil modular se trataría de un móvil con extensiones. Y esto tiene mucho sentido porque, no lo olvidemos, poner en venta todo un catálogo de módulos que se mantenga con ciertas garantías de futuro supone una inversión a la que casi todas las marcas no pueden llegar. Seguro que a LG le hubiese gustado lanzar un G5 a lo Project Ara, pero tropezó (seguramente) con los siguientes obstáculos:
- Como decía, la inversión que supone diseñar y fabricar módulos específicos para cada componente del móvil es casi inviable.
- Una marca concreta necesita lanzar novedades con cierta frecuencia para refrescar la atención de sus compradores, no puede centrar sus esfuerzos sólo en el desarrollo de módulos.
- El móvil modular es un concepto demasiado «de nicho». O lo que es lo mismo: aún no garantiza el retorno de la inversión más allá de que la marca desee realizar un experimento a largo plazo.
- El móvil modular para una marca supone cambiar la estrategia habitual por una gama fija de producto renovada por componentes. Como ninguna marca fabrica por sí misma dichos componentes (a excepción de Samsung, que casi podría ser autónoma), debería llegar a un acuerdo de fabricación para cada módulo, renovándolo cada cierto tiempo con la obligación de no acumular stocks. Una locura.
El móvil modular tal y como lo tenemos en mente no puede ir más allá de un experimento de mercado, algo que define claramente a Project Ara. De hecho, ha generado enorme interés entre la comunidad geek sin que existan plenas garantías de que pueda convertirse en un producto para el gran público. ¿Alguien llevaría un móvil capaz de explotar en veinte piezas con una caída en el suelo? Es una de las argumentaciones en contra más comunes, y razón no falta.
Carcasas a modo de extensiones, otro concepto de módulos
Primero un móvil modular a lo Project Ara, después el concepto intermedio del LG G5 donde desmontaríamos una parte del smartphpne para cambiarla o mejorarla y, en el otro extremo, tenemos los SmartMods de Moto. Hay que tomarlos aún en duda, pero, por la fiabilidad de la fuente y la línea que ha seguido la filtración, estas carcasas parecen bastante fiables.
A una marca le resultaría más sencillo fabricar extensiones que módulos
La idea sería la siguiente: el Moto Z dispone de una cara trasera con conectores en la parte inferior a los que podría adherirse una funda o carcasa con funciones añadidas. Más batería, un soporte o, incluso, una lente completa de cámara. No se sacrificaría en ningún momento la integridad del teléfono, seguiría de una pieza, no habría que reiniciar para activar el módulo (en teoría) y, seguramente, estos módulos mantendrían un mejor futuro de cara a los móviles siguientes.
Es teoría, pero resulta más que plausible. ¿Por qué sacrificar la construcción del teléfono si se puede fabricar un unibody con extensiones? Sin duda, no se trata del móvil modular que todos entendemos, pero tampoco sería una mala aproximación. Al menos sobre el papel.
¿Cómo preferís el móvil modular? Toca debatir
Personalmente, a mí me atrae la idea de Project Ara, aunque habrá que ver cómo evolucionan los módulos, sus precios y la disponibilidad más allá de los desarrolladores. He probado la propuesta de LG y no me parece mala, aunque sí tengo la sensación de que no han sabido aprovecharla al 100 %. Y de Moto… Guardo mucho interés por esa carcasa cámara, tiene buena pinta.
¿Os gustan los móviles modulares? Y de ser así, ¿por qué tipo de ellos apostaríais? Debatamos.