Lo primero que nos entra por los ojos cuando vemos un dispositivo nuevo es el diseño: la forma que tiene el teléfono, las curvas que dibuja su marco, el material con el que está construído… y eso sin contar con cómo lo sentimos cuando lo tenemos en la mano, cuánto de cómodo y atractivo es usarlo cada día.

Y es normal que los fabricantes vean en otros ideas que funcionan en el apartado del diseño, y traten de implementarla por ellos mismos en sus dispositivos. Con esto surge una pregunta: ¿dónde se coloca la línea entre inspiración y plagio puro y duro? 

Primera ronda: Xiaomi Mi5s vs iPhone 7

Comenzamos con el último lanzamiento de Xiaomi: una renovación de su buque insignia presentado en el MWC, el Xiaomi Mi5, que saldrá al mercado a finales de septiembre. Componentes de gama alta, características punteras y todo lo que podemos esperar de un gama alta por algo más de 260 euros, el fabricante chino vuelve a presentar competición en el mercado.

El caso es que su diseño no puede evitar recordarnos al iPhone 7 que Apple también ha presentado en septiembre, e incluso al iPhone 6S que se presentó el año pasado.

La posición de la cámara, la antena que forma el borde en la parte superior o el cristal elevado respecto al borde son parecidos, si no son idénticos. Incluso la estrategia de incorporar una cámara doble con la versión más grande, aunque la doble cámara de cada uno varía. Sin duda Xiaomi se caracteriza por aprovechar el tirón de la manzana para ellos recibir un extra de publicidad que nunca viene mal.

Segunda ronda: HTC One A9 vs iPhone 6s

Con el HTC One A9 tenemos que remontarnos al año pasado, fecha en la que el fabricante taiwanés presentó en sociedad su teléfono destinado a las gamas medias. En su momento causó una reacción entre el público peculiar, porque sus similitudes con el iPhone 6 eran más que evidentes.

HTC afirma que lo único que estaban haciendo es continuar con el diseño que estrenó el HTC One M7, cuando los iPhone estaban construidos en cristal -recordemos que el 6 hizo el paso al metal, y muchos defienden que Apple se copió de HTC en ese momento-, pero detalles como el botón frontal o la posición de las antenas no ayudan al argumento de Taiwán.

Tercera ronda: Elephone S3 (y más) vs Samsung Galaxy S6 Edge

El Samsung Galaxy S6 Edge estrenó las pantallas con doble borde en el mercado, después de intentos tímidos de Samsung de curvar sólo un lado de la pantalla, y la estrategia les ha salido de maravilla: actualizaron el S6 Edge para hacerlo más grande, y el Galaxy S7 Edge y Galaxy Note 7 han apostado aún más fuerte por esta tendencia.

El resto de fabricantes no han pasado por alto esta tendencia, y ya existen móviles chinos que se han interesado por ello. Samsung está encantada de suministrarles las pantallas, son más ingresos para la rama de pantallas de la compañía y ayudará a amortizar los costes de la producción en masa, ¿pero no son una copia muy descarada del intento de Samsung?

¿Es posible innovar en el mundo de los smartphones?

Antes de nada, los smartphones no dejan de ser rectángulos construidos en plástico, cristal o metal, con una pantalla en el frente. Es complicado innovar en un mercado donde la forma es invariable, donde estamos acostumbrados a que todos los smartphones sea más o menos similar, donde sabemos lo que funciona y los fabricantes tienen 4 formatos contados.

Está claro que esto no justifica plagiar a tu rival, buena parte de los recursos de una compañía de smartphones van destinados a tratar de innovar en apartados como el diseño o las características, pero partimos desde una base en la que es casi imposible ser diferente por completo. ¿Qué no se ha intentado ya en el mercado de los smartphones?

Coger buenas ideas de otros fabricantes tampoco se podría considerar un plagio sabiendo que hay pocas opciones que funcionan, no es malo coger una buena idea e implementarla a tu estilo. Pero tampoco es plan plagiar por completo un dispositivo, sin darle una vuelta o adaptarlo a tus líneas.

¿Cuál es vuestra opinión? ¿Dónde ponemos la línea entre el plagio y la inspiración? ¿Los casos de arriba son plagio o inspiración?