El ordenador ha llegado a su fin, larga vida al móvil
El ordenador ha pasado de ser el centro informático de las familias a quedar criando polvo en un rincón. ¿Dejaste de usarlo para centrarte en el móvil?
6 enero, 2017 20:01El ordenador ha pasado de ser el centro informático de las familias a quedar criando polvo en un rincón. ¿Eres de los que ha dejado de usarlo en favor del móvil?
Cuando el PC entró en los hogares la informática rompió una de las últimas barreras que quedaban: el uso doméstico mayoritario. Gracias a los ordenadores clónicos Internet pudo entrar en casi cualquier casa sin que hiciese falta un enorme esfuerzo monetario. También las conexiones fueron abaratándose hasta conseguir la popularización de la web, redes sociales y mensajería.
Ya no concebimos nuestro mundo sin Internet, pero sí que nos hicimos a la idea de que los ordenadores casi pasaron a mejor vida. Quizá no te hayas dado cuenta, pero poco a poco fuiste arrinconando al PC para utilizar sólo la pantalla pequeña. O no, es lo que intentamos averiguar hoy.
¿Dejaste de usar el ordenador para utilizar sólo el móvil?
Aquí entra en juego un tipo de usuario que no puede plantearse el estar lejos de un ordenador: los que necesitan este dispositivo para trabajar. Como es mi caso: a pesar de que utilizo el móvil durante todo el día, el estar redactando y buscando información para El Androide Libre me obliga a depender de un ordenador. En concreto, de un portátil.
Analizando mi uso personal, y asumiendo la hipótesis de que no trabajase en el campo del periodismo, creo que sería de aquellos que dejan de lado el ordenador para centrarse en el móvil. Tengo las redes sociales más accesibles, la navegación web es excelente gracias a la adaptación de las páginas a formato smartphone, la mensajería ha evolucionado para hacerse fuerte en móviles… Incluso he llegado a trabajar desde él, resulta factible.
Ahora te pregunto a ti. ¿Has abandonado el ordenador para utilizar sólo el móvil o sigues usando el teclado físico junto a una pantalla más grande? Y la pregunta clave: ¿le ha llegado la hora al ordenador?