Hay alegrías que sólo entenderá un androide de corazón, uno de los que lleva usando Android en el móvil desde los primeros años. Recopilamos las 10 más emotivas.
Los androides somos curiosos, nos encanta poner el móvil justo como queremos, sabemos que siempre habrá un teléfono que se adaptará a nuestro bolsillo y que no por eso será necesariamente malo. Los androides somos legión, literalmente. Y también sentimos orgullo por el muñeco verde que nos representa. Alegría, eso es lo que sentimos: alegría de ser androides.
No todos pueden entender a quienes amamos Android y hemos convivido con él desde que era tan solo un cachorrillo de ceros, unos y widgets. Para apreciarlo hay que sentir la alegría de acariciar las pantallas que lo llevan instalado como esa sangre que corre por nuestras venas androides. No todos entenderán estas alegrías, pero seguro que tú sí, androide de corazón.
1. Puedo poner la interfaz que me dé la gana
En poder elegir está la alegría de la vida, que si no todo sería más soso que comerse una sopa de yeso. ¿Que quieres una capa repleta de widgets? No hay problema. ¿Minimalista? Infinitas opciones. ¿Que quieres que tu móvil parezca un iPhone? No sería de buen androide, pero por poder… A ver si la competencia dice lo mismo.
2. Puedo instalar las aplicaciones que quiera
Esto es amor de Android, Google lo hizo bien desde el principio. Sin necesidad de Jailbreak ni historias. ¿Que quieres ponerle a tu móvil una aplicación que no está en la tienda oficial? Activas la opción de orígenes desconocidos y listo. Esto sí es un triunfo y no el de Trump en sus elecciones.
3. Puedo gastarme lo que quiera en un teléfono
Dependiendo del precio quizá sea mejor comunicarse con un bongo, pero opciones hay. Menos de 60 euros, hasta 200, 600, este Solarin de 15.000 euros… Será por precios. Y en todos se puede usar WhatsApp, Telegram, Facebook y hasta Tinder, las apps más habituales. (guiño, guiño)
4. Comparto cualquier cosa en segundos
Siempre ha sido una de las señas de identidad androide. Ves un tweet y lo compartes por Telegram. Una página de Chrome que en un segundo envías por WhatsApp al grupo que está pidiendo carnaza. Así con casi cualquier aplicación, sin limitaciones. Ya lo decía Robin Hood: hay que compartir. Y eso que Robin no tenía NFC…
5. Emuladores, venid a mí
No es que otros sistemas carezcan de emuladores, pero casi brillan por su ausencia. Complicados de utilizar, engorrosos a la hora de cargar ROMs… En Android basta con descargarlos desde la Google Play Store y, después, poner tus juegos preferidos, esos que mantienes en cartucho como el primer día.
6. Yo decido el tamaño de mi móvil
4,6 pulgadas, como las del Sony Xperia X Compact. O 6,4 pulgadas, como en el Xiaomi Mi Mix. Hay tamaños para todos los gustos, como los hermanos Dalton. Y en Android siempre será una decisión personal.
7. Tengo SD
Anda que no es una alegría la tarjeta SD… Vale que a Google no le gusta, pero es algo mayoritario en Android. Un móvil con suficiente espacio para instalar apps y una tarjeta SD en la que subir toda la música, películas, porn… Netflix, una SD en la que meter todas las series de Netflix. Por no hablar de las fotos y vídeos de la cámara, devoran GB como Homer se infla de Donuts.
8. Benditas ROMs
Cambiar la ROM es uno de los placeres que sólo podemos experimentar los androides. Buscar la más novedosa, flashearla desde el Recovery, tardar una hora en recuperar todas las aplicaciones y ajustes… Y disfrutarla durante unos días porque sale otra ROM que te apetece probar. Libertad, bendita libertad.
9. Las innovaciones son androides
Asistimos a tal cantidad de innovaciones en móviles que no podría enumerarlas todas. Y la mayor parte de ellas, al menos en el terreno smartphone, pasan por Android. NFC, pantallas curvas, cámaras dobles, smartphones como tablas de planchar… No todas son prácticas, pero se nota que los fabricantes tienen imaginación.
10. Puedo devolver las aplicaciones si no me gustan
Y sin dar ningún tipo de explicación: basta con devolverla desde la Google Play o desinstalarla del móvil, todo dentro del plazo de dos horas. La competencia ha mejorado en este punto, pero sigue siendo infinitamente mejor y más sencillo en Android. Probar las apps antes de pagarlas definitivamente es un completo «win».
Hay muchas más alegrías, pero ahora te dejo que las enumeres tú. ¿Qué es lo que más feliz te hace de Android? Despierta tu corazoncito verde.