Lo he descargado más de diez veces, las mismas que lo desinstalé. Pero ahora no puedo: estoy enganchado a Clash Royale. ¿Qué tiene este juego?
Hemos hablado hasta la saciedad de Clash Royale, es un juego que arrastra millones de usuarios. Tal es su fama que son pocos los dueños de un móvil que no lo han probado alguna vez. Partidas rápidas, duelos épicos, cartas coleccionables, criaturas mitológicas que podremos mandar como si de un ejército se tratara…
Clash Royale está hecho con ingredientes bien elegidos que se aderezan con excelentes gráficos y las dosis justas de dificultad en el inicio para conseguir que los nuevos jugadores caigan sin remedio en su telaraña. Siempre me he resistido, más que nada porque no le veía el interés. Hasta ahora.
Cuando todos tus amigos se enganchan al final caes
Hablar de aplicaciones y juegos implica conocer en profundidad todo lo que ofrecen y cómo pueden aprovecharse. Como cada uno tiene sus gustos es lógico que los redactores nos distribuyamos en trabajo en función de nuestros conocimientos. Tú hablas de ROOT, él de redes móviles… Y mi compañero Justo de Clash Royale.
Justo es de los que le dedican unas cuantas horas cada semana a combatir en las arenas para adquirir conocimientos que transmitir a todos los que leéis El Androide Libre. Y siempre me decía: «Tienes que jugarlo, verás como le pillas el gusto».
Lo intenté. De hecho, Clash Royale es la aplicación que más veces he descargado y desinstalado después de Snapchat. Pero no había manera, no le encontraba sentido a un juego que, lejos de promover algo original, juntaba diversos géneros dentro de un batiburrillo casual repleto de compras in-app. «Una última vez», me dije. «Descárgalo una última vez». El afán de conocer de primera mano el fenómeno móvil en eSports hizo que cayera definitivamente en sus redes.
Tanto me empeñé en que me gustara que al final me gustó… demasiado
Clash Royale es de esos juegos que no te muestran de golpe todo lo que ofrecen. Al contrario: para apreciar su inmensidad tienes que esforzarte entendiendo las reglas, practicando durante incontables batallas y, sobre todo, degustando el dulce sabor de las victorias obteniendo a cambio los deliciosos cofres con cartas nuevas. Droga pura.
Qué divertido es el dichoso Clash Royale, oye
Hay cientos de juegos tan o más divertidos que Clash Royale, pero este añade un punto de competitividad y coleccionismo del que no puedes librarte una vez caes en sus redes. Además, tiene un extra que termina por atraparte: es uno de los juegos que más público atrae, por lo que siempre encuentras partidas en décimas de segundo y con contrincantes de tu nivel. Más o menos, que puede caerte la del pulpo en menos de 30 segundos.
Clash Royale se adapta al nivel del jugador para que no sea frustrante avanzar
El tiempo es fundamental: son partidas rápidas, de 3 minutos concretamente. Esto hace que quieras encadenarlas como quien se enfrenta a una bolsa de palomitas sabiendo que no parará hasta que se acaben. Pero claro, Clash Royale no se agota nunca, los desarrolladores mantienen el juego tan bien que supone un reto tengas el nivel que tengas. Especialmente cuando quieres progresar, algo que ocurre más al principio.
No todo son rosas, que también se esconde algún cardo. Me refiero a las dichosas compras in-app, Clash Royale incita a mejorar rápido a base de comprar monedas y gemas. No es nada nuevo, como decía antes: los juegos móviles se basan en esta fórmula para obtener sus ingresos. Y creo que en Clash Royale se encuentran bastante bien resueltos; por más que suponga un desnivel enorme entre quienes van poco a poco y los que sueltan la pasta por cubrirse antes de gloria.
Soy de los que juegan y de quienes tienen en su memoria un gran puñado de recuerdos envueltos en algunos títulos míticos. Reconozco que no suelo jugar con el móvil porque sé que me acaba robando tiempo de trabajo, de ahí que tampoco quisiese engancharme al Clash Royale. Hubiese apostado por que este juego no podría con mi auto control, pero habría perdido. Igual que llevo perdiendo las últimas batallas y ardo en deseos de terminar este artículo para volver a la arena.
Un juego recomendado para los casual y también para los hard gamers
Clash Royale se propone una buena cantidad de retos y termina por conseguirlos todos. No solo es apto para partidas rápidas, también para quienes elaboran estrategias a largo plazo; un juego gratuito que equipara a los jugadores que no pagan nada con los que sueltan la pasta en las in-app; y un título móvil que traspasa fronteras para hacerse casi universal.
Siempre fui reticente, pero heme aquí, enganchado al dichoso Clash Royale. Aún no he subido de Arena y solo estoy en el nivel 3, pero ya ando con el vicio de seguir progresando en mi partida. Por cierto, aún no tengo clan. ¿Alguna sugerencia?