Muchas de las novedades del nuevo iPhone de Apple ya las conocíamos de Android. ¿Se ha copiado Apple de Samsung? ¿Qué sacamos los usuarios de esta guerra de marcas? Analizamos lo que significa copiar.
La presentación de los nuevos iPhone siempre es un evento que siempre miramos de cerca que novedades presentan los de Cupertino. Sí, estamos en un blog de Android, y no nos llamamos «El iPhone Libre», pero hay que recordar que a veces para aprender más también importa mirar a los demás. Ver lo que hacen, y qué podemos aprender de ellos. Y en ocasiones, ver que los demás también aprenden de nosotros.
En la presentación del nuevo iPhone podemos ver que Apple ha aprendido mucho de Android y su variedad, especialmente de su rival más directo. Hablamos de Samsung.
Apple ha copiado mucho a Samsung ¿Realmente es algo malo?
Con el titular de hoy hemos ido un poco a una de las posibles interpretaciones del mercado. Para muchos, al ver el nuevo iPhone X podrían pensar «Es una copia de los Samsung Galaxy S8 y Note 8», y según lo estrictos que nos pongamos, podrían tener razón.
Carga rápida, carga inalámbrica, pantalla casi sin marcos, un reconocimiento facial casi imposible de engañar, doble estabilización óptica en las cámaras traseras, diseño que combina el metal y cristal (aunque esto ya lo vimos en el iPhone 4), son algunas de las características del nuevo iPhone, y desde luego son características que ya hemos disfrutado en mayor o menor medida en móviles Android. La mayoría en Samsung, pero también en otros terminales de otras marcas, como puede ser LG.
En vez de odiar a Apple, tendría más sentido elogiar a Samsung.
Todos copian a todos, pero siempre hay mejoras
Vamos a partir de una base. Crear algo partiendo de una idea original suele ser un mérito que muy pocos suelen atribuirse. Normalmente una tecnología es creada en laboratorios o centros de i+D, y no suele tener valor hasta que alguien le da un sentido.
Darle sentido a la tecnología es algo complicado y arriesgado, es algo que si fallas te puede llevar a la ruina, y si lo haces bien todos te van a copiar. A causa de ello se crearon las patentes, para dar retribución a quien tuvo la idea y proteger su propiedad intelectual.
Normalmente el tema de las patentes suele tergiversarse al lado negativo (los absurdos juicios que ya conocemos) pero están ahí por algo. Si Apple está utilizando tecnología patentada por otra empresa, tendrá que obtener una licencia (retribuyendo a su creador). No solo Apple, sino cualquier compañía que infrinja patentes de otras.
Si todos apostasen por tecnología propietaria, el mercado sería un desastre.
En mi aspecto personal, creo que a la hora de elegir entre un iPhone y otro móvil la diferencia reside en el sistema operativo. Android e iOS se encuentran en un nivel de madurez similar. Algunos preferimos Android, otros prefieren iOS, pero creo que todos merecemos poder tener acceso a las mejores características, sea cual sea nuestro sistema favorito.
Vamos con iOS, me encantaría que la tecnología 3D Touch hubiese calado mejor en Android, y lo cierto es que viendo el nivel de desarrollo de ARKit frente a ARCore, envidio un poco eso. También quiero tener TrueTone en mi móvil Android (actualmente un Honor 9), pero no me pienso comprar un iPhone. Estas son las cosas que hacen que todos avancemos.
Las discusiones sobre quien ha copiado a quien no cambian nada
Pero vayamos al carro. En ocasiones suele haber discusiones entre fans. Que si os paga Sony, que si solo hablamos de Samsung, que si El iPhone Libre. Al final, los encargados de la redacción en este y otros blogs somos personas humanas, no robots a los que se les inyecta dinero a cambio de publicidad.
El lado humano de nuestras opiniones parte de que cada usuario tiene sus favoritismos. Aquí dentro de El Androide Libre hay redactores a los que les encanta Samsung, otros que lo detestan. Algunos tienen un iPhone, otros son enormes fans de Xiaomi y otros desean que los Nexus regresen al mercado. Incluso un servidor está encantado con el Honor 9 y la capa de personalización de Emui.
Como usuarios, discutir sobre quien copió a quien solo crea peleas sin ganadores.
Pero por delante de todo, nuestra visión es mirar al mercado y hacia donde avanza la industria, y preguntarnos el por qué de las cosas. De ser constructivos, de mirar a cada nuevo lanzamiento y pensar «wow, me encantaría que mi móvil pueda hacer eso».
Al final, como usuarios, lo que perseguimos es tener el máximo valor al mejor precio, y si los fabricantes no se inspirasen continuamente los unos a los otros, tendríamos engendros de móviles con pantallas en forma de estrella, o incluso cosas peores. Tendríamos monopolios.