Las valoraciones no solo ayudan a los usuarios a decantarse por una aplicación, también colaboran en que la app ascienda puestos en la Google Play Store. De ahí que haya desarrolladores que se decanten por las trampas.
Internet ha revolucionado numerosos ámbitos. Y uno donde más lo ha hecho ha sido en el de las recomendaciones. Cuando antes comprábamos un producto o contratábamos un servicio la única ayuda que teníamos era la de nuestros amigos. Ahora podemos ver en tiempo real las valoraciones públicas de otros usuarios. La «tiranía de las 5 estrellas» afecta por igual a los dueños de un hotel como a los desarrolladores de una aplicación.
No supone mucho esfuerzo y a menudo sentimos que colaboramos con el desarrollador y, sobre todo, con quienes se encuentran en la misma tesitura que nosotros. Cada cual tiene su propia vara de medir, pero todos tenemos claro que las 5 estrellas implican que la app es excelente y que otorgar solo una es señal de que lo más adecuado es alejarse de la aplicación. Esto en principio, porque siempre hay quienes se aprovechan de la importancia de las valoraciones.
Cuando el desarrollador te «obliga» a valorar con 5 estrellas
No es una estrategia que pueda considerarse como habitual, pero sí me he topado con varias aplicaciones que la utilizan para subir en los puestos de la Google Play Store y ganar con ello más reputación; sumado a un mayor número de descargas, como es obvio. La metodología es como sigue:
- La aplicación suele ser gratuita y con un número de valoraciones muy positivas.
- Una vez abierta la aplicación suele saltar un mensaje que «obliga» a dejar una valoración de 5 estrellas.
- La app no funcionará hasta que detecte que dicha valoración se ha realizado.
- También puede darse el caso de que el usuario desbloquee funciones especiales de la aplicación con una valoración de 5 estrellas.
Este modo de actuar supone una medida de coacción al usuario que vulnera la libertad en el uso de aplicaciones. No solo eso, Google especifica claramente en su política de desarrolladores que incentivar el inflado de los votos positivos no está permitido. Podemos leer en dicha política:
Los desarrolladores no deben intentar amañar el posicionamiento de ninguna aplicación en Google Play. Esto significa que, entre otros aspectos, no se deben inflar de forma ilegítima los datos sobre las valoraciones, las opiniones ni los recuentos de instalaciones de productos (por ejemplo, mediante valoraciones, opiniones o instalaciones fraudulentas o incentivadas).
Obligar a que el usuario vote con 5 estrellas no solo está prohibido por Google, también es una estrategia que ensucia la finalidad de las valoraciones y termina engañando al resto de personas que se fijan en los votos positivos para descargar o no una aplicación. Un ejemplo de este modo de operar podría ser «Speed Test Pro«: con casi 100 000 valoraciones de 5 estrellas solo hay que ver algunos de los comentarios para descubrir la manera de actuar. En este caso concreto solo es para quitar los anuncios, pero hay aplicaciones que no se abren hasta que no se valoran.
Las valoraciones son una herramienta demasiado fácil de manipular
Resulta inevitable fijarse en las valoraciones antes de descargar una aplicación. De hecho es una de las recomendaciones básicas a la hora de asegurarse de que una app es lo que dice ser: los usuarios suelen comentar de manera acertada acerca de la calidad del software. Aunque claro, los trucos sucios evidencian lo fácil que resulta manipular las opiniones.
No es algo habitual, pero sí que lo hemos visto en demasiadas ocasiones. Y la pregunta es clara: ¿Google no tiene una manera de detectar el inflado de votos demasiado positivos? Vale que cuando una aplicación es buena resulta lógico que tenga un gran número de votos con 5 estrellas, pero sí es extraño que una app guarde una relación demasiado estrecha entre esas valoraciones y su número de descargas.
Internet trajo la democratización de las opiniones, pero también la tiranía de las mismas. No solo con las de 5 estrellas, especialmente con las de 1 estrella. ¿Cuántas veces no habremos leído eso de «Le daré más estrellas cuando mejore en lo que no me gusta«. Si bien no es tan reprochable como una mala estrategia del desarrollador, sí que es una mala actitud que debemos erradicar. Cuanto más realistas sean las valoraciones más segura será la tienda de apps.