Os cuento todo lo que concierne a mi Android y a lo que llevo en él. Mi viejo OnePlus X sigue dando guerra y hasta que no sea reemplazado seguirá dándole.
Y es que todavía me acuerdo del día que me llegó a mi casa de Holanda. Mi flamante OnePlus X, nuevo y recién salido de la caja. Recuerdo todavía ese momento en el que su brillo y lustrosidad me cegaron. Ahora ese brillo se ha perdido y dado paso a una parte trasera llena de arañazos y marcas que demuestran el tiempo que ha pasado a mi lado.
Este OnePlus X sigue siendo mi teléfono personal, y hoy os contaré todo lo que lo conforma. Apps, configuración, y todo lo que hay que saber acerca de este pequeñín. Un pequeño spoiler: gracias a la comunidad Android disfruto de la última versión del sistema disponible, Android 8.1.
Mi teléfono: el OnePlus X
Este es mi teléfono, el OnePlus X. Un dispositivo que como podéis ver ha vivido días mejores y cuyo glamour general ha pasado a mejor vida. Pero sigue siendo un Android bastante decente para llevar para el día a día. Si bien es cierto que pienso reemplazarlo dentro de poco, aún le queda un trote quedar a este teléfono chino.
En el apartado del hardware no andamos para nada justos. Podríamos considerar que su Qualcomm Snapdragon 801 está por debajo de los estándares de potencia actual, pero nada más lejos de la realidad. Sus 3GB de memoria RAM son suficientes para el día a día y el almacenamiento de 16GB no es problema gracias a la posibilidad de ser expandido con tarjetas micro-SD.
Pero sin duda el punto que más disfruto de este OnePlus X es su pantalla. Tenemos un panel compacto de 5 pulgadas con resolución Full HD 1080p y tecnología Super AMOLED. Unos negros puros y unos colores vibrantes que siguen confirmando la calidad de esta pantalla años después de su fabricación. Y por si alguno de vosotros os lo preguntábais, sí. Está quemada y denota ya el paso del tiempo.
Por supuesto sus puntos más negativos son la falta de NFC, de USB tipo C, la batería de 2550 mAh degradada con el tiempo y sobre todo el soporte. Oficialmente, OnePlus abandonó este teléfono en Android 6.0 Marshmallow, por lo que tengo que tirar obligatoriamente de ROMs personalizadas para disfrutar de lo último en Android.
Android 8.1, versión que da vida a mi OnePlus X
Llevaba ya frustrado varios meses al ver que numerosos desarrolladores abandonaban a este teléfono a su suerte. Todas y cada una de las ROMs que encontraba de este dispositivo estaban desactualizadas hacía meses y muchas ni siquiera eran funcionales del todo. Encontré una muy estable de la que ya os hablé, pero databa de mediados de este año.
Tengo que dar agradecimientos especiales al usuario de XDA Developers, YumeMichi por haber creado la ROM AOSP de Android 8.1 de la que disfruto ahora. Una ROM que funciona bastante bien a pesar de ser beta y que mantiene tanto los aspectos clásicos de Oxygen OS como los de una ROM pura y dura de Android 8.1. Gracias a él, tengo oportunidad de catar lo último en Android.
Android 8.1 en un OnePlus X. ¡Gracias, XDA Developers!
Y sorprendentemente funciona todo. El Picture in picture, Google Assistant… Y tampoco podemos olvidarnos de que esta ROM, de nuevo de forma sorprendente, está actualizada a día de hoy. La última «build» es de hace unos pocos días, y es que es un gustazo tener todo tan a mano aunque su funcionamiento no sea el más idóneo en algunos casos.
¿Qué apps uso en mi día a día?
Como podéis apreciar, soy un obseso de la personalización. Y ya que tenía la posibilidad de usar Android Oreo en mi teléfono, algo casi impensable dado su edad, quería personalizarlo al máximo con la temática disponible. Os pondré la lista de las apps que más uso a diario tanto para personalizar como para usar mi dispositivo de forma general:
- Nova Launcher Prime. ¿Qué más decir del mejor launcher de Android? La mejor herramienta para dejarlo todo como a mí me gusta.
- Substratum. Temas, temas, y más temas. Personalización al poder de la mano de las capas de esta genial app.
- Telegram. ¿Acaso hace falta decir algo más de esta increíble app de mensajería?
- WhatsApp Messenger. Me guste más o menos, en esta sociedad es imposible no tener que usarla.
- Chrome. El navegador por defecto de Chrome ha conseguido apartar de mi cabeza las otras alternativas en navegadores de Android.
- Zooper Widget Pro. Tras su vuelta triunfal en la Play Store, esta app de gestor de widgets le da ese toque que necesito a mi Android.
- Google Home. No podía dejar atrás la app con la que g estiono mi Chromecast.
- Netflix. Ni de lejos podría vivir sin mis series favoritas.
- Shuttle+ Music Player. ¿El mejor reproductor de música en Android? Puede ser.
- Spotify. Cuando tengo internet estable, prefiero escuchar mi música con la mayor calidad posible.
- Navbar Apps. Esta app tematiza con el color de la app ejecutada la barra de navegación. Lo dicho, personalización al poder.
- Chrooma Keyboard. Un teclado con la misma función que Navbar Apps. ¿Alguien dijo personalización? Sí.
- Inbox. El mejor gestor de correos electrónicos forma parte de mi elenco de apps.
- Monument Valley 2. Uno de los mejores juegos de Android tampoco podía faltar en este listado.
- La saga The Room. Una de las mejores sagas de juegos de Android con la que disfruto cada vez que la juego.
Accesorios de mi OnePlus X
Debido a mis planes de cambiar este dispositivo por un Xiaomi Mi A1 dentro de poco (teléfono que seleccioné en el listado de móviles favoritos del equipo de El Androide Libre) no es que tenga accesorios como tal. Será con el teléfono chino de Xiaomi con el que seré más mimoso, pero de momento, mi único accesorio en el OnePlus X es la funda «Sandstone».
Se trata de una funda oficial de OnePlus que intentaba emular el tacto de arenisca que caracterizó a los primeros trabajos de OnePlus. No es que tenga el mejor tacto del mundo, pero le da un aspecto estilizado y único a mi OnePlus X, aparte de protegerlo (lo mejor posible) de las inclemencias del tiempo ante su trasera de cristal.
Historia de una decepción
Tuve en mis manos los dos primeros teléfonos de la marca, el OnePlus One y el OnePlus Two. No los tuve durante mucho, pero pude catar sus bondades y me quedé encandilado. OnePlus había resultado ser una de mis opciones principales a la hora de comprar un teléfono. Y viendo el precio y las prestaciones del OnePlus X, no dudé en adquirirlo en cuanto tuve ocasión.
Y tras ese breve lapso de tiempo, me desengañé. No sólo se abandonó prematuramente al OnePlus X (y al OnePlus 2), sino que estuvieron un año entero mareándonos para actualizar a Marshmallow en una ROM repleta de bugs y errores bastante fastidiosos. Sigo con este teléfono porque me encantó en su momento. Pero… han perdido un cliente.
Con esto no digo que OnePlus no me guste. Por algo sigo llevando su dispositivo, porque me gusta y porque satisface mis necesidades. Pero que esto sirva de aviso para la empresa china. No cometáis el error de reproducir errores pasados, porque de hacerlo, tendréis otra vez a unos usuarios defraudados que recuerdan más que perdonan. ¿Os daré otra oportunidad? Puede.
Y el que aún mantenga a mi OnePlus X a día de hoy es la prueba fehaciente de ello.