Aunque me gusta mucho la tecnología y suelo probar los servicios y apps que considero interesantes, con las apps sociales suelo ser bastante escéptico. Aunque las instale para probarlas no me gusta estar pendientes de más servicios de la cuenta.
En 2008 unos amigos me insistieron para que me creara un perfil de Facebook y tras hacerlo, lo cerré. A los pocos meses volví con fuerzas renovadas y fui lo que podemos considerar un heavy user. Fotos a diario, comentarios con 200 respuestas, gente nueva, bromas, vídeos… todo era divertido.
Pero como todo en la vida, las cosas cambian. Y en este caso las políticas de Facebook no ayudan.
Tras 10 años desinstalo la app de Facebook
Cada 10 o 15 días tengo que llevar a cabo un ritual en el que configuro todas mis apps Android. EL motivo es que ese es el tiempo que pasa entre una prueba de un móvil y otra. Pero en el último hubo algo que hice diferente. No instalé Facebook.
Una semana después, cuando he vuelto a mi móvil principal, he desinstalado la aplicación del terminal, me he dado cuenta de que no tengo ningún motivo para dejarla instalada y sí muchos para no hacerlo.
Por la monitorización
No soy ni mucho menos un paranoico de la seguridad o la privacidad. Tengo cierto cuidado con lo que digo o hago como lo tengo en el mundo real, pero el hecho de que Facebook pueda saber qué hago con mi móvil aunque no abra su app no me gusta.
Es cierto que es algo que puede hacer cualquier aplicación y que se mantendrá hasta la llegada de Android P, pero la fama de la compañía de Mark Zuckerberg le precede.
Por los recursos
Una de las apps que solía abrir cuando instalaba un móvil era Facebook, porque es una de las que peor funcionan. Es lenta, a veces falla y ocupa una barbaridad en la memoria del móvil, tanto por la aplicación como por la caché de la misma.
Aunque ahora tengo un móvil de potencia y capacidad suficiente veía absurdo destinar recursos a algo que no usaba a diario.
Porque puedo seguir usando la cuenta
Aunque es algo que no descarto a medio plazo, por el momento no voy a eliminar mi perfil del sistema. Es algo que como os he dicho ya hice una vez y no sé si volveré a hacer mas adelante pero por ahora puedo seguir mirando lo que necesite a través del navegador web.
El otro día tuve que hacer una consulta sobre una persona y simplemente puse mi usuario y contraseña, hice la búsqueda y cerré posteriormente la pestaña. Ya está.
Facebook está actualmente en una situación envidiable en lo que a ingresos e impacto se refiere pero cada vez más usuarios dejan de usar la app como la usaban antes. Entre los más mayores sí que se mantiene casi como única forma de conexión online (más allá de WhatsApp) pero quizás es algo que cambie con el tiempo.
Por el momento yo no he encontrado motivos para dejar la app en mi móvil.