Cuando Google pasó de Holo a Material Design en Android Lollipop, todos nos maravillamos. Las nuevas líneas de diseño minimalistas habían encantado al público, y siguen vigentes hasta el día de hoy, 4 años después. Necesitando ya un rediseño estético, quedaba la duda de cuál sería el siguiente paso. Este fue Material Design 2.
Aunque pueda parecer una nimiedad, el hecho de que Material Design se renueve y lo podamos ver más a menudo en nuestro Android es simplemente genial. ¿Qué impacto tiene esta medida? Os contaré por qué que vuestras apps se actualicen a Material Design 2 es una ventaja que no todo el mundo aprecia.
Ya estamos empezando a ver algunos ejemplos
Ya estamos viendo algunos ejemplos de apps que ya disfrutan de este nuevo diseño. Los ejemplos más directos son Google Chrome tras su reciente rediseño y Google Task o Tareas de Google, el nuevo gestor de tareas diarias made by Google.
Vemos cómo los elementos son mucho más limpios y están mejor distribuidos, en parte por las nuevas tendencias del mercado. Los menús más importantes han pasado a la parte inferior de la pantalla, debido a que estas son cada vez más alargadas con los formatos panorámicos y alcanzarlos es un poco una odisea. Una decisión inteligente.
Siendo Google la creadora de este diseño, es inevitable que paulatinamente los innumerables servicios que usamos de la gran G a diario se actualicen con esta nueva estética. Y es que esto va más allá de un diseño bonito, ya que esto tiene varias connotaciones de aplicarse fuera de Google.
Lo que pasa en Google no se queda en Google
Muchos podrían pensar que pasará lo de siempre; Google pondrá sus nuevas líneas de diseño, muchos lo ignorarán y no será más que un cambio que muchos no notaremos. La historia de Android nos ha enseñado que Google en Android tiene un efecto parecido al de los iPhone en los móviles: lo que a ellos les ocurre se acaba extendiendo.
Si Google empieza a implementar Material Design 2 en todos sus servicios (aparte de en Android P) será inevitable el contagio en los desarrolladores y fabricantes. Muchos de estos últimos usan en sus dispositivos Android puro, e inevitablemente beberán de este nuevo diseño. Y los desarrolladores, con el código libre de Android, usarán esta nueva estética en sus aplicaciones.
Si Google estornuda, los demás se suenan: Material Design 2 se extendrá como la pólvora
Y no hablo sólo de copiarlo, lo cuál no importa si podemos disfrutar de lo último directamente de Google. También me refiero a las versiones de Material Design 2, es decir, aquellas capas y apps que si bien no lo seguirán al pie de la letra, lo usarán para crear sus propios estilos y así fomentar la variedad.
Esto ha pasado así desde siempre; de hecho, Material Design como tal ha influido en todos los aspectos de nuestro sistema. Ahora, al ver una interfaz más arcaica como Holo, nos llevamos las manos a la cabeza al estar acostumbrados al visionado de tanto minimalismo en nuestro día a día. Y alejándonos del diseño per se, esto traerá otras consecuencias beneficiosas para los usuarios.
Más calidad en nuestras apps y servicios
No todo es diseño, y eso se debe a que cuando una aplicación o servicio se actualiza a estándares modernos, también lo hace en cuanto a trabajo detrás. Se mima más a la app, se mejoran errores, se añaden nuevas funcionalidades y el soporte sigue vigente, lo cuál no es sino un beneficio directo para los usuarios.
Además, aún yéndonos a lo que viene siendo la estética per se, es indudable que una app que tenga un buen diseño va a prevalecer sobre algunas que son horrorosas. Serán más populares, tendrán un mejor nivel de descargas… Es todo una cadena de hechos que harán que dicha aplicación o servicio tenga mucho más que decirnos.
No podemos olvidarnos que junto a estas mejoras vendrán compatibilidades con nuevas versiones de Android. Cuando una nueva versión de nuestro sistema aparece, es habitual ver cómo nuestras aplicaciones del día a día se actualizan para que sean compatibles con esta. Muchas veces, de paso, se actualizan a los estándares de diseño actuales. Es toda una sucesión de beneficios.
Y si nuestras apps y servicios mejoran, el sistema con ellos, ya que este se nutre directamente de sus posibilidades. Eso por no mencionar la necesaria optimización que necesitan ciertas aplicaciones como Facebook o la app de Amazon, cuya necesidad va más allá del diseño en sí.
Los desarrolladores deben poner de su parte
No obstante, el compromiso de los desarrolladores es vital para que este fenómeno se produzca. Por mucho que Google ponga sus estándares de diseño al servicio de la comunidad, no son pocos los que no sólo no lo siguen, sino que intentan imponer los suyos propios. Y aunque entiendo el querer compartir estilos, no el que estos se intenten imponer.
Es necesario que los desarrolladores se pongan de acuerdo en mantener unas líneas de diseño generales para que todo desarrollador trabaje a partir de ahí, en vez de dividirse e intentar imponer sus propios diseños en sus apps y servicios. Si bien Google lo está haciendo, Material Design ha sido el estándarte de Android muchos años y ya está estandarizado en la sociedad actual.
La cuestión es que, al final, trabajemos todos juntos para hacer de Android el mejor sistema.