Desde sus inicios, Android ha tenido un sistema de navegación muy claro basado en un botón principal (Inicio) que nos lleva al escritorio y uno secundario (Volver o Atrás), que deshace la última acción que hemos ejecutado.
Junto a esos dos ha habido al menos un tercer botón que en principio era el destinado al menú de las aplicaciones y que más tarde se convirtió en el actual de multitarea.
Pero en los últimos tiempos estamos viendo cómo los gestos se están convirtiendo en una forma de control más efectiva, sobre todo ahora que los fabricantes se acercan al ideal del móvil con un 100% de pantalla.
No obstante, esta nueva forma de manejar nuestros móviles no será algo que empecemos a ver en los terminales con Android 9 de manera masiva, y cuando lo veamos, no será siempre igual. Y eso puede ser un problema.
Las tres opciones de Google
A lo largo de los últimos meses hemos estado probando los gestos en Android 9, aunque en las primeras betas esta función no estaba activada.
Eso nos daba ya una pista de la decisión que iba a tomar Google con respecto a los fabricantes que usaran Android y la nueva forma de interactuar con el sistema. La compañía decidió que daría tres opciones:
- Usar los gestos de Android: Los Pixel tendrán un sistema de gestos propio, con un botón virtual, y las marcas que lo deseen podrán elegir usar este código para instalarlo en sus modificaciones de Android.
- No usar gestos: si los fabricantes quieren podrán usar sólo los botones del sistema. Es algo que por ejemplo ha decidido Sony con su Sony Xperia XZ3. Incluso las compañías que quieran usar Android One podrán optar por esta opción.
- Usar gestos propios: la tercera opción es la que muchas empresas están eligiendo ya en Android 8. El poder crear su propio sistema de gestos les aporta diferenciación y cada uno lo hace como cree mejor. Es lo que actualmente hacen OnePlus, Xiaomi, Huawei y otras marcas.
El Pixel 3 sólo tendrá esta forma de control
Al contrario que al resto de marcas, Google no le da opción a los dueños de los nuevos Google Pixel 3 y 3 XL. Sus nuevos smartphones sólo tendrán esta forma de manejo por lo que sus usuarios deberán acostumbrarse.
Y eso puede ser un problema ya que son bastantes los que los han probado y han visto que no es algo cómodo. O al menos no tanto como los botones virtuales. El motivo por el que Google hace esto podría tener más que ver con los desarrolladores que con los usuarios.
Los Pixel son herederos de los Nexus y aunque ya no se entiendan exclusivamente como terminales para desarrollo, sí que ofrecen una experiencia cercana a la esencia del sistema, al fin y al cabo su creador es el mismo.
Google podría usar la obligatoriedad de los gestos en Android para que los desarrolladores de aplicaciones, y también los de hardware, tuvieran un lugar en el que mirar. Como ha comentado en ocasiones mi compañero Iván Peñalba, no es que Google vaya a empezar a cuidar a los desarrolladores de Android a estas alturas, pero un cambio de esta envergadura debería estar muy consensuado, entre Google, los constructores y los desarrolladores.
Las diferentes aproximaciones de los fabricantes
Aunque los gestos llevan tiempo entre nosotros (el bajar la cortina de notificaciones está desde el inicio), ahora cada marca está creando su propia apuesta.
Huawei ha copiado la idea de Apple de tener un elemento visual en pantalla si bien esta forma no llega a ser la más óptima al ocupar un espacio como lo hacían los botones virtuales. Sí, se puede ocultar temporalmente, pero también los botones y al final era algo que casi nadie hacía.
OnePlus también ha apostado por esto con una forma de control que sobre todo se centra en usar sólo un lateral, el inferior. Los tres gestos parten siempre de la parte baja y acaban en la zona superior. Es algo más complicado de recordar pero funciona mejor.
Xiaomi es otra de las marcas que mejor ha desarrollado esta forma de uso de las pantallas y sólo le criticamos que la opción de volver se pueda ejecutar desde casi cualquier parte de los bordes laterales. Si estuviera restringida a la zona inferior de esos bordes posiblemente sería la mejor forma de control por gestos en Android.
Otras marcas como Motorola o la propia Huawei usan el sensor de huellas como pieza física para controlar el sistema y la verdad es que funciona pero no encaja bien con la tendencia de diseño actual que lleva a intentar ocupar la mayor parte del frontal con la pantalla.
Una época de transición
Como hemos comentado, se trata de un cambio muy relevante en Android y Google no quiere hacerlo de forma drástica, confundiendo por el camino a millones de personas.
Android 9 parece ser el eslabón entre el sistema antiguo y el nuevo y es posible que para Android 10 Google ya implemente esta forma de control como obligatoria, quizás dando la opción a los fabricantes de poder desactivarla y usar botones virtuales, o quizás ni eso.
A día a de hoy parece demasiado arriesgado.