Hoy en día disfrutamos de la última tecnología en la palma de nuestra mano, muchas de ellas damos por hecho que están. Quizá pensamos que tal o cual fabricante la introdujo en el mercado, y puede que estemos más equivocados de lo que creemos.
Es más, en un alto porcentaje podemos pensar que los grandes «revolucionarios» de la industria son Apple y Samsung. Sin embargo, hubo antes que ellos compañías que se atrevieron a innovar en móviles demostrando que quien llega primero no siempre se lleva los laureles.
Un smartphone es una galería de tecnologías
Los dispositivos que disfrutamos son más que una lista de características escritas en una web, van más allá de simples números en una hoja de especificaciones. En la gran mayoría de ocasiones, algo que usamos hoy tiene años de desarrollo.
Si a nuestro yo del pasado le enseñaran un smartphone de hoy pensaría que es ciencia ficción. Igual que si le hablásemos de telefonía móvil, se pensaría que es cosa de brujería. La tecnología es evolución constante, así que, ¿te gustaría saber el origen de lo que contiene nuestro smartphone? ¡Empezamos!
Pantallas, hasta el notch y más allá
El medio por el que nos relacionamos con nuestro teléfono. Existen grandes, pequeñas y hasta curvas. Aunque en los últimos tiempos se ha unificado un poco el diseño, históricamente hemos podido disfrutar de una gran variedad.
La tecnología táctil
La característica que nos conecta directamente a nuestro smartphone es el uso de las pantallas táctiles. Quizá pienses que es algo relativamente nuevo, sin embargo, debo decirte que debemos retroceder ni más ni menos que hasta 1998.
En una época en la que la denominación smartphone era solo un sueño, nos encontramos con el Alcatel OT Com. Un teléfono que disponía de una pantalla monocroma y táctil. Puede que no fuera un gran dispositivo, pero sí es el origen de dicha tecnología.
Pantallas IPS y OLED
Siguiendo con las tecnologías en las pantallas, existen dos palabras que destacan, son IPS y OLED. Ambas podemos encontrarlas en una gran cantidad de smartphones actuales junto con sus respectivas variantes. Es más, me atrevería a decir que leyendo OLED estés pensando en Samsung. Pero no de la manera que piensas.
La empresa que usó por primera vez una pantalla OLED fue Samsung, aunque ocurrió en el año 2004, en el Samsung X120, bastante antes de los primeros Galaxy S. Volviendo a las pantallas IPS, su uso en un dispositivo móvil data del año 2010 y fue en el iPhone 4.
Resistencia a los arañazos
Otro de los aspectos que buscamos, y que nos hace sufrir actualmente, es la resistencia de las pantallas. Usamos dispositivos que son pantalla en su gran medida, por lo que, en el momento más inesperado… susto o arañazo. Para ello existe la resistencia a los arañazos.
De nuevo, no, no es algo que surgiera con los primeros smartphones. Hay que retroceder al año 2005, cuando Nokia decidió dotar a su 8800 de dicha característica. Una tecnología que evolucionaría hasta los actuales Gorilla Glass o Dragon Trail.
Superando los 300 ppi y llegando al formato 16:9
A pesar de lo que muchos piensan, lo importante en una pantalla no es su resolución o el tamaño de la misma. Lo realmente importante es la unión de estos dos aspectos ya que nos proporciona la densidad de píxeles por pulgadas -la cantidad de pixeles que tenemos en pantalla-.
Una denominación que puso Apple de moda, bajo el nombre de Retina Display, pantallas que ofrecían una gran nitidez gracias a sus 300 ppi. Sin embargo, ya existían dispositivos que gozaban de pantallas de alta densidad, siendo el Sharp 904 el primero allá por el año 2006.
Los usuarios del Sharp 904 ya disfrutaban de una densidad de 333 ppi en su pantalla
Otra característica de las pantallas que ha evolucionado es su relación de aspecto: En los primeros pasos de la telefonía móvil podíamos encontrar una gran diversidad. Hasta que en el año 2011 se empezó a estandarizar el uso de la relación de aspecto 16:9, empezando por el Motorola Atrix.
Y entonces llegó el Full HD y el Quad HD
Hemos asistido al aumento del tamaño de las pantallas, pero esto provocaba un problema, del que justo hemos hablado. A mayor tamaño de pantalla y misma resolución los píxeles son cada vez más grandes, por lo tanto la pantalla menos nítida.
Para solucionar esto, la industria abrazó, junto al formato 16:9, la resolución 1920 x 1080 conocida como Full HD. Siendo en 2012 el HTC Droid DNA el primer dispositivo en hacer uso de ella. Un año después, en 2013, el Vivo Xplay3S haría uso de la resolución Quad HD, o lo que es lo mismo 250 x 1440.
La locura de los smartphones sin bordes y con notch
Si pensamos en dispositivos cuya pantalla se puede denominar sin bordes, quizá pensemos en el iPhone X. Unos pocos pensarán en el Essential Phone, sin embargo el primer dispositivo en hacer uso de este tipo de pantalla viene del lejano oriente.
El Sharp Aquos Crystal, en el año 2014, fue el primer smartphone en disponer de una pantalla sin bordes. Algo que se extendería años después y provocando la pesadilla del 2018, el tan recurrente notch o muesca en la pantalla.
Lo que surgió como una solución, en aquellos dispositivos que tienen un frontal que es todo pantalla, está hasta en la sopa actualmente. Pero lo que hoy en día se usa, justificada o injustificadamente, tuvo su aparición en escena junto al Essential Phone en el año 2017.
La fiebre gaming ha llegado a nuestros dispositivos
No, no vamos a hablar de teléfonos llenos de iluminación RGB, la característica que nos atañe es algo que sorprende que a nadie se le hubiera ocurrido antes. En el año 2017, hace nada, Razer introdujo en su Razer Phone la pantalla de 120 Hz. Ofreciendo una fluidez nunca vista en un smartphone.
Tiempo después vendrían otras implementaciones, como la del Asus ROG Phone y su pantalla de 90 Hz. Pero el resto de usuarios, seguimos anclados en los tradicionales 60 Hz de nuestras pantallas . Habrá que ver la evolución en este campo.
Conectividad, la democratización de la comunicación
Es uno de los grandes avances que ha posibilitado la llegada de la telefonía móvil, la democratización de las comunicaciones. Ya no tenemos que estar atados a un lugar siempre que queremos establecer contacto con otras personas. La tecnología que se fue incorporando ha sido determinante en ello.
La relación de nuestro dispositivo con los demás, Bluetooth y USB
Existió una época en la que, si queríamos compartir algo con otra persona o transferir datos a nuestro ordenador, la única manera que existía era usando los infrarrojos o el bluetooth. Pasando tiempo hasta la estandarización del USB.
Curiosamente, tanto la tecnología bluetooth como la USB, llegaron juntos dentro de un mismo dispositivo. Debemos remontarnos hasta el año 2000, donde nos encontraremos con el Motorola 270c, el primer teléfono móvil en incorporar ambos.
La llegada de las autopistas de la información, 3G y 4G
Todo aquel que tuviera que conectarse a internet usando una red móvil debía sufrir dos problemas: el alto precio de dichas conexiones y la lentitud de sus conexiones. Algo que cambiaría radicalmente con la llegada del 3G; y más tarde con la implementación del 4G.
Gracias a ambos podemos disfrutar de conexiones inalámbricas, asequibles en cierto modo y con una calidad de conexión impensable hace años. Y, aunque parezca raro, la tecnología 3G no es algo reciente ya que debemos mirar hacia el año 2002, momento en el que el Motorola A820 hizo acto de presencia.
Para disfrutar de su evolución, la tecnología 4G, habría que esperar unos cuantos años, exactamente hasta el año 2010 con la llegada del HTC EVO 4G. Un dispositivo que, como veremos a continuación, aportó algo más a la industria que la inclusión del 4G.
HDMI y WiFi, la combinación que haría ganador al Chromecast
Hilando con el apartado anterior, la conexión HDMI tuvo su época gloriosa en los smartphones, siendo el HTC EVO 4G el primero en incorporar dicha conexión en 2010; posibilitando el disfrute del contenido de nuestro dispositivo en una pantalla grande.
Sin embargo, existe una conexión que, entre otras cosas sustituyó al HDMI para visualizar contenido en pantallas externas. Hablamos de la conexión WiFi, la puerta de acceso a internet para la gran mayoría de usuarios. Una conexión que pudieron disfrutar primero, allá por el año 2004, los usuarios de un Nokia 9500.
Cámara, llegó el fin de las compactas
Una característica que existía antes incluso de la llegada del smartphone, aunque de una manera muy modesta. La cámara de nuestros dispositivos ha evolucionado de una manera meteórica, engullendo el mercado de las cámaras digitales compactas.
Cámara trasera y delantera
Hubo un tiempo en el que algunos se hacían la siguiente pregunta: ¿quién necesita una cámara en un teléfono móvil? La respuesta ya la sabes, los hechos hablan por sí solos. Es más, no contentos con una cámara, añadimos una segunda para hacernos fotos.
La primera en incorporar una cámara de fotos a un teléfono móvil fue Sharp, en su modelo GX10, en el lejano 2002. No era nada del otro mundo, pero sí la primera piedra de un largo camino que llega hasta hoy. Para encontrar la primera cámara delantera -selfie- debemos irnos al año 2003, exactamente al Sony Ericsson Z1010. Nadie se hacía una idea de lo popular que se harían este tipo de cámara.
Doble cámara y estabilización óptica
Ya teníamos una cámara delantera y otra trasera, pues a alguien le debió parecer poco puesto que en el año 2015 HTC presentó su One M8s; que incorporaba una cámara dual en su trasera. A partir de ese momento, empezó la carrera por incorporar diversas cámaras a los dispositivos.
La estabilización óptica, uno de esos milagros de la tecnología que nos permite hacer fotos en situaciones difíciles. Su introducción remonta al año 2012, de la mano de Nokia en su modelo 920. Dicho dispositivo llevaría el sistema operativo equivocado, pero por lo demás estaba en todo lo alto.
Flash LED y flash DUAL
La fotografía es luz, por ello en ocasiones se hace necesario la ayuda de un flash en nuestras fotos. En 2003 el fabricante Sharp, en el modelo GX20, sería el primero en incorporar un flash LED a su dispositivo; debiendo esperar hasta el año 2008 para los primeros flash duales.
Estos últimos empezaron su andadura bajo la carcasa del Nokia 7610 dando lugar a un sinfín de configuraciones para los flash de nuestros dispositivos. Siempre viene bien una ayudita en condiciones de poca luz, ¿no?
Grabación de video, 1080p, UHD
Si el mercado de las cámaras digitales compactas estaba en peligro, el de las cámaras de vídeo básicas llevaba el mismo destino. La incorporación de la grabación de vídeo ha evolucionado de tal manera que hasta pueden ser usados en proyectos «profesionales».
Mitsubishi en su modelo M800 fue el primero en traernos la grabación de vídeo a nuestros bolsillos, allá por el año 2005. La siguiente evolución, la grabación en Full HD, llegaría en 2011 junto al LG Optimus 2x. Y la actual grabación en 4K llegaría en 2013, junto al Galaxy Note 3.
Seguridad y telefonía, la importancia de nuestros datos
Existen dos características de los dispositivos actuales que han evolucionado casi sin darnos cuenta. Hablamos del apartado de telefonía y seguridad, tan distintos, pero con una relevancia muy importante a día de hoy.
Lector de huellas, la seguridad en tus manos
Una de las maneras de mantener seguro nuestro smartphone, el uso del lector de huellas se ha extendido a todas las gamas. Aunque para algunos puede tener los días contados ya que se está optando por alternativas de las que hablaremos más tarde.
En nuestra búsqueda por el origen de dicha tecnología debemos retroceder hasta el año 2011. Exactamente en el Motorola Atrix, aquí encontraremos el primer smartphone con lector de huellas. Unos cuantos años antes de la gran expansión.
Llamadas WiFi: ¿hay alguien ahí?
Puede que estemos ante uno de los grandes desconocidos, la posibilidad de realizar llamadas usando la cobertura WiFi. Estás leyendo bien, es posible realizar llamadas de teléfono sin usar la red móvil de nuestro operador. Y dicha posibilidad existe desde el año 2006.
Nokia en su 6136 añadió la opción de realizar llamadas usando la conexión WiFi. Tiempo después se extendería al resto de dispositivos, pero, como dijimos al principio, sigue siendo esa gran desconocida incluso hoy en día.
MMS, la evolución del tradicional SMS
Habrá usuarios que nunca hayan mandado un MMS, incluso habrá quienes no sepan qué es esto de los MMS y SMS. Pues ambos son la manera que se tenía de comunicarnos mediante mensajes, el antecesor a WhatsApp y compañía.
Los MMS son los llamados mensajes multimedia. Y su aparición data del año 2002 en el Sony Ericsson T68i. Años después sabemos lo que ocurrió: la llegada de la mensajería instantánea relegó este tipo de comunicaciones a un segundo plano.
Reconocimiento facial, tu cara me suena
Estamos ante una de las medidas de seguridad que es odiada y amada a partes iguales. Sin tocar nuestro teléfono, ni haciendo uso de huella o contraseña, podemos desbloquearlo solo con el rostro. Lo que se llama un desbloqueo por la cara…
Quien nos trajo el reconocimiento facial, fue la propia Google en el año 2011, el Galaxy Nexus estrenaba el desbloqueo facial. Una tecnología que evolucionaría hasta nuestros días, además de diversas implementaciones de dicho método de seguridad.
Videollamadas, no me grites que no te veo
A medida que las llamadas de voz bajan en popularidad, las videollamadas suben en su popularidad. En los últimos tiempos hemos visto su implementación en toda aplicación posible, más allá del tradicional Skype. Sin embargo, las videollamadas datan del año 2004.
Una vez más, Motorola en su modelo A845, fue la primera en poner a disposición de los usuarios esta tecnología. Lógicamente, en aquellos primeros años la experiencia y calidad están lejos de los estándares actuales, pero ahí está su origen.
Sensores, el paso a algo más que un teléfono
Hubo un momento en el que los teléfonos móviles empezaron a dejar de serlo, fueron incorporando diversas tecnologías y la gran evolución llegó con los sensores. Quizá no sea uno de los elementos que más protagonismo tenga, pero son de los más importantes del interior de nuestro smartphone.
Brújula, la senda esperada
Un elemento crucial en los grandes descubrimientos del ser humano. Porque sí, hubo una época en la que no existía Google Maps. Y lo que en otra época era una obra de arte, hoy en día tiene el tamaño de un grano de arroz y reside dentro de nuestros dispositivos.
El primero en incorporarlo fue el NEC N630, allá por el año 2005; para luego poco a poco ir apareciendo en diversos dispositivos, incluido nuestro siguiente protagonista. Porque sí, los sensores llegaron para quedarse.
Acelerómetro, giroscopio y sensor de proximidad, la tecnología invisible
Estamos ante dos elementos que usamos inconscientemente todos los días, y curiosamente ambos vinieron dentro del mismo dispositivo. Allá por el año 2007 el primer iPhone nos trajo la incorporación del acelerómetro y del sensor de proximidad.
Ya en el año 2010, el iPhone 4 añadió a este abanico de sensores el giroscopio, abriendo la puerta a una gran variedad de posibilidades. Estos tres sensores suelen funcionar en conjunto en diversas situaciones, ¿no lo has pensado al girar tu teléfono para leer este artículo?
Barómetro, sin presiones
Otra incorporación al universo de sensores fue la del barómetro. El primer representante en usarlo fue, allá por el año 2011, el Google Nexus S. Quizá un sensor que pasa desapercibido, pero que todo amante del deporte lo valora en gran medida.
Humedad y temperatura, el hombre del tiempo en el bolsillo
Ya teníamos un barómetro, nos quedaba poder medir la humedad y temperatura. Sería con la llegada del Samsung Galaxy S4, en el año 2013, donde encontraríamos todo este despliegue de sensores. La cantidad de información disponible, gracias a los sensores, ha crecido exponencialmente.
Ritmo cardíaco, todo bajo control
Por si no teníamos suficientes sensores, Samsung decidió dotar a su Galaxy S5 de todos los posibles. Y en el año 2014, junto al resto de sensores mencionados anteriormente, añadió uno de ritmo cardíaco a su último representante de la familia Galaxy S.
Otras tecnologías, haciendo la experiencia más completa
La telefonía móvil ha ido evolucionando más allá de poder llamar por teléfono o mandar sms: fueron añadiéndose características. Y estas nuevas características provocaron la aparición de nuevas tecnologías para poder tener una buena experiencia de uso.
El GPS llegó para ponernos en nuestro lugar
Actualmente, uno de los usos más comunes de nuestro dispositivo es como navegador. Desde el más básico hasta el gama más premium dispone de dicha tecnología. Pero si deseamos encontrar la piedra filosofal, debemos retroceder hasta 1999.
Quizá nunca hayas oído hablar de él, pero el primer teléfono móvil que disponía de la tecnología GPS fue el Benefon ESC!, bastante tiempo después del desarrollo del GPS, que data de los años 60. Y pensar que hoy no somos nada sin Google Maps.
Sonido estéreo, algo poco habitual
En los últimos tiempos hemos visto dispositivos que promocionaban el uso del sonido estéreo. Quizá pueda resultar extraño que algo tan implementado en nuestra vida se promocione como algo novedoso. Sin embargo, el sonido estéreo en un teléfono móvil es menos habitual de lo que pensamos.
Si entendemos sonido estéreo como realmente es, el sonido por dos altavoces independientes, no fue hasta el año 2004 donde asistimos su presencia. Motorola en su E398 incorporó dos altavoces en un dispositivo realmente compacto; ofreciendo un gran salto de calidad respecto a sus rivales.
Resistencia al agua
Otra de las grandes pesadillas de los dispositivos actuales, el miedo a que se moje de la manera más tonta posible. Sí, existen métodos para poder solucionar un percance de este tipo, aunque siempre es mejor disponer de una garantía adicional.
Sony puso sobre la mesa la resistencia al agua en un smartphone: el Xperia Z, allá por 2013. Sin embargo, si buscamos el primer dispositivo en incorporar dicha resistencia, debemos remontarnos al año 2006. En aquel año, Casio presentó su modelo G’zONE, un teléfono preparado para todo tipo de situaciones.
NFC, los pagos móviles van a llegar
Hemos llegado a una de esas tecnologías que podríamos asemejar al rio Guadiana: apareció y desapareció momentáneamente. Aunque actualmente esté presente en la gran mayoría de dispositivos, la tecnología NFC lleva con nosotros hace más tiempo del que pensamos.
Allá por el año 2008, Benq incorporó en su modelo T80 la tecnología NFC, diez años antes de que se popularizara; siendo a día de hoy la base de los pagos móviles y requisito indispensable para disfrutar de la mejor experiencia de uso.
La carga rápida y carga inalámbrica, ¿dónde habéis estado hasta ahora?
Suele ocurrir, existen tecnologías que lees sobre ellas sin darle demasiada importancia hasta que las usas. Este es el caso de las dos adaptaciones de la carga de nuestro dispositivo. La primera en llegar eliminaría los cables (en cierta manera).
Por el año 2009, el Palm Pre llegaría a nosotros. Un dispositivo que venía acompañado del sistema operativo Palm WebOS, si el origen del usado hoy en día en los televisores de LG. Hablamos de la carga inalámbrica, ese sistema «mágico» por el que solo tenemos que dejar nuestro teléfono en una superficie y esperar a que cargue.
La segunda adaptación es la carga rápida, algo que se ha convertido en algo imprescindible para muchos. Una ventaja que puso a nuestra disposición en el año 2013 el Xiaomi en su Mi 3. Más tarde, el HTC en el One M8 nos brindaría este tipo de carga más allá del país asiático.