Hay noticias que explotan como una palomita de maíz, que estallan de manera repentina y ruidosa para luego permanecer impasibles para siempre. Y luego existe otro tipo de actualidad que origina un derrumbe que va arrastrando a todo lo que tenga a su paso. Casi como una bola de nieve que cae desde lo alto de una ladera. Rodando, haciéndose más grande conforme copa la atención y aviva los temores de convertirse en imparable.
El domingo por la noche asistimos a una de esas noticias que no acostumbran a darse. Tanto por su impacto como por su implicación: que Huawei no tuviese acceso a la certificación de Google ni al intercambio comercial con cualquier otra empresa estadounidense supuso un duro revés para la empresa. Y está provocando daños colaterales: las bolsas bajan, las acciones de Apple caen, la economía se resiente. Aunque no todo son damnificados.
¿Quiénes son los beneficiados por la debacle de Huawei? La marca se encuentra actualmente en la segunda posición como fabricante de smartphones a nivel mundial habiendo expresado el deseo de ascender al podio en un corto plazo. Visto lo visto lo va a tener difícil, también para mantener ese segundo puesto.
Xiaomi sería la principal beneficiada del retroceso de Huawei
Huawei reina dentro de sus fronteras y lleva años acometiendo una potente internacionalización de sus smartphones. Ha conseguido colarse en el top de España, por ejemplo, un país que ha visto crecer su cuota de mercado casi de manera vertiginosa. El problema es la actual incertidumbre ya que, como corroboramos en algunos comercios y entre diversos consumidores, las dudas sobre el futuro de Huawei podrían resentir las ventas.
Los consumidores tienen serias dudas sobre la compra de un Huawei
Si enumeramos las marcas que son competidoras de Huawei, en primer lugar se encuentra Xiaomi. No parece que vaya a sufrir veto alguno ya que Xiaomi solo fabrica y distribuye dispositivos de consumo y no posee equipos de redes, que es el principal escollo con el que se ha topado Huawei. Teniendo en cuenta lo mucho que ha crecido Xiaomi en el último año y medio, periodo que lleva oficialmente en España y Europa, el tropiezo de su principal competidora china le va a beneficiar enormemente.
Buscar un móvil barato y de calidad implica recomendar un Huawei, un Honor o un Xiaomi, son tres de las marcas acostumbradas. Con dos competidoras bajo la lupa de la crítica, Xiaomi recibe un inesperado impulso con el que puede afianzar su estrategia de colocarse entre los tres primeros fabricantes a nivel mundial.
Realme puede entrar con mucha fuerza en España
Otra de las marcas dirigida a la gama media que va a beneficiarse del veto de Huawei es Realme. Segunda marca de OPPO, y formando parte del conglomerado BBK Electronics (OPPO, VIVO y OnePlus), Realme está a punto de desembarcar en España con un precio rompedor: se espera que el Realme 3 Pro tenga un precio de 200 euros, un coste extraordinario dadas sus características.
Es en la gama media donde Huawei (junto con Honor) ha recogido los mejores frutos, de ahí que sea ese segmento de precio el que más fácilmente puede perder. Realme tendría un impulso inesperado en su aterrizaje en España: con Huawei en entredicho, y disponiendo de un gran precio de venta, la marca no podía haber llegado en mejor momento.
Samsung puede recuperar parte de la cuota perdida
Las gráficas de distribución de smartphones durante los pasados meses muestran el descenso de Samsung y el ascenso de Huawei. Los puestos no se han cambiado ya que los surcoreanos se mantienen en el top 1 de fabricantes, pero no hay duda de que perdieron una notable cuota de mercado por las ventas de Huawei, también por el ascenso de Xiaomi.
Samsung se encuentra dándole un notable impulso a la estrategia en la gama media con los últimos Samsung Galaxy A, una completa línea de smartphones que va desde lo más básico (Samsung Galaxy A10) a las innovaciones más locas (Samsung Galaxy A80 y su cámara rotatoria). Ante una pérdida de credibilidad del público de Huawei es de esperar que parte de este se refugie en Samsung, una marca conocida y que sigue manteniendo su renombre.
Pese a los envites de Huawei, Xiaomi, Apple, Vivo, OPPO… por arrebatarle el primer puesto, Samsung se ha mantenido dominando el desarrollo y distribución de smartphones. Es una de las empresas más sólidas ya que no solo estaría exenta de cualquier tipo de veto comercial, Samsung también fabrica gran parte de los componentes que se montan en un smartphone. Siendo reconocida, multinacional y casi autosuficiente tiene todas las papeletas para no solo mantenerse, también para recuperar la cuota de ventas de hace unos años.
Los beneficiados también seremos todos nosotros
Que una marca como Huawei se haya encontrado con semejante revés implica la constatación del enorme peso que tiene Google en el mercado móvil internacional. Esto debería constituir una llamada de atención del gran problema que supone mantener a Google casi como un monopolio: ha bastado la retirada de la certificación para que una empresa multinacional gigantesca se vea en graves problemas; junto a las implicaciones tecnológicas y comerciales para muchos otros fabricantes.
El veto de Huawei implica una llamada de atención a Google y su gigantesco monopolio
Dejar de depender de Google podría implicar una ventaja para los usuarios de Android, que somos nosotros. Al fin y al cabo, no son imprescindibles sus aplicaciones o la tienda de la Google Play: la base de Android es libre. Si se construye una buena capa sobre esa base no hace falta ninguna certificación ya que cada marca puede darle el valor necesario a sus clientes. Y podríamos vivir sin la falta de privacidad que supone tener instalados todos los servicios de Google en el teléfono.
Esperemos que este toque arbitrario de atención sirva para que nos concienciemos del enorme poder de Google en nuestros móviles y para que las marcas se posicionen en crear su propia alternativa a los servicios integrados en la certificación de Android. Así habremos ganado todos.