¿El principio del fin del MWC? 5 consecuencias de la cancelación

Ha sido inevitable. Durante varias semanas se han sucedido los rumores de que la epidemia del nuevo coronavirus chino, el COVID-19, iba a cobrarse una nueva víctima, y en este caso una muy singular, el Mobile World Congress de Barcelona.

Tras muchas reuniones con socios, gobiernos y trabajadores, la empresa organizadora, la GSMA, ha decidido cancelar el evento ya que la situación actual no permitía su celebración en las condiciones propicias.

Tanto las entidades gubernamentales como las empresas participantes y la propia organización se jugaban mucho de haber seguido adelante. Si se hubiera dado un foco de contagio el MWC estaría muerto para siempre. Pero, habiéndose cancelado optando por una de las tres opciones, ¿habrá una edición en 2021?

Hay muchos aspectos a tener en cuenta y desde que el primer MWC de Barcelona se celebrara en 2006 en la ciudad condal muchas cosas han cambiado. Es posible que esta cancelación haga que el MWC 2021, si se celebra, sea muy diferente.

Los móviles son lo de menos en el MWC, pero dan publicidad

Todos los que hemos ido alguna vez al MWC hemos visto cómo hay cientos de expositores y miles de empresas haciendo negocios. La presentación de nuevos smartphones es casi lo menos importante, pero le dan una visibilidad a la feria que de otra forma no tendría. Pocos congresos tienen el alcance de este.

La cancelación de marcas como LG o Sony resta visibilidad al MWC pero está por ver si en un futuro las marcas dejan sus presentaciones para este evento.

Cada vez menos marcas presentan nuevos móviles en el MWC

A lo largo de los años hemos visto cómo gigantes como Samsung o Huawei han movido las presentaciones que se celebraban en estas fechas a otras justo para no coincidir con los demás. El mejor ejemplo es el de la empresa coreana, que justo ayer presentó sus nuevos Galaxy S20 en Londres y San Francisco de forma simultánea.

Por qué las marcas chinas no frenarán sus presentaciones aunque no haya Mobile

Xiaomi mantiene la presentación, al menos por ahora, pero será una presentación algo diluida puesto que si bien el Xiaomi Mi 10 se presentará el día 23 en Europa, mañana día 13 lo hará en China. Y podremos verlo por streaming.

Internet ha cambiado la forma de hacer presentaciones

Aunque las marcas quieran tener un momento propio para ellos, ya no es necesario esperar a un gran evento como el MWC para lograr la visibilidad.

Gracias a la posibilidad de emitir en streaming los nuevos lanzamientos y a la viralidad de las redes sociales, la necesidad física de un congreso queda para poder realizar reuniones cara a cara y cerrar o plantear tratos, pero no parece haber necesidad de mover a periodistas miles de kilómetros.

Los móviles se prueban con anterioridad

Otra de las cosas que ha cambiado en los últimos años es la forma en la que las marcas se relacionan con los analistas y periodistas. Antes era necesario asistir al MWC, por ejemplo, para poder probar un móvil lo antes posible, al menos si se presentaba allí.

Ahora las marcas prefieren realizar reuniones controladas en las que presentan sus terminales a un número más pequeño de profesionales pero que puede hacer una mejor cobertura. Lo de la iluminación en los stands de este tipo de presentaciones es de manicomio.

Una posible refundación del MWC

Dicho todo esto, no quiere decir que el año que viene no hay aún MWC, pero quizás si que la forma en la que se organice, o incluso el nombre, pueda cambiar y se asemeje más a un congreso más estándar que al movimiento mediático en el que se había convertido en los últimos años.

En este apartado también hay que hablar de la gestión de la propia GSMA. No son pocas las empresas pertenecientes al evento que han criticado las formas y las decisiones de la organización, algo que también se ha visto desde fuera. Se estima que las indemnizaciones superarán los 400 millones de euros.

¿Barcelona como sede?

España no ha sido, ni de lejos, uno de los países más problemáticos para viajar por culpa del coronavirus. Pese a eso, la GSMA habría intentado que el gobierno español, local y autonómico, declarara la emergencia sanitaria para poder cancelar el congreso con una mayor tranquilidad.

Eso no ha pasado, y si internamente ha sido un problema, es posible que en futuras convocatorias la organización se mueva a otras ciudades, algo que se ha rumoreado varias veces pero nunca ha llegado a verse.

Aún queda más de un año para poder asistir a un hipotético MWC 2021 pero de la misma forma que ferias como el CES han mutado poco a poco no habría que descartar que, de celebrarse, el MWC 2021 no fuera como esperábamos.