La marca de Fitbit ha ganado mucho interés de los usuarios de Android, desde el año pasado cuando fue comprada por Google para expandirse por el sector de los wearables. Sin embargo, hay que tener en cuenta que Fitbit ya estaba desarrollando productos antes de la compra, y estos no han sido cancelados.

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En ese sentido hay que comprender el anuncio de hoy de tres nuevos modelos, y el hecho de que ninguno de ellos esté basado en Wear OS, que sería lo lógico; Google reafirmó su apuesta por los wearables con una nueva versión del sistema operativo, pero lamentablemente, sólo Samsung la ha aprovechado con sus Galaxy Watch.

Aún así, Fitbit sigue siendo sinónimo de calidad, y la falta de Wear OS no nos impide ver que estos nuevos modelos son una evolución de los presentados originalmente hace ya dos años, algo evidenciado por sus nombres.

Fitbit Sense 2

El modelo más puntero es el Fitbit Sense 2, un auténtico reloj inteligente y probablemente el más completo para los que gustan de hacer fitness. Eso es gracias al nuevo sensor de respuesta del cuerpo, que, la compañía afirma, permite registrar el estrés de manera continua y sin saltos; a eso hay que sumar el registro de ritmo cardíaco, variabilidad del ritmo cardíaco, y temperatura corporal, que nos permitirá obtener una mejor idea de cómo está nuestro propio cuerpo.

La clave de estas mejoras está en el uso de una nueva tecnología implementada en los sensores, que integra electrodos de metal en el cristal; eso también se traduce en un reloj más fino, ya que los componentes no ocupan tanto espacio interno. A su vez, eso ha permitido mejorar la duración de la batería hasta los seis días, e implementar carga rápida que obtiene un día de batería con sólo 12 minutos de carga.

Como es habitual en Fitbit, el verdadero motivo por el que comprar este y el resto de dispositivos estará en el software, gracias a nuevas funciones como el perfil del sueño, que usa diez nuevas métricas para mostrar patrones en nuestro sueño, explicarnos qué tipo de soñador somos, y mostrarnos consejos para dormir más y mejor.

El Fitbit Sense 2 estará disponible a partir de los 299,95 euros.

Fitbit Versa 4

Si no podemos costearnos tanto, el Versa 4 está un escalón por debajo. Pese a eso, sigue ofreciendo una experiencia muy parecida, sólo con algunos recortes; el principal, la eliminación del sensor de respuesta del cuerpo.

Pero aparte de eso, es muy parecido sobre el papel, siendo capaz de registrar también el sueño de manera avanzada y de registrar el ritmo cardíaco con precisión. La mayoría de las funcionalidades estarán disponibles en la app, y el Versa 4 también tiene la nueva interfaz mejorada que usará el Sense 2.

Por todo esto, el Fitbit Versa 4 costará 229,95 euros, por lo que puede ser una opción mucho más atractiva para el usuario medio.

Fitbit Inspire 3

Por último, Fitbit también ha actualizado su pulsera de actividad, pero en este caso, las novedades son más numerosas e importantes, empezando por la nueva pantalla a todo color (sí, el Inspire 2 aún usaba una pantalla monocromática). Eso hace que elegir una pulsera pequeña de Fitbit por fin sea recomendable, frente a la más grande, la Charge 5.

Pese a la nueva pantalla, el Inspire 3 promete 10 días de duración de la batería, y todas las funciones que podemos esperar como registro del ritmo cardíaco, registro del sueño, de fitness y monitorización de oxígeno en sangre (SpO2).

La mejor noticia es que esta nueva pantalla a color no trae consigo una subida de precios, y cuesta los mismos 99,95 euros que el modelo anterior.