No es la primera vez que hablamos de la posibilidad del control remoto de dispositivos a través de Android. De hecho no es nada nuevo, y hay muchísimas aplicaciones que lo hacen de una u otra forma. Aquí hemos analizado unas cuantas, tanto para Windows como para otros sistemas o cometidos. Pero siempre hay margen para la mejora y para nuevas propuestas, por eso esta vez nos hacemos eco de una aplicación que también permite tanto emular un mando de PS3, como controlar el ordenador. Se trata de BlueputDroid.
Sobre todo en el aspecto de las videoconsolas, los mandos están puramente diseñados para el juego, pero poco a poco las consolas han evolucionado, ofreciendo muchas más prestaciones que el simple entretenimiento de videojuego. Al añadirles la capacidad de conectividad, y muchísimas funciones sociales, escribir con el mando de la consola puede resultar ser una auténtica pesadilla. Por eso, además de teclados bluetooth a precios de oro, es posible que podamos usar nuestro Android.
Algo que aunque resulta buena idea, no lo es tanto para el juego en sí. Ya que BlueputDroid nos emula y nos muestra por pantalla un mando, pero resulta inevitable tener que mirar a la pantalla mientras jugamos ya que no notamos el «tacto» de las teclas. Pero en cambio si que nos podemos beneficiar del uso del teclado para escribir y evitar el mal trago de tener que escribir a trompicones con el mando. Cosa que también nos vale para controlar el ordenador, aunque todavía no funciona para Windows, y poder escribir remotamente o usarlo como ratón. Gracias a que la conexión entre terminal y dispositivo a controlar se hace por Bluetooth, es muy sencillo emparejar los dispositivos.
Será necesario tener root en el teléfono, y por desgracia no todos los terminales son compatibles con esta aplicación debido a un tema de configuración del bluetooth que varía según algunos terminales. Algo que también puede pasar es que aparezcan algunos fallos con según que ROMs personalizadas. El desarrollador recomienda usar Cyanogen, con la que asegura que no hay problemas.