Si sólo el 12% de los niños pudiera leer hoy en día, sería la mayor discusión en el mundo.

Esta frase, dicha por el presidente de la National Braille Press, Brian A. MacDonald, ha sido una crítica a uno de los problemas más grandes que está afectando a la gente con discapacidad visual: la falta de alfabetización, que ha caído precisamente hasta un triste 12% entre estas personas, con lo que Brian concluyó:

Pero debido a que los invidentes son una población tan pequeña, este problema pasa desapercibido

A raíz de esto, MacDonald y su equipo en Boston están terminando de pulir una tablet que pretende, a través de una innovadora campaña, luchar en favor de la alfabetización de las personas invidentes, gracias a la primera tablet Braille para invidentes, denominada B2G-20. Pretenden con este proyecto reducir el desempleo y pobreza, cada vez más intensa en este sector de la población.

A priori, parece un concepto difícil de entender (una tablet para invidentes), pero la clave radica en que es una tablet del tamaño de un Kindle que no requiere de una pantalla de visualización. En su lugar, un campo de texto de 20 caracteres con puntos de níquel y titanio que pueden salir y entrar permitirán formar letras Braille. Un teclado de 8 teclas estándar permitirá la entrada de datos al dispositivo.

Este ambicioso proyecto ha sido diseñado por Deane Blazie (pionero en tecnología asistida) y Mike Romeo (ingeniero de hardware) de forma voluntaria.

La tablet ejecuta la última versión de Android, contando entre sus especificaciones con reconocimiento de voz, GPS, WiFi, cámara, reconocimiento de texto óptico… pero la mayor parte de ellos pensados en llevarlos un paso más allá:

  • El reconocimiento de voz está vinculado a tutoriales Braille, de forma que podamos incluso aprender Braille
  • La cámara permite tomar una imagen de un símbolo o un menú para leerlo en Braille, por ejemplo

Todo pinta genial, pero ¿cuáles son los inconvenientes? Para Blazie, el principal problema es de presupuesto. Su equipo ha recaudado y gastado ya un millón de dólares, pero ahora necesitan 200.000 dólares adicionales para poder llevar el dispositivo al mercado. Como último recurso, están a punto de lanzar una campaña de crowdfunding en Kickstarter para financiar dicha cantidad y poder llevar este dispositivo al mercado, por menos de 2500 dólares por unidad.

Aun así, tienen pensado ya la evolución del proyecto, buscando conseguir la primera tablet que muestra gráficos 3D para invidentes, la cual está a sólo unas semanas de su finalización. Esta versión del proyecto, permitirá llevar un carro portátil que imprime una pantalla Braille actualizable y que permite construir dichas imágenes gracias al mismo tipo de puntos elevables del proyecto original. Pero una vez más, el problema es el presupuesto. Necesitarían otro millón de dólares para en un plazo de dos años ponerlo a la venta en el mercado.

Aparte de este tipo de proyectos, hay otros que pretenden también facilitar la vida en la medida de lo posible a los invidentes. En El Android Libre ya hemos analizado algunas aplicaciones que se han publicado para este fin, pero hay otras diseñadas con el fin de mejorar la accesibilidad también. Un ejemplo sencillo es el caso de My Taxi App, una aplicación para disponer de todo tipo de información sobre taxis, que haciendo uso de los programas VoiceOver y TalkBack, permite a los invidentes manejar esta aplicación de manera autónoma.

Pero aún podemos llegar más allá. Droiders, una empresa española situada en Murcia, ha utilizado las Google Glass para dar un paso más en la ayuda al invidente, desarrollando su proyecto Glass Blind, que ha dado lugar a la aplicación Glassters OCR, la cual reconoce textos, y los lee al usuario a través de las gafas. El sonido se transmite por vibraciones al oído interno, por lo que el usuario recibe la lectura personalmente. Además prometen traducción a otros idiomas y reconocimiento de objetos en futuras actualizaciones.

La accesibilidad está aún por explotar en el universo Android (y móvil en general) y, desde luego, nos enorgullece poder leer sobre este tipo de proyectos para la integración total de las personas. Además, es motivo de satisfacción aún mayor ver como desde España también se está innovando en este sentido.

¿Acaso no es nuestra obligación hacer llegar todos los avances tecnológicos a todo el mundo? ¿Qué opináis?