A Google no le tiembla el pulso a la hora de abrir nuevos servicios e iniciar el desarrollo de apps, incluso aunque dupliquen lo que ya tiene en el catálogo. Y, como no duda en arrancar nuevos desarrollos, tampoco duda en acabar con los antiguos, incluso aunque aún se utilicen. Es el caso de dos servicios que, justo hoy 2 de abril, llegan al final del camino.
Uno de los servicios es Google+, la otrora red social que actualmente se ha quedado casi como foro para desarrolladores. Y el otro servicio, con su respectiva aplicación Android, es Inbox. Google no va a repetir el error de competir en redes sociales contra Facebook y Twitter, pero sí mantiene la hegemonía en términos de clientes de correo electrónico. Hegemonía que podría ser mayor si Google aprovechase el bagaje de Inbox para incluir las opciones que lo hacían único.
La aplicación de Inbox se apaga hoy y no habrá manera de utilizarla
Es definitivo: Inbox llega a su final, por lo que hoy debes cambiar de cliente de correo electrónico en el caso de que aún te empecinaras en utilizar el ya viejo servicio. En XDA Developers han descubierto una posible manera de mantener a Inbox operativo, pero no compensa en exceso dado lo desactualizado que se encuentra el cliente de email. Eso sí, el viejo Inbox aún tiene mucho que enseñarle al espabilado Gmail.
¿Qué es lo que Google aún no implementó de Inbox en Gmail? El cliente principal ha ido ganando novedades importantes, como un diseño renovado por completo o la opción de programar la entrega de correos electrónicos, pero sigue manteniendo carencias que hacían de Inbox una opción de interesante. Como destacan en 9to5Google, la empresa debería incorporar a Gmail las siguientes opciones:
- Organización automática por categorías. Gmail divide los correos importantes (Principal) del resto de emails más prescindibles (Notificaciones), pero Inbox iba mucho más allá: gracias a su sistema de Inteligencia Artificial, detectaba el tipo de email dividiéndolo en redes sociales, promociones, correos financieros… Sumamente cómodo.
- Opción a anclar correos. Ponerle una «chincheta» a un email para así tenerlo lo más alto en la bandeja de entrada. Algo tan básico es extraño que Gmail no lo haya incorporado todavía.
- Sección de recordatorios. En Inbox se puede (se podía) ver de un vistazo los recordatorios pendientes de Gmail con solo pulsar el icono inferior pertinente.
- Búsqueda mejorada. Inbox siempre hizo gala de la Inteligencia Artificial de Google. No es algo de lo que Gmail adolezca precisamente, pero sus búsquedas sí que eran mejores que las de su hermano. Además, Inbox previsualizaba los emails para así no tener que escribir toda la búsqueda.
También el estilo y el diseño de Inbox tenía sus particularidades por más que Google llevase meses sin actualizar este cliente de correo electrónico. Usar Inbox aportaba una experiencia distinta de la de Gmail por más que sirviesen para lo mismo y, en el fondo, ambas aplicaciones se conectasen a los mismos servidores. Es una lástima que Google desconecte a Inbox: pese a ser un experimento desde el principio, este cliente había adquirido entereza y carisma propios. Quienes lo usábamos como aplicación principal para los emails lo echaremos mucho de menos.