En los meses cálidos del año, las aplicaciones que supuestamente espantan a las moscas y mosquitos empiezan a instalarse en muchos móviles en España. Mucha gente recurre a ellas como método para combatir a estos insectos, pero ¿realmente funcionan? Nada tiene que ver con Mosquito Alert: la app de Sanidad para notificar picaduras de mosquito tigre y parar su expansión en España.
Estas apps basan su funcionamiento en la emisión de ultrasonidos y otras características que van variando de una app a otra. Sin embargo, es complicado medir los resultados a simple vista, algo de lo que se aprovechan estas apps.
¿No aparecen mosquitos porque la app está funcionando, o no aparecen porque no hay ninguno cerca? Puede ser complicado saberlo a simple vista, pero la ciencia no engaña.
Apps para espantar moscas
Llegan la primavera y el verano y con ello, las moscas y los mosquitos, quizá los insectos que más se ven en el día a día y que más irritantes pueden ser. No solo por las picaduras, sino también por la molestia que supone tenerlos revoloteando por casa o por la oficina.
Existen un considerable número de aplicaciones en Google Play que prometen deshacerse de estos mosquitos repeliéndolos mediante ultrasonidos. Una teoría que está muy bien para ser lo que es: una teoría.
En la práctica, no funcionan, y no porque no emitan estos ultrasonidos, sino porque a los mosquitos y las moscas les da totalmente igual, e incluso se acostumbran a estos ruidos imperceptibles para el oído humano.
Esta forma de espantar insectos con ultrasonidos se basaría en que a las hembras de mosquito les repelen estos sonidos, pero es algo que no está probado científicamente. De hecho, es todo lo contrario.
Más allá de las pruebas que hay en internet hechas por videoaficionados, en 2007 Cochrane evaluó 10 estudios de campo con ultrasonidos e insectos y determinó que no hay evidencias para apoyar esta teoría sobre los ultrasonidos.
La OCU ya pidió hace unos años que se retiraran los repelentes de mosquitos eléctricos del mercado por su nula efectividad. Y lo mismo sucede con las aplicaciones para móvil que prometen tener el mismo efecto.
Un peligro para la seguridad
Si bien estas aplicaciones no suponen un peligro para los insectos, sí que lo pueden ser para la seguridad del móvil o tablet donde se instalen. Los permisos que piden este tipo de aplicaciones son excesivos para sus funciones, y hay otras cosas que no cuadran.
En Google Play pueden verse varios datos sobre cada aplicación, como los datos que la comparte con terceros, los datos que recoge del dispositivo en el que está instalado y las prácticas de seguridad.
Al buscar en varias de estas aplicaciones, hemos encontrado que piden una serie de permisos bastante intrusivos. Se trata de apps cuya única misión es emitir ultrasonidos, por lo que no hay necesidad de que los pida.
Se trata de algunos como el acceso a las fotos y vídeos del dispositivo o el acceso a la ubicación precisa. Sumando esto a que hay algunas que no cifran los datos y que pueden compartir esta información con terceros, no parecen muy de fíar.
[La aplicación más descargada es una peligrosa app de linterna]
Es importante comprobar los permisos y la información que recogen este tipo de aplicaciones, igual que sucede con las aplicaciones de broma que imitan objetos como linternas, máquinas de cortar el pelo y demás. Hay ocasiones, como esta, en las que detrás de ese tipo de apps puede haber malas intenciones.