En las últimas décadas la sociedad occidental ha cambiado radicalmente en muchos aspectos. La llegada de la mujer al mundo laboral de forma masiva ha sido uno de los puntos de fractura con el estatus previo, que daba por sentado que mayoritariamente se quedarían en casa a cuidar de los niños. Esto ha hecho que la sociedad haya avanzado, cambiando en muchos aspectos.
Uno de los más llamativos es la gestión de las tareas del hogar, acciones que hay que realizar siempre que se viva de forma independiente, ya sea solo, en pareja o en familia. Al no haber una persona que se encargue de eso, las tareas recaen ahora en todos los miembros, persona que normalmente tienen que trabajar fuera de casa.
Esto hace que tanto hombres como mujeres ahora tengan que estar pendientes de muchas más cosas que antes. Además de los problemas laborales hay que estar pendientes de todo lo que hay que hacer en casa, lo que se ha llamado La Carga invisible.
Samsung ha querido centrarse en esta idea y ha colaborado con el autor Mo Gawdat, antiguo Director Empresarial de Google [X], actualmente escritor y autor de los bestsellers internacionales Solve for Happy; Scary Smart; y That Little Voice in Your Head. El ingeniero se ha centrado, tras la muerte de su hijo, en ayudar a mil millones de personas a ser más felices. Para ello ha publicado un estudio llamado “La carga mental invisible” (“The Invisible Load”), una herramienta única que calcula la carga física y mental de las tareas domésticas cotidianas.
La carga invisible
Samsung ha querido usar su plataforma SmartThings para minimizar el tiempo que las personas dedican no sólo a realizar las tareas del hogar, unas 30 horas semanales en Europa, sino también al tiempo que se pierde pensando en ellas, que es casi el mismo, unas 25 horas semanales. Además, según el estudio en el que se basa Samsung, un 54% de los europeos cree que el precio de la energía dificulta las tareas domésticas.
La intención de Samsung es disminuir la carga mental y física de esas tareas, minimizando el estrés en casa. Como el propio Mo Gawdat ha indicado en una charla a la que hemos podido asistir, "el hogar ha de ser un lugar en el que recuperarse del estrés, no uno en el que sufrir más". También ha dejado claro que "el estrés puntual puede ayudar, puede centrar nuestra atención, pero a largo plazo puede hacernos colapsar".
De hecho, el síndrome de burnout se produce cuando hay muchas tareas diferentes, aunque sean pequeñas, y no por una grande. Ahí es donde el día a día, con pequeñas tareas que no son complejas pero se acumulan, afecta a los ciudadanos. Además, hay que considerar no sólo el número de tareas, sino la intensidad de las mismas y el clico de frecuencia con el que se repiten.
Para que una casa esté como se quiere (limpia, ordenada, bonita...) se requiere un tiempo que no siempre se tiene, o que no se quiere dedicar a ello. A esto se suma la inercia de muchas personas de no querer parar de hacer cosas para no tener que pensar en todo lo que queda pendiente.
Y hacer las tareas es sólo la mitad de la carga. Los europeos dedican un 86% más de tiempo a planificarlas que a su realización. Y esto es sólo una de las muchas cifras del estudio que llaman la atención. Con más de 6.000 encuestas, Samsung ha extraído datos bastante llamativos, como que dedicamos un 92% más de tiempo a pensar en la comida que a cocinarla, un 91% más de tiempo a pensar en la seguridad del hogar que a tomar medidas para prevenir las amenazas domésticas o un 88% más de tiempo a pensar en cómo deshacerse de la basura o reciclar que a realizar la tarea en sí.
SmartThings
La estrategia de Samsung pasa por usar su plataforma de domótica, SmartThings, para poder ayudar a sus usuarios a gestionar y ejecutar esas tareas domésticas que roban tiempo y energía en el día a día. Para ello se basan en su plataforma de software y en sus dispositivos.
Aquí hablamos de móviles, tablets, relojes u ordenadores, pero también de frigoríficos, lavavajillas, hornos o robots de cocina. Además, Samsung cuenta con más de 300 empresas que colaboran con ellos y tienen dispositivos que se integran dentro de su plataforma, buscando crear una experiencia de uso sin fricción.
Las automatizaciones y la supervisión remota disminuyen la presión sobre tareas pendientes, y es en estos dos apartados donde más se ha centrado la compañía. El ecosistema que rodea a SmartThings busca dar control sobre tareas y poder gestionarlas cuando se quiera y desde donde se quiera.
Obviamente, la mayoría de personas no se compra una casa automatizada al máximo, sino que empieza modificando el sistema de luces, integrando un sistema de alarmas, configurando aspiradoras inteligentes que limpian sin tener que hacer nada... Poco a poco estas tareas van eliminando de la cabeza de las personas la necesidad de realizar ciertas tareas y, lo que es más importante, estar pendiente de ellas.