A finales de 1998 salió al mercado para la consola Nintendo 64 y para PC uno de los mejores juegos basados en la saga galáctica Star Wars: Rogue Squadron. Desde entonces han aparecido varias entregas de la saga, en la que nos poníamos al mando de diversas naves espaciales sacadas de las películas clásicas, como el X-Wing o los cazas TIE. Desde la última entrega, Rogue Squadron III para Gamecube, la saga no ha vuelto a dar señales de vida, pero afortunadamente hay algunos desarrolladores que han decidido recuperar ese estilo de juego y han creado Alpha Squadron.
Alpha Squadron camina la fina línea entre homenaje y copia pura y dura. De hecho, me extraña que aún no hayan recibido una visita de los famosos abogados de Lucas Films, pero supongo que estarán demasiado ocupados con la compra por parte de Disney. Lo cual es muy afortunado por nuestra parte, porque así podemos disfrutar de este baño de nostalgia. Y esta nostalgia va mas allá de que el juego «se de un aire» a Rogue Squadron, ya que las similitudes alcanzan hasta la interfaz, que es completamente idéntica, desde los mensajes hasta el radar, pasando por la mirilla usada en todos los juegos de la saga original.
Controlamos un caza de combate con las armas dispuestas en X (guiño), y lucharemos contra el Imperio Hadian (guiño, guiño), en combates que se desarrollarán a través de toda la galaxia (me ha dado un esguince en los párpados). Pero, ¿este juego aporta algo mas que nostalgia? Pues afortunadamente parece que los desarrolladores no se quedaron solo en el aspecto a la hora de inspirarse, sino que jugablemente el juego parece muy sólido. Los gráficos no son los mas bonitos que hemos visto, pero aún así hay algunas misiones con escenarios realmente bonitos y efectos interesantes. También hay que tener en cuenta que a diferencia de otros shooters tenemos completa libertad a la hora de mover nuestra nave, en grandes entornos en 3D en los que podremos atacar a las naves enemigas en todas direcciones. También hay otras misiones con escenarios en forma de pasillo, ya sea pasando entre cañones o dentro de instalaciones enemigas, que pondrán nuestra paciencia a prueba intentando pasar por semejantes estrechos.
Seguramente lo peor sea todo lo que ocupan los controles en la pantalla, que junto con elementos como el radar, quitan mucha visión. Si nuestro dispositivo no es muy grande, lo pasaremos mal intentando ver qué está pasando. En estos casos un mando de control conectado por Bluetooth es el mejor complemento posible que podemos conseguir. Alpha Squadron no solo es un ejercicio de nostalgia, sino que también es recomendable para cualquiera que no haya jugado la saga en la que se inspira, y quiera un shooter espacial de calidad.