A la ahora de pasar un género de videojuegos a formato móvil, no siempre es posible copiar exactamente sus características, por las propias limitaciones del dispositivo. Sabemos que la pantalla táctil no permite muchas florituras con el control, así que es interesante ver cómo algunos desarrolladores están variando sus juegos para adaptarse mejor a las circunstancias. El ejemplo que nos toca hoy es Static Quest: The Delivery, un juego de supervivencia con un par de detalles muy interesantes.
Empezando por la historia, que es graciosa por lo inverosímil que es. Controlamos a un empleado de una empresa de mensajería cualquiera, que acaba tirado en mitad de la nada por un accidente. La naturaleza es peligrosa, y mas si está llena de zombies, monstruos cíclopes, y otros engendros. Como buen repartidor, tendremos que proteger nuestra carga (y nuestra vida, ya de paso).
En los juegos de supervivencia, el objetivo es aguantar la mayor cantidad de tiempo posible con vida, y normalmente tenemos grandes escenarios en los que protegernos de las oleadas de monstruos. En el caso de Static Quest, esto no es así, ya que el protagonista se queda quieto en el centro de la pantalla, y solo se mueve entre escenarios una vez que termina la visita de los enemigos. Igualmente, el juego es en dos dimensiones, por lo que «solo» tenemos que controlar los ataques hacia cada uno de los lados.
La clave para sobrevivir está en calcular adecuadamente los ataques, ya que conforme avancemos de nivel los monstruos nos atacarán por ambos lados. ¿Es mejor tirarle una piedra a un enemigo que nos está machacando a distancia, o mejor nos encargamos primero de un par que están a nuestro lado? Decisiones como esta son la salsa de Static Quest. Entre nivel y nivel, siempre podemos mejorar nuestras armas y nuestro personaje, en un toque rolero que se agradece. Además, algunas de estos accesorios tienen guiños curiosos a otros juegos.
Static Quest es una buena adaptación del género de la supervivencia a un control móvil, aunque por el camino de la sensación de que se ha simplificado demasiado un tipo de juego que ya era simple para empezar. En todo caso, es un buen juego gratuito (con publicidad) para pasar el rato.