Hambre, sed, soledad, peligros entre las sombras… Si a esto le añadimos unos zombis que van a buscarte, ¿qué razón tienes para preocuparte? Last Day on Earth.

Estamos en una época en la que los juegos de supervivencia extrema están de moda. Si le añadimos un modo multijugador suele ser un éxito instantáneo.

Los usuarios de dispositivos móviles, debíamos conformarnos con versiones descafeinadas o intentos no demasiado afortunados de llevar el género a nuestros bolsillos. Tranquilos, la espera ha llegado a su fin.

Last Day on Earth

Lo primero que debemos aclarar es que estamos ante un juego en fase BETA, por lo que irá evolucionando en el tiempo y además podemos encontrarnos algún error. El tiempo que lo hemos jugado ha sido una experiencia bastante satisfactoria, pero cada dispositivo es un mundo.

Una vez instalado el juego lo que más nos llama la atención es que no existe una introducción o algo que nos explique la situación. Directamente estamos en una pantalla de carga; tras unos segundos, debemos seleccionar uno de los servidores disponibles.

Lees bien, es lo primero que debemos seleccionar, ya que este juego es un multijugador masivo. Dicho de otra manera, un todos contra todos. En cada servidor viene indicado el nivel de jugabilidad y dificultad. Una vez seleccionado… ¡Empezamos!

Los comienzos son duros, literalmente

Ya dentro del juego nuestra situación no puede ser más incomoda. Un bosque oscuro, una camioneta abandonada y nosotros… en calzoncillos. Ese es nuestro comienzo en esta aventura. Deberemos buscar abrigo y sobretodo algo que usar para defendernos.

Es uno de los puntos positivos del juego, no te da un respiro. Desde el comienzo ya sientes que tu situación no es la de estar en unas bonitas vacaciones. No tardaremos en tener la visita de algún que otro zombi interesándose por nosotros.

Las pausas no existen en este juego, eso será una lección que aprendemos bastante pronto. Lo normal al empezar a jugar un nuevo juego es investigar los menús y opciones que tenemos disponibles. Con Last Day on Earth es complicado ya que justo en ese momento pueden aparecer unos cuantos peligros acechando.

Unos controles bien adaptados

Los controles táctiles suelen ser la pesadilla de algunos, sin embargo estamos ante un juego que lo ha implementado de una manera bastante eficiente. Todo es intuitivo y está en su lugar.

En la parte superior encontramos el menú de opciones, el mapa con nuestra ubicación y el botón de construcción. Dentro de las opciones tenemos la típica de activar/desactivar el sonido o la música. Usar Google Play Juegos para guardar el desarrollo de nuestro juego. Y algo de lo que hablaremos más adelante, los niveles de detalle.

Si bajamos a la parte inferior nos encontraremos a la derecha una serie de botones. Armas, modo sigiloso, inventario, dinero y planos, esas son las opciones que tenemos. En la izquierda disponemos del control de nuestro personaje, bastante preciso y con niveles para andar o correr. Además de un modo automático, en las que nuestro personaje recogerá recursos él solo.

Gráficamente sencillo, pero hace su trabajo

Last Day on Earth nos permite seleccionar el nivel de detalle gráfico del juego. Disponemos de tres opciones: baja, alta y ultra. Seleccionando el nivel bajo, la experiencia de juego es totalmente satisfactoria. De hecho si la usamos sin probar las otras opciones veremos que el juego se desempeña muy bien gráficamente.

Subir de nivel añade detalles que hacen la experiencia visual más enriquecedora, pero como he comentado anteriormente en el nivel bajo no te hace sentir esa sensación de estar perdiéndote algo.

Nuestro personaje y enemigos están bien detallados, dentro de la simpleza. Si habéis jugado a Los Sims os podéis hacer una idea de a lo que me refiero. El entorno y todo lo que lo habita está al mismo nivel: estamos ante un juego que nos hace olvidarnos de los gráficos para envolvernos en la historia que estamos llevando a cabo.

Sonido, algo flojo

Entramos ante el apartado más flojo del juego, sin llegar a ser malo. Lo primero que escucharemos es una música que va y viene, digamos que está ahí sin molestarnos.

Los efectos sonoros son simples, pero hacen su cometido. Si estamos bebiendo, oiremos como bebemos. Igual si estamos comiendo, cocinando o realizando cualquier otra actividad.

Los enemigos tienen sus sonidos y efectos dependiendo del tipo al que nos estemos enfrentando. En general es un apartado en el que, aún siendo el más flojo, hace lo que se espera de él en un juego de este tipo.

Las pausas, añaden un punto de tensión importante

Last Day on Earth es un juego gratuito. Sin embargo, nos encontraremos con la opción de pagar para conseguir ventajas o acortar los tiempos de espera. Yo recomiendo no usar las ventajas y tener paciencia. Este facto de esperas le añade un plus a la experiencia de juego.

Cuando vamos a trasladarnos de un lugar a otro del mapa deberemos esperar un tiempo de «viaje» que dependerá de si vamos andando, corriendo o haciendo uso de algún medio de transporte.

Si seleccionamos la opción de correr, se nos irá restando puntos de energía; si queremos recuperarlos tenemos la opción de pagar o esperar a que vaya subiendo de nuevo el nivel.

Lo que de primeras puede echarnos para atrás en este juego es un punto positivo

Bricomanía extremo, echando mano del crafting

Antes hemos hablado de dos botones que quizá os hayan llamado la atención: el de construcción y el de los planos. La combinación de ambos será un punto del juego totalmente clave.

Deberemos ir desbloqueando planos según nuestro nivel de experiencia para ir aprendiendo la creación de elementos que serán importantes en nuestra historia. Tenemos disponible desde un simple arcón para guardar objetos hasta la construcción de nuestro propio tanque antizombis.

Si queremos llevar a cabo lo aprendido en los planos deberemos usar el botón de construcción. Además de añadir elementos como los comentados anteriormente deberemos construir nuestro propio refugio ya que será dónde pasaremos gran parte de nuestra historia en el juego.

Alrededor de nuestro refugio, que iremos mejorando, haremos huertos, fogatas, ducha y demás elementos para nuestra supervivencia. El abanico de «inventos» es muy variado; y deberemos tener las piezas adecuadas si queremos llevarlo a cabo.

Derrotar a los enemigos no es suficiente

Quizá la primera idea al ver el juego sea la de «otro juego en el que debemos dar buena cuenta de nuestros enemigos antes de que lo hagan ellos con nosotros». Nada más lejos de la realidad.

El luchar contra los zombis que nos encontremos y con el resto de humanos hostiles no será lo único de lo que tendremos que preocuparnos. Nuestro personaje padecerá hambre, sed y necesitará quitarse de encima algún que otro olor de zombi.

Ahí entran en juego el huerto, la recolección de leña, el tener que cazar y el darnos alguna que otra ducha. Si osamos eludir alguna de estas acciones nuestro personaje empezará a bajar de nivel de energía. Y si aún así no hacemos nada acabaremos la partida.

No te fies de nadie, aunque sea humano

Si recordamos el comienzo de este análisis hemos dicho que una de las primeras cosas que debíamos hacer era seleccionar un servidor donde jugar. En el que seleccionemos encontraremos un mapa.

Dentro de dicho mapa hallaremos los refugios de otros jugadores online, los que podemos «visitar» aunque puede que no nos reciban de manera amistosa. Además encontraremos lugares dónde talar leña, picar piedra o puntos de salvamento dónde encontraremos un oasis lleno de objetos que serán importantes en nuestra historia.

Un detalle a tener en cuenta es que debemos «saquear» todo aquello que nos encontremos, nunca se sabe lo que nos podemos encontrar en los bolsillos de otro, aunque sea un zombi.

Conclusión

Last Day on Earth era un juego al que guardaba bastante escepticismo. No voy a engañaros, no es mi tipo de juego preferido. Sin embargo, la simpleza hace que te centres de lleno en la historia. En la búsqueda de elementos para llevar la supervivencia lo mejor posible. Y hasta en los tiempos de espera, encontramos cierto encanto al no tener una recompensa del tirón.

De hecho si estamos en uno de esos tiempos de espera podemos cambiar a otra aplicación o dejar nuestro teléfono; una vez completada la tarea nos llegara una notificación para así seguir jugando.

El que su estado sea en beta tiene sus partes buenas y otras no tantas. Las no tan buenas son el encontrarnos con posibles errores, aunque en nuestra experiencia no hemos hallado ninguno significativo. Lo bueno es que si la experiencia de juego es así de buena ahora debería ir a mejor en siguientes actualizaciones.