Ya está disponible The Room 4 Old Sins, el nuevo título de la emblemática saga de juegos de escapismo. ¿Estará a la altura?
En Android tenemos un problema con la calidad de los videojuegos. Al ser un sistema abierto y libre, la piratería campa a sus anchas y los desarrolladores se reservan sus mejores lanzamientos para iOS. Por ello, ver sagas de juegos con tanta calidad como Monument Valley es todo un logro que debemos apreciar.
La que más explota este concepto sin duda es la saga The Room, de Fireproof Games. Una de las sagas más aclamadas de Android que ya va por su cuarta y recién estrenada entrega, The Room 4 Old Sins. Y hoy analizaremos si han vuelto a conseguirlo… por cuarta vez.
The Room 4 Old Sins: Conceptos conocidos pero mejorados
Lo que más caracterizó a los anteriores The Room es su impecable acabado gráfico. Incluso el primer The Room tenía unos gráficos y un detalle fuera de lo común, y sentó las bases de lo que serían juegos bien hechos en Android. A medida que los títulos se han ido lanzando, esto ha ido mejorando. Esta nueva entrega no es diferente.
Con la mano en el corazón puedo decir que es sorprendente que este juego sea para móviles. Su detalle, sus gráficos y sobre todo sus escenarios son dignos de admirar, y Old Sins nos incita a explorar la habitación y a observar el trabajo de los desarrolladores con los detalles más escondidos. Tecnología antigua, engranajes, mecanismos ocultos… Todo está pensado hasta el más mínimo detalle.
El aspecto desvencijado de The Room 4 nos transporta a otra época, y con el componente de magia más vivo que en los anteriores The Room debido a su historia (no haremos spoilers). Y aunque la jugabilidad no ha cambiado en exceso, vemos cómo se han renovado ideas y reutilizado otras.
Como los otros juegos, The Room 4 Old Sins explota el escapismo; tenemos que resolver una serie de acertijos ocultos en una serie de habitaciones (aunque aquí no es exactamente así) y así llegar hasta el fondo del asunto. Fórmula que ya se ha usado en anteriores juegos pero que aquí se han unido entre sí, ya que vemos cómo han mezclado la jugabilidad de todos los The Room anteriores en una sola.
Ahora la cosa va de sellos, y se lleva de la siguiente forma. En el primer The Room nos entreteníamos con una única caja que íbamos desmontando. En el 2 pasamos a habitaciones seguidas con más de un elemento en la habitación, y en las 3 había directamente varias habitaciones interconectadas. En este Old Sins vemos que todos estos conceptos se han unido.
Fireproof Games ha vuelto a sus orígenes con Old Sins, renovando viejas ideas y solucionando errores
Aquí tendremos que resolver los misterios de una casa de muñecas, como la caja del primer The Room. Pero hay trampa, ya que tendremos muchos elementos interconectados entre sí para desentrañar sus misterios, como en el The Room 2. Las mismas habitaciones de esta casa de muñecas emularán las habitaciones del 3, ya que con la ayuda de nuestro monóculo podremos acceder a ellas.
Personalmente, me parece una idea increíble. Reduces el escenario a un espacio conocido como hicieron en la primera entrega. Unes todos los detalles posibles para alargar la jugabilidad como en la segunda, y no te impide formar diferentes niveles dentro de un mismo mundo, como se hizo en la tercera. Una vuelta a las raíces (literal) que desemboca en una jugabilidad final exquisita.
Unos gráficos que vuelven a deslumbrar
Ya el primer The Room nos dejó con unas sensaciones increíbles debido a que sus gráficos no parecían de un juego de móvil. En este caso se han vuelto a superar, y el nivel de detalle y de efectos ha aumentado considerablemente, dejando un apartado gráfico difícil de superar.
Esto es especialmente importante, ya que en un juego en el que tienes que resolver misterios del escenario, necesitas tener una buena calidad gráfica que te invite a explorar. En este caso nos quedamos maravillados observando cómo se han preocupado hasta del nivel artístico que siempre ha caracterizado The Room, como sería en este caso, la simbología arcana.
De hecho, una de las pocas quejas que se dieron en los anteriores The Room fue que aunque el nivel de detalle era genial, la inclusión de «magia» merecía unos efectos especiales más intensos. Aquí vemos explosiones de fuego, raíces oscuras corrompiéndolo todo, magia arcana inundando el ambiente… hay momentos que, sin exagerar, me he quedado expectante con nervio de saber qué pasaba.
Sólo hay una queja al respecto: debido a que ahora tenemos que movernos en un ambiente más mágico, a veces las transiciones de unos escenarios a otro son demasiado espesas, y a veces te hartas un poco de estar revisando el escenario buscando pistas debido a la lentitud de dichas animaciones.
El misterio, así, da mucho más interés. Porque la simbología del elemento Vacío que ya inició el The Room 2 se ve mucho más acentuada en este The Room 4, viendo todo un trabajo artístico por detrás en este tema. Después de todo, estamos hablando de artes oscuras, y una buena simbología rúnica era necesaria en este juego. Y lo han conseguido.
¿Y qué tal la historia?
Casi todos los juegos de este estilo que pululan por la Google Play tienen una historia o muy mala o directamente no la tienen. En la saga The Room tenemos una trama bien pensada, y aunque no estaba totalmente explicada, era misteriosa y adictiva. ¿Qué tal les ha ido en esta cuarta parte?
Aquí he encontrado luces y sombras. Sin haceros spoilers, en las anteriores entregas encarnábamos al aprendiz de un hombre llamado «El Artesano», el cuál había descubierto un elemento nuevo, el «Vacío» y se había perdido en una serie de realidades paralelas. Nosotros también quedamos atrapados y debíamos seguirle los pasos.
En este caso, es radicalmente distinto. Nos ponemos en la piel de un investigador que, tras los incidentes del The Room 3, va a investigar a la morada de este científico y averiguar todos los pasos de la investigación de El Artesano. Un giro de tuerca que nos ha gustado y no nos ha gustado a la vez.
Pasamos de ser un aprendiz a un investigador: la historia de The Room sigue por otras sendas
El volver a tocar la jugabilidad del primer título, vemos que falta profundidad, por lo menos en los primeros ratos de juego. Volvemos a basarnos en anotaciones, pero no se tocan apenas los sucesos de los anteriores juegos y se basan casi exclusivamente en los momentos previos al descubrimiento del Vacío. Esto hace que no nos encariñemos tanto con el protagonista y nos centremos más en resolver misterios que en seguir el «lore».
Además, un detalle importante es que en las anotaciones de El Artesano de los otros juegos, este no sólo aparecía, sino que se dirigía directamente a nosotros. Nos involucrábamos en la historia, nos metíamos en la piel del protagonista. Aquí no es así, y hace que nuestro amigo el investigador sea un jugador más plano que en juegos pasados.
Un buen ejercicio intelectual
La dificultad de The Room es media. Podemos acceder a pistas por si nos quedamos atascados, y me ha sorprendido ya que al haber jugado a los otros juegos y tener una experiencia previa en la saga, me he visto usando dichas pistas más veces de lo que yo pensaba. No es un juego especialmente difícil, pero sin duda tendrás que rebanarte los sesos.
Lo que sí estoy seguro es que si bien no es un reto intelectual, es un buen ejercicio que viene bien ejercitar de vez en cuando. Y no sólo ejercitamos el cerebro, también forzamos nuestra percepción. Tendremos que revisar más de una vez el escenario para ver qué se nos ha pasado y ver aquella pista que nos hace falta para pasar al siguiente nivel.
Si querías tener un buen ojo avizor al detalle, The Room 4 Old Sins es un gran campo de entrenamiento.
Conclusión: ¿uno de los mejores juegos de Android?
Un juego con tal nivel de calidad no podía ser gratis. El precio actual de The Room: Old Sins es de 5.49 euros. Si sois de los que os basáis en las valoraciones del juego, el éxito ha sido tal que mientras escribo estas líneas su nota media en Google Play es de 4.9 estrellas. Todo un éxito por parte de los chicos de Fireproof Games.
Mi conclusión es la siguiente: estamos ante uno de los mejores juegos de Android hasta la fecha. Es una afirmación muy rotunda, sí. Pero The Room 4 supone un nuevo estándar de calidad que pocas veces habíamos visto en nuestro sistema, y puedo asegurar tras haberlo jugado de forma intensiva que vale cada euro de su coste.
Un juego con un diseño increíble, una historia muy bien hecha y con un concepto que aunque ya se ha visto no deja de gustar. Su única contrapartida es su «escasa» duración, ya que en unas 5 horas de juego intensivo (si eres hábil). Una vez completado, la rejugabilidad es un poco escasa y quizás nos quedemos cortos en este aspecto.
Por lo demás, recomiendo que probéis The Room 4: Old Sins. Si estáis buscando calidad en un juego de Android y queréis gastaros algo del dinero que tenéis acumulado en saldo de Google Play, ni os lo penséis; Old Sins es una gran opción que difícilmente te decepcionará.