Pokémon es una de las franquicias más populares del mundo de los videojuegos. ¿Quién no conoce a Pikachu? Charmander, Bulbasaur, Eevee… Son nombres que ya han pasado a la cultura popular. No solo por la enorme saga de juegos de consola, también por el éxito que tuvo el juego para móviles Pokémon Go. Y hay que exprimir dicho éxito.

Pokémon Go continúa actualizándose en pos de mantener sus usuarios actuales, pero no es de ese título del que voy a hablar, sino de Pokémon Quest. Ambos mantienen parte de la esencia y también el bestiario, pero se diferencian claramente en el estilo: GO está indicado para jugar en movimiento; Quest apunta al jugador con más experiencia en las consolas portátiles.

Con la clara orientación de Pokémon Quest a los jugadores de portátil uno podría pensar que el juego mantiene la mecánica y gran parte del planteamiento, pero no: el título da un giro radical hacia el estilo freemium de las plataformas móviles modificando desde los gráficos hasta la forma de capturar Pokémon. Esta mecánica tan arriesgada planteaba muchas dudas, sobre todo de cara al aterrizaje de Pokémon Quest en Android y iOS. Así que, ahora que lleva algo más de una semana en las tiendas, toca valorar cómo está siendo su comportamiento.

Pokémon Quest tuvo una acogida tibia en Android que fue mejorando con los días

Pude probar el juego en mi Nintendo Switch desde el mismo día del anuncio ya que Nintendo lo tenía todo dispuesto para aprovechar la expectación. Como ya comenté en el pertinente artículo, Pokémon Quest no me pareció mal juego pese a que las compras in-app rompían con la esencia que mantenían los juegos de consola. Es más complicado evolucionar, pero tampoco resulta obligatorio gastarse el dinero. The Pokémon Company y Nintendo mantienen buen equilibrio en ese punto.

Decía que tuvo una acogida tibia por la escasa repercusión que recogió en los medios. En El Androide Libre publicamos el anuncio de su descarga nada más apareció por la Google Play sin que levantase muchos comentarios. Lo mismo ocurrió en el resto de páginas: no se vio el interés por descargarlo que sí tuvieron otros juegos móviles de la franquicia, como el propio Pokémon Go. No es ni mucho menos comparable, pero sí que se acercan aunque solo sea por compartir personajes.

Pokémon Quest no ha ascendido a los primeros puestos de la Google Play, sí que se mantiene en uno de los más descargados en el género de RPG (35 por apps, 17 por juegos y 1 en juegos de rol, actualmente en España). En la mayor parte del mundo ha tenido una acogida tibia, como decía, menos en Japón: se aupó al primer puesto en aplicaciones generales y también en juegos, ambas en la categoría de títulos gratis. Ahí sigue.

Echando la cuenta del número de descargas vemos que, tras algo más de una semana, supera el millón. En comparación, Pokémon Go batió el récords de descargas en móviles a la primera semana: solo en Estados Unidos ya superó los 20 millones de descargas.

Es un juego que no termina de encajar en los clásicos y que tampoco propone una ruptura en la mecánica

Jugar a Pokémon Quest te deja una sensación agridulce. Las primeras partidas te engancha, encuentras hasta original el método de captura de Pokémon, consigue lo que se propone: engatusarte con la apuesta visual y con la promesa de que el juego irá evolucionando conforme consigas más retos. Pero, tras las primeras horas, termina siendo un título que no ofrece muchos atractivos para continuar jugando.

La falta de atractivo a medio y largo plazo consigue aburrir antes de tiempo

Pokémon Quest ha sido una apuesta fuerte por las plataformas móviles y también por la Switch. La experiencia es homogénea en todas las pantallas, pero no tenemos continuidad entre ellas debido a que no podemos registrar la cuenta de Nintendo. Sí enviar una copia haciendo la transferencia de datos, pero el proceso es engorroso.

En definitiva: Pokémon Quest prometía, pero la burbuja se deshinchó al poco de estar disponible en la Nintendo Switch. El lanzamiento para móviles se esperaba sonado sin que apenas obtuviese eco. Y ni a los jugadores clásicos consigue atrapar: las críticas no son demasiado buenas.

¿Conseguirá remontar? Es difícil aventurarlo, pero todo indica que no. El destino de Pokémon Quest camina paralelo al de Animal Crossing para móviles o al ya extinto Miitomo: hicieron ruido en el inicio sin que consiguieran mantener al público. Con la diferencia de que Pokémon Quest no ha conseguido lo primero, una lástima.