La barra de notificaciones de creo que es uno de los mejores aciertos y una de las mejores cosas que encontramos en Android; útil, práctica, cómoda y realmente versátil. Las notificaciones que ahí encontramos pueden ser de todo tipo, desde un simple mensaje, hasta una gráfica de estadísticas, pasando por notificaciones interactivas o que nos permiten realizar acciones determinadas, y todo desde un mismo lugar. Pero como todo, tiene algunos «peros», y entre ellos está uno muy importante: saber usarla.
La importancia de las notificaciones
A pesar de ser una barra muy útil, y aunque algunos hayan intentado imitarla con poco o ningún éxito, requiere de algunos puntos a tener en cuenta para su correcto uso y utilidad. Está muy bien eso de poder tener todas las notificaciones en un mismo lugar, y la ventaja es que podemos, de un vistazo y sin necesidad de desplegar dicha barra, ver las notificaciones que tenemos… Siempre y cuando no tengamos un exceso de ellas.
Este es un problema que algunos usuarios se pueden encontrar, y puede convertirse en un problema algo más que visual o práctico, ya que puede repercutir en el rendimiento, funcionamiento o duración de la batería del terminal. He visto algunos teléfonos con montones de notificaciones, y al preguntarle a su dueño el motivo de tener tantas, me contesta que no lo sabe, que están ahí. Con esto me refiero no a las notificaciones de mensajes, correos o Whatsapp; me refiero a las notificaciones persistentes, que siempre están ahí.
Los motivos pueden ser varios, y algunas de ellas sí puede ser interesante tenerlas, pero muchas otras se añaden al instalar una aplicación y luego no se sabe como quitarla, como puede ser el caso de los antivirus, task-killers y demás aplicaciones similares. Otras aplicaciones, como las de estadísticas de batería, por ejemplo, nos añaden otro icono con el porcentaje que nos queda, aunque puede que no nos interese… Y así, un largo etcétera. Pero hay una forma de eliminar todas esas notificaciones que no nos interesan de forma nativa, aunque solo a partir de Android 4.2.
Para ello bastará ir a las opciones de la aplicación en cuestión, y desmarcar la casilla de «Mostrar notificaciones». Esto no significa que la aplicación deje de funcionar, simplemente no nos muestra su icono en la barra superior. De esta forma, esos iconos persistente desaparecerán, y tendremos más barra disponible para lo realmente necesario.
Estas notificaciones no solo pueden llegar a ser molestas, sino que, como hemos dicho, pueden repercutir en el propio teléfono. Si recordamos la última actualización de Android, que pasó de los colores azules de los iconos, a los grises, vemos que esta no fue únicamente una decisión estética, sino que se hizo también para mejorar el rendimiento y duración de batería. El motivo era que el estar cambiando continuamente el color o apariencia de los iconos, influía en el consumo de batería, igual que influye el hecho de mostrar tantas notificaciones; un símil puede ser la barra de inicio de Windows, que poco a poco se va llenando de iconos al instalar aplicaciones, y que es causante directa (aunque mucha gente lo lo sepa) de la lentitud del sistema, por ejemplo, al iniciarse, ya que debe cargar todas esas aplicaciones que están ahí, en segundo plano.
A veces, desde la propia aplicación, podemos activar o desactivar las notificaciones, y es algo que debemos controlar para evitar esos problemas, porque tampoco es algo que requiera demasiado tiempo, y los beneficios pueden ser importantes.
¿Tu barra es de las que está limpia, o siempre la tienes llena de notificaciones, hasta el punto de tener que hacer saltar el icono de «no caben más»?