Aprovechando que es fin de semana os voy a contar una de esas historias surrealistas a más no poder que he leído. Hoy vamos a hablar de un Samsung Galaxy S3 que explota, una denuncia, una investigación y un final…sorprendente. Pero como en todas las historias: empecemos por el principio.

El SGS3 que explota

Hace un par de semanas, un usuario de un foro denunció públicamente que su flamante Galaxy S3 acababa de explotar. Más exactamente, según dillo2k10,  él estaba conduciendo cuando su SGS3 empezó a desprender “una llama blanca, chispas e hizo un bang muy fuerte”. El teléfono se había quemado desde el interior hacia el exterior, quemando el plástico y deshaciendo la carcasa del móvil. Aunque sorprendentemente, el teléfono continuaba funcionando aunque no tenía señal. Al intentar cambiarlo, la tienda no quiso remplazarlo hasta saber exactamente qué había pasado. Samsung UK se preocupó por el asunto:

“Recientemente circulan unas fotos de un SGS3 que parece que está dañado debido al calor. Samsung está al tanto del problema e investigará tan pronto como recibamos el producto en cuestión. Una vez haya finalizado la investigación podremos ofrecer detalles sobre ella. Estamos comprometidos en dar a nuestros clientes la mayor satisfacción posible y estamos atendiendo este problema de manera muy seria.”

Lógicamente, hubo bastante revuelo y mucha gente pasó a tener miedo de que les explotase el teléfono en el bolsillo o mientras estuviesen hablando. Pero afortunadamente, la cosa no llegó a más.

La investigación

Tal y como dijo Samsung, entregó el dispositivo quemado a la brigada de Investigaciones de Incendios de UK (FIUK) para que se llevase a cabo una investigación sobre las causas de la explosión. Pues bien, resulta que según los resultados de la investigación, la fuente de energía que ocasionó el daño no provenía del teléfono. Exactamente, FIUK dice “La fuente de energía responsable de generar el calor ha sido determinada como externa al dispositivo […] el dispositivo no es responsable de la causa del fuego”. Y lo que es mejor, según ellos la causa más probable del daño es… un microondas!

“La única manera de producir este tipo de daño es poner el dispositivo o sus componentes en un microondas doméstico.”

Aquí tenéis todo el informe del FIUK

Lógicamente, todas las miradas se volvieron hacia el foro y el usuario dillo2k10. Básicamente, este admitió que se había inventado toda la historia. Al parecer, el teléfono sufrió primero algunos daños relacionados con el agua (seguramente se le cayó en el baño o vete a saber) y una “tercera persona” tuvo la genial idea de secarlo al microondas. El post exacto es el siguiente:

“Quisiera retractarme de mi mensaje original. El daño del teléfono fue causado por otra persona, que aunque estaba intentando recuperar el teléfono del agua, causó el daño mostrado en el teléfono. Ocurrió debido a una gran fuente externa de energía y no fue culpa del teléfono. Esto no ha sido más que un acto deliberado y un error estúpido. No puedo dar más detalles.”

Conclusiones

Como en todas las historias, podemos sacar unas cuantas conclusiones:

• Si se os moja un teléfono, no lo intentéis secar con un microondas. (Parece mentira que haya que escribir esto)
• Y si lo hacéis y os explota, no os inventéis una historia. Y menos si está involucrado Samsung y la Brigada de Investigaciones de Incendios de UK.
• Se pilla antes a un mentiroso que a un cojo.

Vía Droidmatters