Cuando miramos la pantalla de un smartphone y vemos sus coloridas y brillantes imágenes no tenemos ante nosotros un display mágico capaz de hacer cosas tan maravillosas, sino que hay mucho detrás, tecnología que evoluciona constantemente y en la que todos los fabricantes han peleado por conseguir la mejor calidad.
Actualmente las pantallas de los smartphones se basan en la tecnología LED, aprovechándola de diferentes formas. Cada juego de tres LEDs rojo, verde y azul se combina para obtener una gama completa de colores, pero la forma de jugar con ellos, su disposición, colocación y orden es lo que da lugar a diferentes tecnologías.
Además de ello tenemos dos importantes factores que combinados ofrecen cosas mejores o peores. Se trata de la resolución, que es el número de píxeles de ancho y alto que entran en una pantalla, y la densidad de píxeles por pulgada, un factor que trata de relacionar el tamaño de la pantalla con su resolución, ofreciendo una única cifra que nos da una idea bastante buena sobre lo nítida que puede llegar a ser una pantalla.
Para que os hagáis una idea de por donde van los tiros aquí tenéis una lista de densidades de pantalla medida en PPI (píxeles por pulgada):
- Sony Xperia Z: 441 PPI
- Sony Xperia S: 342 PPI
- Apple iPhone 5: 326 PPI
- Sony Xperia T: 323 PPI
- HTC One X: 312 PPI
- Samsung Galaxy S III: 306 PPI
Hoy nos hemos pasado por el stand de Sony en el Mobile World Congress, donde han montado un interesante sistema que mediante un microscopio nos ha permitido ver diferentes el funcionamiento de las pantallas de diferentes dispositivos, pudiendo ver tan cerca los LEDs, la tecnología usada y sus diferencias como este vídeo que hemos grabado nos muestra:
Los resultados saltan a la vista, ¿veremos con el Samsung Galaxy S IV una mejora en este aspecto? Volveremos a pasarlo por el microscopio compitiendo contra el Xperia Z una vez se presente el próximo 14 de Marzo.