Wiko Cink Five: Análisis y experiencia de uso
Si hay algo fijo en la tecnología es que «todo es mejorable». Es el mantra que deben repetirse las compañías para poder justificar el sacar un nuevo modelo. Es una frase cierta, aunque a menudo mal interpretada. Mientras compañías como Samsung se empeñan en la carrera de megapíxeles en tema de cámaras, otras como HTC con sus Ultrapíxels en el HTC ONE o Oppo con la cámara giratoria del N1 deciden que mejorar no siempre es cuestión de números.
Más allá de si darán fruto o no, esas decisiones permiten nuevos caminos de mejora, mientras que ceñirse a la batalla de números (más procesador, más píxels, más pantalla) da posibilidad a nuevas compañías de surgir con teléfonos, no tan potentes como la gama alta de uno de los «grandes» pero con una potencia respetable y un precio ajustado para seducir a la amplia mayoría. Si hace unos meses poníamos como ejemplo del español Aquarius 4.5 hoy introducimos Wiko Cink Five.
- Pantalla 5″ IPS, HD(1280×720)
- Android™ 4.1.2 Jelly Bean
- Procesador Quad Core 1.2GHZ con 1GB de RAM
- Cámara trasera de 8MP con flash LED doble y frontal de 2MP
- Capacidad interna de 4GB ampliable por MicroSD
- Dual-SIM
Ya hablamos un poco de Wiko al introducir su Wiko Ozzy, se trata de una compañía China que está expandiendo horizontes hacia Europa y, con estos precios y prestaciones, tiene pinta de que viene para quedarse.
Construcción
Lo primero que pensará todo el mundo cando vea el teléfono de pasada es que parece se trata de una LG Nexus 4. Pero al verlo más de cerca hay muchas diferencias. Para empezar los botones son capacitativos y no sigue el estándar que quiere poner Google (de derecha a izquierda atrás, home y cambio de app) sino el esquema de Samsung de opciones, home y atrás.
La parte de atrás es de plástico, de un tacto y aspecto muy parecido a los BQ: plástico rígido, sin brillos raros y de batería extraíble. Otra cosa que comparte con el BQ 4.5 y que parece ser un problema en la mayoría de teléfonos de gama media es el regrueso de la cámara que hará que el teléfono baile al tenerlo sobre la mesa.
Otros detalles que descolocan a día de hoy pero que son comunes en esta gama de teléfonos son la entrada microUSB en la parte superior, el altavoz detrás (más sobre esto en la sección de sonido) y el ser dual-SIM.
Pantalla
El teléfono viene con una pantalla TFT de tipo IPS con resolución 720p. La verdad es que los colores se ven muy bien, un poco apagados para mi gusto, pero tal vez sea que me he acostumbrado a las AmoLED. En cuanto al brillo y la usabilidad en exteriores (el talón de Aquiles de muchos smartphones) hay que decir que, aunque a veces le cuesta adaptarse, el brillo a tope servirá para usarlo a pleno sol.
Vale la pena resaltar que al fin tenemos teléfonos a buen precio con resolución HD y pantalla grande ya que estos dos puntos era el mayor sacrificio a la hora de comprar un «low cost». Tal vez para la mayoría no sea importante pero yo noto la diferencia y agradezco los 720p. En general la pantalla se ve muy bien y, aún con sus 5 pulgadas, tiene una muy buena definición a, mayor que el Note II (misma resolución con menos pantalla).
Sonido
Si empezábamos con la frase «todo es mejorable» no está de menos aplicarla, y para este teléfono lo haremos en el aparado de sonido. Para empezar el altavoz se encuentra detrás con lo que lo apagaremos si lo tenemos sobre la mesa. Aunque esto es algo a lo que nos acostumbramos con la mayoría de dispositivos de 2012, este año empezamos a tener muchos terminales con altavoces abajo al lado del cargador, por lo que no deja de ser un punto en su contra.
Por otro lado está el sonido con auriculares. No sé si se debe al terminal de muestra, pero en mi caso el sonido con auriculares no era bueno. La misma música y los mismo auriculares en mi Note II o en el Wiko sonaba muy diferente. Para algunos es un factor más, pero para los más musiqueros no lo recomendaría.
Red
El teléfono es dual SIM y, aunque solo he usado una de las ranuras, tengo que afirmar que la cobertura es de lujo, muy superior a terminales que le doblan o triplican el precio, el teléfono ser capaz de encontrar 3G donde otros tenían dificultad para conseguir conexión datos alguna. Incluso la antena de Wifi tenía una cobertura altísima. Un 10 en el terreno de redes.
Cámara
La cámara es el típico ejemplo de cómo la carrera de los números permite a terminales como éste llevar una cámara más que respetable sin un alto coste. Con sus 8 megapíxeles las imágenes son bastante claras cuando la luz es favorable y se defiende en condiciones adversas.También podremos grabar vídeo a 1080p.
Aún así al igual que el sensor de luz es algo lento en adapatar la luminosidad de la pantalla la cámara tarda un poco en enfocar o adaptarse a la luz. No todo son los números y se nota que el tratamiento por software de este terminal es inferior al de otros como el iPhone 5S, los Xperia Z y Z1 o el LG G2, pero para la mayoría de usuarios es más que buena.
Rendimiento
Aunque sea un terminal «low cost» no hay que pasar por alto que lleva un procesador QuadCore de 1,2 GHz y 1 GB de RAM. En general el teléfono no da problemas de lag ni carga, aunque los 4GB de memoria interna se quedarán cortos si os gusta tener muchos juegos pesados. Desde juegos sencillos SuperHexagon hasta cosas como Carmaggedon aguanta lo que le quieras tirar. No puedo asegurar si aguantará los juegos de dentro de 3 años pero ahora mismo no tiene muchos problemas manejándolos. Al pasarlo por los típicos benchmark, obtenemos puntuaciones relativamente bajas, pero os aseguro que el teléfono no tiene dificultades para el uso leve o incluso intenso.
Batería
Cuando preguntas que quieren en su próximo teléfono la mayoría dice: que aguante todo el día y vaya fino. Ya hemos cubierto la segunda parte,así que, si ya habéis aguantado conmigo hasta aquí, querréis saber más de la primera. Pues bien, con un uso moderado, la vida de la batería es muy alta. Si a esto le añades multimédia e insistes en los datos, las horas de uso se irán reduciendo pero aguanta todo el día con una carga, dos para los muuuy jugones.
Conclusión
Es un placer ver como lo abierto, y, no nos engañemos, lo gratuito de Android permite que empresas nuevas saquen terminales con un SO bueno y un hardware muy respetable por menos de 200€. Si os interesa un terminal que dure y vaya sin problemas sin necesidad de gastar mucho daros una vuelta por Wiko. Eso sí, debéis ser conscientes que estos terminales, aún igualar en número, quedan un poco por detrás de grandes marcas, al menos de momento.