Las pruebas de rendimiento no siempre nos permiten saber si un teléfono tendrá buen rendimiento. Existen otros valores que importan como la velocidad de la memoria. Te explicamos por qué.
¿Te ha ocurrido alguna vez que tu teléfono tiene lag, a pesar de tener un hardware de primer nivel? ¿Te sentiste engañado por las pruebas de rendimiento? ¿Tu teléfono funciona peor que cuando lo compraste y crees que es culpa del fabricante? Hoy respondemos a todas esas dudas.
Los benchmark no siempre determinan el rendimiento
Seguramente lo hayas experimentado ya alguna vez. Tu o algún conocido ha adquirido un teléfono que si miramos en Internet, puede parecer lo mejor de lo mejor. Que tiemble Samsung, este teléfono es igual de potente que el S7 y cuesta la mitad. ¿Realmente nos aportará la misma experiencia? ¿O existe algún punto que nos estamos dejando?
Cuando nos llega ese terminal en ocasiones no podemos evitar sentirnos decepcionados. La realidad es que es probable que ese teléfono no vaya tan bien como nos creíamos, por mucho que las pruebas de rendimiento lo pusiesen a la altura de los mejores. Si, cuando ya hemos abierto el juego o las aplicaciones el rendimiento es bastante parejo, pero la respuesta del sistema no lo refleja.
La causa de ello es un valor que los benchmarks populares suelen dejar en un segundo plano, y es la memoria NAND (también conocida como almacenamiento interno). Estas memorias son las responsables de que nuestro teléfono no solo rindiese menos de lo esperado, sino que además tienen la culpa de que con el paso del tiempo pierda rendimiento.
Entendiendo el valor de las operaciones SQLite
Sin adentrarnos demasiado en conceptos de programación, vamos a intentar explicar por qué la velocidad de la NAND es más importante de lo que parece. La culpa de que tu teléfono funcione peor de lo esperado la tiene SQLite, el sistema de gestión de bases de datos que no solo utiliza Android, sino las aplicaciones que utilizamos en nuestro día a día.
Las aplicaciones contienen información que se encuentra almacenada en estas bases de datos, y para acceder a esta información, es importante que el acceso al almacenamiento sea lo más rápido posible. Tal y como podemos leer en este artículo, el 90% de las operaciones de Entrada y Salida son de tipo SQLite.
Que un teléfono sea efectivo con las operaciones SQLite es importante para la fluidez del sistema
Mientras mejor sean las memorias, menos lag tendremos
Que la mayoría de operaciones de E/S sean de tipo SQLite implica que el acceso a la información importe más en el desempeño general del sistema que la potencia bruta de procesado. ¿Por qué no importa lo potente que sea nuestro procesador? Efectivamente, por la memoria.
Debemos tener en cuenta que el procesador es el encargado de trabajar con la información, pero el almacenamiento es el encargado de encontrar la información, y presentársela al procesador para que este pueda trabajar.
Por ejemplo, si nosotros pulsamos que queremos abrir la aplicación de Chrome, si nuestro almacenamiento es lento, por muy potente que sea nuestro procesador, este se quedará «esperando» sin hacer nada, mientras espera al almacenamiento, mientras que quizás un móvil con un procesador menos potente pero con un almacenamiento rápido, responderá mejor.
Es importante un buen equilibrio entre velocidad del procesador, memoria y almacenamiento
Una vez haya cargado la información, el procesador vuelve a cobrar importancia en el desempeño del sistema. El procesador será más importante en aplicaciones pesadas, mientras que en las aplicaciones ligeras, la velocidad de las memorias NAND será crucial.
Cómo saber si nuestra memoria NAND es de calidad o no
¿Cómo podemos saber si nuestra memoria es buena o mala? Para ello, debemos echar una mirada hacia atrás y recurrir a los Benchmark. Existe una prueba de rendimiento llamada Androbench que es capaz de indicarnos cuál es la velocidad de nuestra memoria NAND.
Para ello, tendremos que instalar el benchmark y arrancarlo. Una vez finalizadas las pruebas de rendimiento, tendremos una lista de resultados. ¿Qué resultados importan? Los valores de Random Read y Random Write.
¿Qué valores podemos indicar como buenos? En Random Read creemos que un buen valor mínimo son unos 30MB/s, mientras que en Random Write, unos 10MB/s. Este test indica que los mejores teléfonos en lo que respecta a memoria serían el Huawei Mate 9, OnePlus 3, Xiaomi Mi 5S, Moto Z y Galaxy S7, mientras que en la gama media, teléfonos como el Moto G4 no logran un mal desempeño.
No existen las actualizaciones malignas, solo un degradamiento de las memorias
Otro mito bastante extendido acerca de los teléfonos es que los fabricantes decrementan el rendimiento del teléfono mediante actualizaciones malignas. Ese mito es completamente falso, y una vez más, la respuesta está en las memorias NAND.
El almacenamiento de nuestros teléfonos se degrada con el uso (como la gran mayoría de componentes electrónicos). Con el paso del tiempo, no solo podemos ver como el almacenamiento disminuye, sino que además lo hacen sus velocidades.
Hemos probado como ha afectado el paso del tiempo a teléfonos como el Galaxy S6 Edge, un veterano en la gama alta. Si comprobamos reviews como las de Phonearena en la fecha de lanzamiento, y los resultados que arroja un Galaxy S6 Edge usado desde entonces, en los que vemos como la velocidad de Random Read ha decaído. También podemos corroborar que el rendimiento no es el mismo que el que disfrutábamos en su día, aún volviendo a la versión del software original.
Aunque tener un sistema limpio siempre ayuda
A lo largo del artículo hemos hablado sobre la importancia de las memorias en un teléfono, siendo esta la causa por la que un teléfono no siempre responda tal y como dicen sus benchmarks. También nos ha servido para explicar por qué nuestro teléfono no responde tan bien como lo hacía cuando lo compramos, y como saber si nuestra memoria NAND es buena o mala.
No obstante, esto no nos debe hacer olvidar de lo que importa. Es cierto que dijimos que la velocidad de la NAND suele ser ignorada, pero esto no quiere decir que sea lo único importante de nuestro teléfono. Cada componente importa, y si no tenemos un buen equilibrio entre todos, veremos como la experiencia de uso nunca cumple con nuestras expectativas.
No solo en hardware. Disponer de un software que sea ligero y esté bien pulido también permite que nuestro teléfono vaya a dar lo mejor de sí mismo.
Fuente | Taras
Imagen | S6 Edge Phonearena