Las ondas de los móviles han sido una preocupación recurrente desde la extensión de los smartphones, pero, a pesar de que se haya extendido el mito de que son perjudiciales, no lo son, o al menos no para nosotros.
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A continuación te vamos a contar lo que debes saber acerca de las ondas que emite tu smartphone para que veas que, pese a la idea que habita en el imaginario colectivo sobre su peligrosidad, no suponen un riesgo.
Cómo te afecta la radiación que sale de tu smartphone
El primer concepto del que tenemos que hablar aquí es el SAR, cuyas siglas significan Tasa de Absorción Específica, y que es la cantidad de energía de radiofrecuencia que el cuerpo absorbe al utilizar un dispositivo que las emita, como un smartphone.
Se mide la cantidad de vatios de energía que absorbe el cuerpo por cada kilo de masa corporal, y esto depende de varios componentes de cada dispositivo, como su potencia de transmisión o sus componentes. La radiación de los móviles,
Para el cuerpo humano, el rango de frecuencias que emiten los smartphones no es perjudicial, ya que está muy por debajo de los máximos establecidos a nivel internacional. Además, son ondas no ionizantes, por lo que no pueden afectar a la composición molecular.
Es cierto que el contacto con estas radiofrecuencias puede aumentar la temperatura corporal, aunque es algo que también pasa si te pones el móvil en la oreja por el propio calor que emite el dispositivo.
Las radiofrecuencias de tu smartphone pueden producir un aumento de temperatura en las zonas de tu cuerpo expuestas, pero en muy baja medida, y el sistema termorregulador del cuerpo es capaz de disipar este aumento de temperatura fácilmente.
Por el momento, la ciencia no ha sido capaz de demostrar una correlación entre las ondas de radiofrecuencia y la aparición de enfermedades, por lo que no se puede decir que estas sean perjudiciales.
Cabe decir que, pese a que las ondas no sean perjudiciales, algunas prácticas como dormir con el móvil bajo la almohada, no son recomendables, y no deberías hacerlo.
Esto ya no por la radiación, sino porque el móvil puede sobrecalentarse y provocar quemaduras, e incluso explosiones, lo cual seguramente no quieres que te pille cerca de la cabeza.
Cuantas ondas emiten los móviles
La información sobre el SAR de cada smartphone es pública, y puedes acceder a ella para ver tanto el SAR en la cabeza como en el cuerpo. Esta cifra suele cambiar en función de cada dispositivo, ya que depende de los componentes y las antenas con los que cuenta cada dispositivo.
Algunos móviles emiten tienen un nivel de SAR en la cabeza de 0,33 W/Kg y otros de 1,20 W/Kg, y aún con esta diferencia, ninguno de los dos es perjudicial para tu salud.
Para que te hagas a la idea, el Comité Europeo de Normalización Electrotécnica pone un límite de 2 W por cada 10 gramos de tejido corporal, estando a 0,5 cm de distancia del cuerpo.
Este es el límite para 10 gramos de tejido corporal, y aun así ningún móvil se acerca a él. Pero, extrapolándolo al peso total de tu tejido absorbente, puedes ver que se trata de una cantidad irrisoria.
Cómo saber el SAR y la radiación que emite tu móvil
Pese a que siempre puedes buscarlo en Internet, también puedes acceder directamente desde tu móvil a su información de radiación, y hay diferentes métodos para hacerlo, aunque no todos están disponibles en todos los smartphones.
La primera manera de comprobarlo es tecleando *#07# en la aplicación de teléfono, tras lo cual te aparecerá un menú desplegable con las frecuencias que emite tu smartphone junto con los límites que se establecen en diferentes regiones como la Unión Europea, Canadá o Estados Unidos.
Por otra parte, en la sección de Información Legal que hay en tu móvil, dentro de Información del teléfono, debería aparecer también un apartado que te informe sobre la exposición a radiofrecuencias.
Otra alternativa es buscar tu móvil u otro dispositivo en la web de la Oficina Federal Alemana para la Protección Radiológica, donde además de smartphones podrás consultar las emisiones de otros productos, como televisores.