Si se tiene la mala suerte de romper un móvil que aún está en buen estado, solo quedan dos opciones: llevarlo a reparar o, si el precio de esto es muy elevado, comprar uno nuevo. En España, mucha gente apuesta por lo primero si el móvil se ha comprado de forma reciente o si aún tiene vida útil por delante.
Al fin y al cabo comprar un nuevo dispositivo puede suponer un gasto importante que no siempre es necesario. Sin embargo, si se va a llevar esto a cabo, hay que tener en cuenta que es conveniente realizar otras acciones en el dispositivo que se va a llevar a arreglar.
Esto, no solo puede ayudar al personal del mico a desempeñar mejor su trabajo, sino que además también es algo que mejora considerablemente la seguridad y la privacidad del usuario propietario del dispositivo.
Importante antes de enviarlo
En el proceso desde que el servicio técnico recibe y analiza el móvil hasta que su propietario lo vuelve a recuperar, este pasa por bastantes manos. Esto no tiene por qué ser malo, pero es cierto que, al estar lejos del dispositivo y sin poder supervisarlo, nunca está de más tomar precauciones.
Por ello, eliminar de un dispositivo todo tipo de información sensible que hayamos guardado en él previamente. Fotografías, vídeos o documentos importantes deben desaparecer del dispositivo. Lo mismo sucede si se ha iniciado sesión en aplicaciones como banco o en redes sociales. De hecho, en este sentido la mejor opción puede ser restaurar el dispositivo a su estado de fábrica, de forma que los técnicos también puedan emplearlo para llevar a cabo pruebas técnicas posteriores a la reparación.
A no ser que la propia casa de reparaciones así lo indique, tampoco se debe incluir ningún tipo de accesorio con el dispositivo. Lo mismo sucede con las tarjetas micro SD y tarjeta SIM, que deben ser extraídas antes de enviar el móvil. De hecho, no se suele asegurar la vuelta de ninguno de estos elementos si se envían junto al dispositivo.
Modo reparación
Algunos móviles Android, como los Google Pixel, cuentan con una opción llamada Modo de reparación dentro de los Ajustes. Este sirve precisamente para activar un entorno seguro en el que nadie pueda acceder a la información personal del teléfono, si puedo acceder a ciertas funciones de su hardware para comprobar que todo funciona correctamente.
Está dentro del apartado de Sistema, y para utilizarlo, según se muestra en la configuración, es necesario contar con al menos 2 GB de almacenamiento disponible. Todos los cambios que se hagan mientras que se están este modo no se guardarán cuando se vuelva al estado normal del dispositivo, incluyendo los archivos descargados, que se eliminarán automáticamente.
Justo después de activarlo introduciendo el método para desbloquear la pantalla que se use normalmente, el dispositivo se reiniciará entrando en este modo, algo que puede tardar unos minutos, pero te puedo suponer una gran protección frente a otras personas.
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