Los móviles son dispositivos que admiten una gran variedad de accesorios, y con usos totalmente distintos. En España es posible comprar desde un aparato capaz de convertir el móvil en un metro láser hasta un soporte para mejorar el resultado de las fotografías que se toman con el dispositivo, lo cual habla muy bien de la variedad de útiles disponibles para los smartphones.

Un problema más común de lo que parece con estos dispositivos son las caídas que sufren. Algunos cuentan con certificados de resistencia o con fundas capaces de protegerlos de los golpes, pero aun así no es imposible que se acabe de rompiendo la pantalla o algún otro elemento. Esto es especialmente molesto cuando el móvil se resbala de las manos al hacer una foto o querer enviar un mensaje.

Por suerte, quitar que el móvil se caiga al suelo en este tipo de situaciones es más fácil de lo que parece, ya que solamente hace falta un accesorio tan simple como una correa. Y es que, gracias a este elemento, es posible llevar el móvil bien sujeto en aquellas situaciones en las que requiere un extra de agarre.

Un accesorio fiable

Prácticamente, todas las fundas de móvil cuentan con dos pequeños orificios en uno de sus laterales o esquinas, gracias a los cuales se puede introducir una correa de mano para llevar bien sujeto el dispositivo. También es habitual encontrar este tipo de agujeros en otros dispositivos como cámaras de fotos e incluso auriculares.

Existen una serie de correas que van un paso más allá de ser una simple cuerda que se ata al móvil, ya que en algunos casos cuentan con la posibilidad de ajustar la holgura que se le da a la mano e incluso hay otras destinadas agarrarse del dedo en lugar de la muñeca, ofreciendo una sujeción menos intrusiva.

Este puede ser uno de los mejores accesorios para ir de vacaciones o incluso para funcionar en el día a día. En situaciones con bastante movimiento puede ser difícil agarrar el móvil con firmeza durante todo el tiempo, y este tipo de correas proporcionan una sujeción extra que puede evitar que el dispositivo se caiga de nuestras manos.

Lo bueno es que se trata de un accesorio que no solamente es personalizable, ya que hay una gran cantidad de opciones y estéticas disponibles, sino que también es barato. En Amazon existen modelos como el de dedo o el de muñeca de marca Ringke o el de LensAid que no sobrepasan los 11 euros.