España es uno de los países del mundo con una mejor dieta. Sin embargo, esto está cambiando poco a poco, por la globalización y la importación de costumbres y, sobre todo, por un ritmo de vida que no permite dedicar el tiempo necesario a veces a la cocina. Esta falta de tiempo también se proyecta en la falta de ejercicio, bien por cansancio o por no tener un momento para realizarlo en el día a día.
Todo esto lleva a que los casos de obesidad se hayan disparado en los últimos años. Más del 55% de los adultos del país tienen obesidad o sobrepeso, lo que implica tener una peor salud. Esta condición física hace que se pueda desarrollar el síndrome de hipoventilación por obesidad, también conocido como síndrome de Pickwick. Esto hace que la sangre no tenga suficiente oxígeno, y derive en otras patologías.
Respirar bien no es algo que solamos asociar a un entrenamiento, es algo innato, literalmente, y que hacemos de manera inconsciente la mayor parte del tiempo. Sin embargo, hay maneras de entrenar los músculos asociados para mejorar la forma en la que lo hacemos, lo cual redunda en una mayor cantidad de oxígeno, y eso afecta positivamente a todos los órganos del cuerpo.
Entrenando la respiración
La forma en la que respiramos es la misma para todos cuando nacemos. Sin embargo, poco a poco, a medida que pasa el tiempo, esta forma cambia. Según un informe de la Universidad de Harvard, llega un momento en el que la respiración se vuelve más superficial, limita el rango de movimiento del diafragma, eleva la frecuencia cardíaca y puede llegar a aumentar la presión arterial y, perjudicando la función cognitiva. Todo esto afecta a diversas funciones del organismo, empeorando la calidad de vida.
El estrés de la vida actual, la falta de tiempo y la presión hace que nuestros patrones de respiración cambien, lo que perjudica directamente a nuestra salud. Para solventar eso hay que modificar esos patrones de forma consciente, lo que implica entrenar la manera en la que se respira.
La idea es pasar a tener una respiración consciente, de manera que maximizamos los beneficios de la misma. La respiración diafragmática controlada puede bajar la presión arterial, aumentar la memoria, mejor el rendimiento atlético y la recuperación, o hacernos dormir mejor.
Qué es Airofit
Para entrenar la respiración se pueden tomar ciertas directrices, como respirar siempre por la nariz si solemos hacerlo por la boca, realizar sesiones de unos pocos minutos para practicar la respiración profunda... Estas acciones mejorarán el bienestar físico y emocional, pero es posible ir más allá.
Airofit es una empresa que ha desarrollado un dispositivo de ayuda a la respiración, que es capaz de entrenar la manera en la que realizamos este proceso, algo clave para cualquier persona, pero especialmente para los que practican deportes. Es un dispositivo que se pone en la boca y se conecta de forma inalámbrica a nuestro smartphone, permitiendo controlar y monitorizar los diferentes ejercicios de respiración que se ejecuten.
Mediante estos ejercicios es posible fortalecer los músculos que se mueven en la respiración, pudiendo mejorarla. El diafragma es el mejor ejemplo, un órgano que puede desarrollarse más y ofrecer un rendimiento mayor al que se le suele sacar. Mediante la aplicación es posible crear patrones de entrenamiento, escoger un deporte y mejorar la respiración para esa actividad en concreto o mantener un registro de nuestras mediciones. También hay modelos que controlan la expansión de los pulmones, lo que mejora la capacidad aeróbica, con la consecuente mejora de la salud y la resistencia física. Estas mejoras son más notables en las personas con peor calidad respiratoria, según los informes publicados por la propia Airofit.
La batería le permite ser usado durante 8 horas seguidas, lo que da para una semana de entrenamiento aproximadamente. Se carga mediante un cable magnético, similar al usado en los relojes inteligentes. La conexión con el móvil se realiza con bluetooth LE, lo que hace que el gasto de energía sea mínimo.
Modelos y precios
Hay tres modelos diferentes de Airofit, cada uno con ciertas funciones y precio. El más económico y sencillo es el AiroFit Active, que cuesta 129 euros y está diseñado para los principiantes. El Airofit Essential cuesta 249 euros y permite tener sesiones de entrenamiento adaptables, además de poder medir el desarrollo pulmonar. Por último, está el Airofit Pro 2.0, que cuesta 349 euros, aunque actualmente está rebajado a 244 euros. Es similar al anterior, pero mejora las estadísticas y los modos de entrenamiento. El uso de la aplicación es gratuito para el control de los dispositivos o los entrenamientos básicos, pero hay un plan premium que desbloquea funciones, como la selección de deporte o las estadísticas avanzadas.
Además, la empresa tiene diversos accesorios, como monturas para la boca de diferentes tallas, un curso para sacarle el máximo partido al dispositivo o el cable de carga, por si se pierde o necesitamos otro. Todos se pueden comprar en su web, al igual que los propios dispositivos.