Dentro del mundo de la telefonía móvil se suele decir, porque es cierto, que los smartphones son algunos de los productos más avanzados tecnológicamente, sobre todo por la miniaturización de sus componentes. El incluir toda esa tecnología en tan poco espacio no es sencillo, pero ha logrado que los teléfonos inteligentes sean los aparatos inteligentes más usados en España y el resto del mundo. Y poco a poco han ido sustituyendo a decenas de otros dispositivos, electrónicos o analógicos, que usábamos en nuestro día a día.

Pero hay otro campo que iguala, si no supera, al de la electrónica de consumo. Nos referimos a la tecnología médica, que es la responsable de tener máquinas que, literalmente, salvan la vida de millones de personas cada año. Ahí no siempre la miniaturización es relevante, pero en algunos casos sí que lo es, sobre todo por la facilidad de uso y de disponibilidad que eso implica.

La empresa tecnológica de salud Withings, conocida sobre todo por sus básculas inteligentes y smartwatches, ha presentado un nuevo aparato mucho más íntimamente ligado a la detección de problemas médicos. Se trata del Beam 0, un dispositivo que puede realizar chequeos médicos sin tener que ir al hospital o a una consulta.

Este aparato se ha diseñado para que cualquier persona pueda usarlo en su casa, obteniendo diversos valores, o para ser usado en una teleconsulta, por videollamada o por teléfono, mientras hablar con el médico correspondiente. El Beam 0 dispone de múltiples sensores capaces de realizar pruebas médicas y se conecta al smartphone para mostrar los resultados y el historial de los mismos. No obstante, cuenta con una pantalla donde se pueden ver diversos iconos y un botón de control.

Por un lado tenemos el oxímetro, capaz de medir la saturación de oxígeno en sangre, algo que puede mostrar problemas de todo tipo si los valores no son los adecuados. Es una función que está en muchos relojes inteligentes, pero en este caso es mucho más preciso.

También dispone de un estetoscopio digital, capaz de detectar patrones problemáticos en el sistema respiratorio de los pacientes. Otro sensor hace que este aparato pueda ser usado como un electrocardiograma de una derivación, pudiendo detectar fallos cardiacos que puedan dar problemas en el futuro.

Por último, incluye un sensor de temperatura sin contacto, similar al que tenemos en muchas casas con los termómetros digitales pero más preciso que los que empiezan a incluir algunos móviles. Usa escaneo infrarrojo no invasivo de la arteria temporal. Hay accesorios que permiten que los móviles se conviertan en termómetros digitales, pero no son en ocasiones tampoco tan precisos. Beam O usa sensores de ondas de luz e información sonora para detectar patrones de flujo sanguíneo y temperatura. Los resultados se mostrarán en la pantalla del aparato, y en la aplicación.

Toda esta información se vincula con un móvil a través de una aplicación que es capaz de mantener el registro de los datos. Por ejemplo, si un niño tiene fiebre, se va viendo la ecolución de la temperatura con el paso del tiempo, para comprobar si está bajando o subiendo y a qué velocidad. Y es posible crear informes en PDF para poder consultarlos, guardarlos e incluso compartirlos.

Withings ha estado trabajando también para que los médicos puedan acceder a los datos de los pacientes de forma remota para tener toda la información necesaria antes de realizar ningún diagnóstico. Por ejemplo, con Cardio Check-up, se puede enviar el electrocardiograma y todos los datos de salud de Withings a un cardiólogo para una revisión médica y recibir los resultados en 24 horas. Este es uno de los servicios incluidos en la suscripción de pago. Con una suscripción anual se incluyen cuatro chequeos cardíacos, y con una suscripción mensual, se puede realizar una consulta de este tipo cada 90 días.

Otro ejemplo es HealthLink, con la que se puede generar un enlace a una plataforma dedicada a tus datos de salud, para compartirlos con tu médico. Esto permite al médico consultar el historial de salud completo y a las mediciones en tiempo real antes o durante la consulta. Además, un paciente puede grabar sus resultados y descargarlos mediante el puerto USB-C que también sirve para cargar el aparato, o puede enviar el audio a su médico.

Por supuesto, todos estos datos están securizados para que no sea posible obtenerlos sin el consentimiento del paciente. Además, la aplicación de Withings tiene compatibilidad con Google Fit y con Apple Health, por si queremos ver los valores obtenidos con Beam 0 dentro de las apps de nuestro móvil, donde quizás también tengamos otros parámetros provenientes de relojes inteligentes y otros dispositivos.

Este aparato fue anunciado en el CES de Las Vegas de 2024, y se espera que su comercialización empiece a lo largo de lo que queda de año, aunque están a la espera de las aprobaciones regulatorias de entidades estadounidenses, por lo que es posible que haya retrasos. Eso sí, por ahora no hay ni confirmación del precio ni de la disponibilidad. Es posible que llegue a Europa en una primera oleada, pero no está confirmado. La suscripción de pago Withings+ cuesta unos 10 euros al mes, aunque si se paga anualmente se puede conseguir con un 20% de descuento, lo que supone un ahorro de dos meses al año, por unos 100 euros anuales.