Cuando los teléfonos empezaron a popularizarse en España era normal que su autonomía se midiera en días, incluso más de una semana, en vez de en días cuando no en horas. Era lógico, se usaban mucho menos y sus funciones estaban muy limitadas. Pero eso no quita que fuera muy cómodo poder irse de viaje varios días sin necesidad de llevarse el cargador del teléfono.

Actualmente los smartphones son infinitamente más potentes, permiten tener conexión a Internet en cualquier lugar, y en ocasiones incluso reemplazan a los propios ordenadores. El problema es que su autonomía ha bajado drásticamente, y ya nos contentamos con poder llegar al final del día en una jornada de uso intenso.

Por eso las baterías portátiles se han convertido en un accesorio tan popular como las propias fundas de los smartphones. Muchas veces es más cómodo llevar uno de esos aparatos que cargar con un cable y un cargador y buscar un enchufe. Las propias baterías también han evolucionado, con modelos con gran amperaje, carga rápidas y, en muchas ocasiones, incluso carga inalámbrica.

Una batería particular

Pero todo eso queda ensombrecido cuando admiramos productos como FOLI, una suerte de batería externa para el móvil con tantas funciones que prácticamente se convierte en una accesorio multifunción. Se trata de un proyecto lanzado en la plataforma de micromecenazgo Indigogo que busca llevar al siguiente nivel a las baterías externas. De hecho, viendo de lo que es capaz casi que pretente que dejemos en casa otros aparatos que solemos llevar con nosotros en ciertos viajes, como el altavoz bluetooth o la grabadora.

Para empezar, se trata de una batería de gran capacidad, con 15.000 mAh, lo que permitiría cargar tres veces prácticamente cualquier smartphone moderno con una sola carga. También permite cargar ordenadores portátiles, siempre que estos dispongan de un puerto de carga USB-C. Además, tiene un buen diseño, un tanto retro, pero que busca tener su propia personalidad, y lo consigue. Recuerda a los productos de los años 50, tanto por las formas como por los colores elegidos.

Aunque lo más llamativo es que dispone de una pantalla de 2,2 pulgadas táctil que permite ejecutar diversas aplicaciones y funciones, como si tuviera integrado un pequeño smartphone dentro de la misma. De hecho, al conectarse al móvil por bluetooth permite responder las llamadas desde la propia batería, sirviendo como sistema de manos libres, algo cómodo cuando estamos cargando el móvil y lo tenemos conectado a la batería por un cable. La propia batería dispone de un atril integrado que permite poner la pantalla inclinada, perfecto cuando estamos trabajando con un ordenador, para tenerla a la vista, por si llama alguien o estamos controlando la usando para algo.

Esta pantalla también sirve como disparador remoto de la cámara, por lo que podremos hacer fotos de grupo en las que salgan todos los integrantes, sin las prisas de usar el temporizador. También permite realizar grabaciones de audio como si fuera una grabadora normal e incluso reproducir música gracias a su memoria interna. Pero lo más curioso es que tiene una aplicación de mapas con la que poder realizar rutas y que se actualiza conectándola al propio smartphone. Todas estas funciones la convierten en un accesorio que conviene llevar encima no sólo en viajes con amigos o familiares, sino también a la hora de ir a clase o incluso de estar trabajando.

Es posible incluso usar la batería para localizar el móvil siempre que esté en el rango de acción del bluetooth. Si es así, al pulsar uno de los botones de la pantalla de la batería empezará a sonar un pitido en el propio smartphone, permitiendo saber dónde está. Aunque el perfil del producto en Indigogo no lo indica, parece que corre Android, porque en la pantalla se ven aplicaciones como WeChat, un lector de libros electrónicos, la aplicación del tiempo, una app de contactos para poder llamar directamente desde la pantalla de la batería, una calculadora...

Buena carga

Por supuesto, el ser una batería externa implica unos requisitos más allá de tener una buena capacidad. Dispone de cables USB-C y Lightning integrados en la correa de agarre y es capaz de cargar hasta tres dispositivos a la vez con una potencia combinada de 100 W. El sistema incluye 4 GB de RAM para manejar tanto el protocolo de carga como las funciones auxiliares del aparato.

Es compatible con los protocolos PD, QC, SCP, FCP, AFC, SCP y soporta salidas de 20 W, 22 W y 100 W. También dispone de dos puertos, uno USB-C y uno USB-A, ambos de 66 W. Esto permite cargar hasta tres dispositivos, compartiendo tanto la potencia de salida de 100 W como la capacidad completa de la batería.

Precio y disponibilidad

Este proyecto se puede encargar en la plataforma Indigogo a un precio de partida de 79 dólares como promoción de lanzamiento, aunque el precio oficial es de 169 dólares. Se espera que los primeros envíos se realicen en noviembre de este mismo año 2024.

Se podrá comprar en tres colores, gris, negro y blanco, y tiene en ambos casos un peso de 270 gramos. Esto puede parecer algo elevado, pero no hay que perder de vista que se trata de una batería de 15.000 mAh, y eso siempre implica un peso mayor que el de los smartphones normales, que tienen, como mucho, un tercio de esa batería.

Obviamente este producto no está pensado para cualquier usuario, pero sí para un nicho concreto que puede requerir este tipo de funciones extra cerca de su móvil. El precio en su momento de lanzamiento es bastante asumible, y hay varios packs con accesorios y otros con varias unidades, con precios que suben hasta los 499 dólares.