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Este móvil no es un smartphone corriente. Si la aldea abanderada por Astérix agrupa a unos cuantos galos irreductibles, el Sony Xperia X Compact pertenece a una raza donde ocurre todo lo contrario: no se deja agrandar. Aunque sí resiste al invasor de 5,5 pulgadas. Su ejército está teniendo bajas, pero él se mantiene erguido y con la cabeza bien alta.

El Sony Xperia X Compact es un «bicho raro» dentro del universo móvil. Compacto, sí, pero no tan pequeño como cabría pensarse; potente, pero un escaloncito por debajo de su hermano, el Xperia XZ. Con una cámara que, a pesar de encontrarse en en un cuerpo pequeño, termina ofreciendo una gran experiencia lúdica. La apuesta cabe bien en la mano, detalle que le hace único.

Le tenía muchas ganas a este Sony Xperia X Compact. Tras haber estado con él durante unos minutos en la IFA de Berlín, y después de haberlo comparado contra el XZ, mis primeras impresiones fueron positivas. No me ha decepcionado a nivel general, pero sí tiene ciertos inconvenientes que habrían podido mejorarse.

Características del Sony Xperia X Compact

Lo primero es lo primero: toca detallar cuáles son las especificaciones de este «pequeño» móvil. En líneas generales posee buena relación calidad/precio, algo que termina por elevar la nota del smartphone.

• Pantalla de 4,6″ HD 720p.
• Procesador Snapdragon 650, GPU Adreno 510.
• 3 GB de RAM.
• 32 GB de almacenamiento interno con espacio para SD.
• Cámara 23 MP triple sensor, vídeo 1080p, frontal de 5 MP, Sensor de imagen: 1/5.0 ExmorR, lente gran angular de 25mm, F2.4, ISO de hasta 3200, enfoque fijo
• No es resistente al agua.
• Dimensiones: 129 x 65 x 9,5mm.
• peso: 135 gramos.
• LTE Cat 6.
• Batería de 2700 mAh con QC 3.0.
• Lector de huellas.
• USB Tipo C.
• Android 6.0 Marshmallow.

Diseño: continuista, grueso y sin protección contra el agua

A simple vista no se diferencia en exceso de otros móviles de Sony. El diseño de líneas rectas continúa en su máxima expresión. Esquinas marcadas, cantos izquierdo y derecho redondeados para favorecer el agarre y un tamaño reducido que redunda en dicho agarre. A pesar de que no es tan pequeño como la diagonal de pantalla representa, el Sony Xperia X Compact es muy manejable.

El móvil es pequeño y manejable, pero peca ligeramente de grueso

Sus casi 10 milímetros de grosor convierten al Compact en uno de los smartphones modernos más gruesos. Esto no molesta en el uso habitual; aunque, por pedir, a mí me gustaría con algo más de batería: creo que espacio tiene.

Los marcos continúan siendo la asignatura pendiente de Sony. Sobre todo los bordes superior e inferior del frontal: demasiado grandes. Abajo, por ejemplo, cabrían botones capacitivos para así dejar más espacio disponible en la pantalla.

Un detalle curioso es que el Sony Xperia X Compact se mantiene de pie sin problema. Incluso aguanta la vibración de una llamada bailando al ritmo de la misma. El puerto USB tipo C se encuentra en la base, completamente recta; en el costado de la derecha nos topamos con el botón de encendido en el centro, los de volumen debajo y, casi en el borde, el botón de disparo para la cámara; la bandeja extraíble se sitúa en la izquierda; y el jack de audio en el borde superior. No es resistente al polvo y agua.

Los botones de volumen son pequeños y algo incómodos de pulsar con una mano

Los botones de volumen quedan lejos de una pulsación natural y cómoda. Además, son pequeños: la mayor parte de las veces subes el volumen cuando querías bajarlo. Eso sí: el de cámara vale su peso en oro. Éste es de plástico; igual que el resto a excepción del botón de encendido con el lector de huellas.

El Sony Xperia X Compact por detrás es liso. Salida de la lente en la parte superior, a nivel del cuerpo (el aro sobresale unas décimas de milímetro para proteger el cristal de la lente). El material es plástico, con una pega: la parte trasera atrae los arañazos superficiales.

Potencia: al nivel de un Sony Xperia X

La línea «Compact» se caracteriza por presentar un móvil compacto sin que por ello prescinda de prestaciones. El Sony Xperia X Compact cumple con la premisa, aunque su hardware no se equipara explícitamente al Sony Xperia XZ, sino al anterior Sony Xperia X. No es mala noticia.

El móvil de reducidas dimensiones que analizamos hoy se comporta a las mil maravillas en todos los aspectos. Intenté ponerlo en aprietos, sin lograrlo: fluido, rápido y eficaz en todo momento. También ejecuta juegos con alta demanda gráfica sin inmutarse.

El procesador Qualcomm Snapdragon 650 incluido está avalado por sus elevadas prestaciones y su gran relación calidad/precio. Consigue que el coste del Compact no suba manteniendo altas prestaciones. La pantalla ayuda en este sentido: la resolución HD aligera la carga del procesador y de la GPU.

3 GB de memoria RAM DDR3 y 32 GB de almacenamiento eMMC. En su conjunto el equilibrio es positivo; también está bastante acorde con el precio final del dispositivo, sobre todo teniendo en cuenta que no hay muchos móviles de clase. No llega a lo máximo en potencia bruta, como demuestran los benchmarks, pero tampoco le hace falta: en el uso diario se comporta de forma excelente.

Buena pantalla con resolución HD

Sony se caracteriza por implementar buenas pantallas en sus móviles top. A nivel de detalle, color y brillo, la pantalla del Sony Xperia X Compact es excelente. Demasiado saturada por defecto, aunque se puede desconectar el X Reality además de personalizar la temperatura.

Transmite muy buena sensación de color, el toque también es muy bueno, el brillo en exteriores es suficiente (530 lúmenes) y la resolución… En según qué situaciones se muestra justa, la densidad de 319 ppp ya lo deja intuir.

La resolución de pantalla se queda en 319 ppp, algo justa en según qué situaciones

No se aprecia en circunstancias normales, pero sí que hay momentos donde los objetos pierden nitidez. La falta de resolución se nota sobre todo en exteriores, cuando el móvil ha de subir el brillo. Los contornos pueden desdibujarse, especialmente en iconos y menús.

La batería rinde, pero puede quedarse corta

2.700 mAh se antoja una cantidad pequeña en la teoría. Es cierto que el Sony Xperia X Compact es bastante menudo y que su pantalla mantiene una resolución HD, pero eso no se traduce en un exceso de autonomía: en la práctica, las horas fuera del enchufe son variables.

El consumo en reposo es excelente. Ninguna pega en este punto: si atiendes al X Compact sólo con la llegada de notificaciones te durará el día o día y medio; incluso con todos los servicios activados. Con el uso el gasto se multiplica de manera exponencial. A veces no sabes dónde se han metido los últimos mAh.

El gasto del X Compact es bastante alto cuando se utiliza con la pantalla encendida; se nota mucho en juegos

No es complicado mantener más de un día lejos del enchufe a este móvil. Incluso un día y medio si se racionaliza el gasto; aunque la media suele ser menor. Eso sí: Sony pone a nuestra disposición los distintos modos de ahorro de Stamina, perfectos para casos donde debamos ahorrar al máximo.

El Sony Xperia X Compact incluye carga rápida. También el sistema de carga adaptativo Qnovo: ajusta las últimas fases para mantener al máximo la durabilidad de la batería. Es algo que no puedo comprobar dado que supondría una revisión de varios meses, pero es de suponer que revierta en una ventaja de cara a otras baterías no protegidas con dicho Qnovo.

Todas las conexiones y sonido de alta calidad

Al Sony Xperia X Compact no le falta de nada en términos de conectividad. LTE 4G, WiFi con Miracast, Bluetooth 4.2, NFC, A-GPS con GLONASS, incluye la siempre popular radio FM a la que hay que conectarle los auriculares para que su cable haga de antena (tiene minijack, por supuesto)… Y muy buen sonido, algo que agradecerán los más audiófilos.

Si buscas radio FM en un móvil, el Sony Xperia X Compact cuenta con ella

Es compatible con HiFi de 24 bits y 194 kHz. Admite archivos de audio en FLAC, incluye distintos modos de audio, ecualización y un control automático para ajustar la calidad del sonido a los auriculares que se utilicen en el momento. La experiencia es magnífica utilizando unos auriculares compatibles con sonido en alta fidelidad: buen refuerzo de graves y agudos equilibrados.

Otra de las ventajas del Sony Xperia X Compact es que posee doble altavoz frontal. El volumen de estos altavoces no es tan alto como en otros Xperia, pero cumple a la perfección. Por desgracia, distorsiona por encima del 70 % de volumen. A máxima potencia la reproducción se hace algo molesta.

El último apunte de esta sección va para el botón de encendido con lector de huellas. Situado en el costado derecho, y de fácil acceso, es de los más rápidos en leer y desbloquear el móvil con la huella. No todo son buenas noticias, también posee dos inconvenientes:

• El Sony Xperia X Compact no se desbloquea pasando la yema del dedo sobre el botón. Igual que ocurre con los Samsung, debes pulsar el botón para desbloquear. En el caso de que esté la pantalla encendida con el bloqueo sí se entra al sistema sólo con un roce.
• El botón de encendido queda tan a nivel del costado que hay que hacer esfuerzo para pulsarlo. Por su forma alargada y por la profundidad a la que se activa el botón: termina siendo incómodo.

Capa personalizada y Android Marshmallow

No hay grandes novedades en este punto. Sony mantiene su capa personalizada ligera con respecto a la gama Z. Personalmente, a mí me parece atractiva y no desentona con el diseño del teléfono. Los distintos temas incluidos se adaptan a los colores del X Compact. Y la presencia de la capa no es exagerada; por más que tampoco sea ligera.

Tampoco incluye excesivas aplicaciones «bloatware». Su propia app de música, Xperia Lounge para información y concursos, la que brinda acceso al uso a distancia de la PS4, posee radio FM, un gestor de temas… Y no demasiado más.

La personalización del Sony Xperia X Compact no lastra en ningún momento el dispositivo. El gasto en reposo de las aplicaciones y servicios propios se mantiene en el mínimo. Y Stamina ayuda en la economía de ser necesario extenderla; aunque sin misterios: se encarga de restringir las prestaciones del smartphone para que consuma menos.

Fotografía: claros y sombras

Hablar de la cámara del Sony Xperia X Compact es comenzar detallando unas características casi de infarto. Sensor trasero Sony Exmor R IMX300 de 1/2,3″ con apertura f/2.0, 23 megapíxeles de tamaño máximo, enfoque láser y por detección de fase, flash LED, botón dedicado a cámara y una aplicación muy completa tanto en el modo artístico como en el manual. Promete sobre el papel, la experiencia de captura es muy positiva, pero los resultados defraudan a máxima resolución.

A pesar de que el Sony Xperia X Compact fotografía a 23 megapíxeles (4:3) o 20 megapíxeles (16:9), Sony recomienda los 8 megapíxeles como tamaño habitual. A máxima resolución se aprecia falta de nitidez en los contornos con la presencia del efecto «acuarela» al hacer zoom. Esto no sólo es patente en media y baja iluminación, también se aprecia en exteriores y bajo luz diurna; solventándose en gran medida con el disparo a 8 megapíxeles (con el reescalado también se adelgaza cada foto).

Si bien hay ocasiones en las que saca fotografías espectaculares a simple vista, algunas decepcionan al analizarlas detenidamente en el ordenador. El procesado de las fotos en Jpeg es la asignatura pendiente de Sony. Además de la inclusión del RAW entre las opciones de cámara manual, que sigue sin estar disponible.

La aplicación de cámara posee el modo super automático con el que asegurar el tiro (su comportamiento a la hora de elegir escenas está a la altura). El sensor sigue los objetos en movimiento para mantener el enfoque correcto en todas las situaciones. También detecta las caras.

El modo manual no es de los más completos en Android; y se ve limitado al tamaño máximo de la fotografía a realizar (los 8 megapíxeles que nombraba antes, tamaño optimizado). Escenas en selección manual, HDR, enfoque, velocidad de obturación… Sin control manual de ISO, por cierto.

Aquí tienes una galería de fotos tomada con el Sony Xperia X Compact. Están en su tamaño original y sin retoques. Las saqué en la mayor cantidad de situaciones posible sobre 23 y 20 megapíxeles.

Sony Xperia X Compact

En la grabación del vídeo es donde mejor se comporta. Grabaciones fluidas, con detalle, con capacidad de mantener el enfoque sobre personas o animales en movimiento y con estabilización digital de imagen. Ésta es otra de las carencias a nivel de fotografía: a pesar de que el Sony Xperia X Compact hereda la cámara del Sony Xperia XZ, el «OIS» se queda por el camino.

Opiniones y valoraciones finales

No es el mejor móvil de Sony porque el Xperia XZ está por encima en todos los aspectos (o el Sony Xperia X Performance, por ejemplo), pero sí puedo decir que es de los mejores smartphones para ese tamaño de pantalla. Al menos en Android, que en Apple tienes al iPhone SE o al propio iPhone 7.

No eché nada de menos utilizando el Sony Xperia X Compact durante las dos semanas de review. El funcionamiento es excelente y las dimensiones hacen al móvil muy manejable. El grosor es alto, pero tampoco importa a la hora de utilizarlo. La pantalla también me gusta por más que la resolución sea HD. Y en cuanto al color del cuerpo plástico… El azul claro de la unidad de análisis parece demasiado pastel, pero es agradable a la vista y destaca entre el resto por ser poco común. Me gusta mucho.

La cámara posee un funcionamiento algo irregular para lo esperado. El procesado de las imágenes debe mejorar, igual que la fotografía nocturna. Sin pegas en el vídeo aunque no tenga compatibilidad con 4K.

La relación entre hardware, diseño, materiales y precio no me desagrada por más que sí tenga un coste algo alto en comparación con la gama media a la que apunta. El hecho de ser contenido en dimensiones le reserva cierto estatus: es de agradecer que un smartphone «pequeño» tenga tanta calidad.

Resumo el análisis al Sony Xperia X Compact con una frase:

«Un pequeño gran móvil que es apto para cualquiera menos para los fotógrafos más exigentes: a pesar de que la cámara promete, aún tiene amplio margen de mejora; igual que la pantalla y la batería«.