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Analizamos el BQ Aquaris X, el último teléfono del fabricante español que nos sorprende por su pantalla y rendimiento, pero que además mantiene un buen equilibrio en el resto de sus prestaciones.

BQ Aquaris X: La marca Española sigue creciendo

BQ comenzó sus andanzas en el mundo de la tecnología con libros electrónicos, al poco tiempo se convirtieron en una de las marcas de referencia en el mundo de las tablets y hoy en día destacan por sus dispositivos móviles e impresoras 3D. Se trata de una compañía que año tras año siguen mejorando. El BQ Aquaris X es una muestra de la evolución de la marca, donde vemos pequeños cambios sobre la anterior generación, que sin embargo marcan la diferencia.

Como es habitual, comenzamos este análisis haciendo un repaso a las características técnicas de este móvil. Destaca su procesador Snapdragon 626, sus 3GB de RAM y 32GB de almacenamiento, ampliable por tarjetas microSD.

• Pantalla de 5,2 pulgadas IPS Quantum Color +. Resolución FullHD y 650 nits de brillo.
• Procesador Snapdragon 626, octa core a 2,2GHz.
• GPU Adreno 506.
• 3GB de memoria RAM.
• 32GB de almacenamiento interno (24 utilizables para el usuario).
• Posibilidad de incluir una segunda SIM o una tarjeta microSD de hasta 256GB.
• Cámara trasera de 16MP (Sony IMX 298) f/2.0, doble flash LED.
• Cámara frontal de 8MP con f/2.0 y flash LED.
• Batería de 3 100 mAh con Quickcharge 3.0.
• Lector de huellas, radio FM, NFC, USB tipo C 2.0 OTG, led de notificaciones.
• Protección IP 52 frente a polvo y salpicaduras.
• Medidas: 146.5 x 72.7 x 7.9 mm.
• Peso: 153 gramos.
• Android 7.1.1 Nougat.

Pocas sorpresas con un diseño que ya funcionaba

Es fácil confundir al BQ Aquaris X con la generación anterior, ya que comparte muchos parecidos con el BQ Aquaris X5 Plus. No solo en especificaciones, sino que también en diseño.

Al contrario que su hermano; el BQ Aquaris X Plus; aquí no tenemos una trasera de cristal, sino policarbonato. En un mercado en el que cada vez más móviles apuestan por incluir el mismo diseño metálico, el suave tacto de este buen plástico nos demuestra que este tipo de materiales aún tienen bastante guerra por dar. En la zona inferior de la trasera nos encontramos el nombre del dispositivo serigrafiado, junto a un Designed in Spain.

Hay un detalle que nos gusta mucho, y es que al contrario que muchos teléfonos del mercado, aquí la cámara no sobresale, sino que se encuentra ligeramente por debajo del chasis, dificultando que la lente de la cámara se ralle al posar el móvil sobre la mesa. Se nota que hacer un diseño compacto ha sido una prioridad en este caso.

Donde si que tenemos metal es en el marco del dispositivo. Buen tacto y agarre que transmite una sensación de robustez. En el lateral derecho nos encontramos los botones de encendido y volumen, en el lateral izquierdo la ranura para SIM y tarjetas micro SD, arriba jack para auriculares y abajo USB tipo C y altavoces.

En el frontal nos encontramos un cuerpo con un gran porcentaje de pantalla en el frontal. En la zona inferior nos encontramos con los botones capacitivos (que aunque tengan un diseño minimalista, no se pueden personalizar, aunque si sustituir por la barra de navegación de Android*). En la zona superior nos encontramos casi todo lo típico (auricular, cámara frontal, sensores de luz y de proximidad) destacando la inclusió de un flash frontal y led de notificaciones que podremos personalizar.

Quantum Dots y un fuerte sonido: Las grandes bazas de la experiencia multimedia

BQ lleva ya tiempo apostando por los paneles con tecnología de Quantum Dots +. Se trata de una tecnología que a través de filtros de nanocristales podemos conseguir mejores colores, más brillo y un menor nivel de consumo. Todo esto sobre la práctica pues nos encontramos en un panel con unos colores que destacan más por realismo que por intensidad. Lo que si que nos ha gustado es su nivel de brillo, ya que su panel de 5,2 pulgadas alcanza los 650 nits. Incluso a pleno sol la experiencia es satisfactoria.

Lo mejor de este móvil es su brillante pantalla, que se ve de maravilla a la luz del sol.

Para completar la experiencia multimedia, nos encontramos con un único altavoz ubicado en la zona inferior. Su calidad es la estándar y esperada, aunque en lo que destaca es en su potencia, y es que su sonido máximo suena muy fuerte.

Especificaciones moderadas para un rendimiento que brilla por su software

Quizás uno de los cambios que podrían traer más polémica es la elección del procesador. En esta ocasión, hemos pasado del Snapdragon 652 que incluía la anterior generación por un Snapdragon 626, procesador que presumiblemente es menos potente, pero que tiene su sentido.

Hemos consultado a BQ acerca de la elección del procesador, y nos cuentan que para elegir un procesador tienen en cuenta tres factores fundamentales, la potencia, eficiencia energética (que consuma menos) y eficiencia térmica (que se caliente menos). Para BQ, el procesador que ofrecía la mejor relación entre estos aspectos era el Snapdragon 626, que gracias a su eficiencia térmica aseguran que no tendrá caídas de rendimiento por temperaturas.

El otro motivo por el que han elegido este procesador es a que al ser más nuevo, garantizan un mejor soporte de drivers por parte de Qualcomm. La compañía está orgullosa de haber actualizado toda su gama de 2016 a Android 7.1.1 y pretenden ofrecer dos actualizaciones mayores de Android (siempre que sea técnicamente posible), además de incluir los parches de seguridad (en el caso de este Aquaris X, tenemos Android 7.1.1 Nougat con el parche de seguridad de Mayo).

Para ofrecer un buen soporte, siempre decimos que tener una capa de personalización cercana a Android puro ayuda (además de ofrecer mejor rendimiento por norma general). La experiencia de este móvil es muy cercana a Android puro, salvo pequeños detalles como poder poner el porcentaje de batería en la barra superior.

La experiencia de uso pues no tenemos críticas, todo funciona como debe, no tenemos bloatware más allá de las aplicaciones de Google y no apreciamos lag en ninguna situación. También os contamos que no es tan rápido como los móviles de alta gama, pero ningún móvil de su gama lo es.

Resultados de benchmarks:

• Geekbench single core: 925 puntos.
• Geekbench multi core: 4481 puntos.
• Antutu: 66 369 puntos.
• PCMark: 5 275 puntos.
• 3DMark Slingshot Extreme: 466 puntos.

Pocas pegas podemos sacar al rendimiento, todo funciona de forma fluida y estable.

Experiencia fotográfica: Cuando la grabación de vídeo es la protagonista

Uno de los puntos en los que BQ ha puesto mayor énfasis en sus nuevos modelos es en la experiencia fotográfica. Si bien en el Aquaris X Pro nos encontramos con un sensor de primer nivel, el Aquaris X incluye un sensor de Sony, el IMX 298, sensor que ya conocíamos por móviles como el Huawei Mate 8 o el OnePlus 3, sensor que ya estaba en el Aquaris X5 Plus.

La experiencia pues nos ha gustado bastante en condiciones de luz normales, mientras que en situaciones de poca luz vemos como las fotografías compensan la falta elevando el ISO. ¿Conclusión? Quizás un nivel de ruido que no nos acaba de gustar si dejamos todo en automático.

La cámara frontal también nos ha gustado bastante, destacando la inclusión de un flash frontal para selfies nocturnos. A continuación os dejamos unas fotografías.

BQ Aquaris X

La aplicación de cámara también nos ha gustado. Se trata de una aplicación básica que no nos ofrecerá filtros en tiempo real, pero nos encanta modificar la exposición desde una barra que siempre está accesible. Tenemos fotografías panorámicas, grabación de vídeo en 4K a 30 frames por segundo, e incluso modo de cámara lenta a 120 frames por segundo (a resolución 720p). Nos gustan mucho estos detalles.

Por último, comentar que la grabación de vídeo es una de las cosas que más nos ha gustado del móvil. Incluye un sistema de estabilización electrónica en el que la compañía VidHance ha colaborado con BQ, calibrando el sistema para obtener vídeos lo más estables posibles. Este sistema utiliza el giroscopio y un sistema de detección de frames para conseguir vídeos bastante estables, y lo cierto es que el resultado sorprende teniendo en cuenta en el precio que nos encontramos. Os dejamos un vídeo a continuación andando a mano alzada.

La cámara toma buenas fotos siempre en buenas condiciones de luz.

Batería equilibrada con Quickcharge 3.0

Uno de los aspectos más importantes que solemos dar a los smartphones es la autonomía, ya que no nos gusta tener que ir con la necesidad de ir buscando un enchufe. En años anteriores, bq ha hecho un buen trabajo, sacando el máximo partido a los mAh gracias a sus componentes de gran eficiencia.

El BQ Aquaris X incluye una batería de 3 100 mAh, cifra que para una pantalla de 5,2 pulgadas es correcta. Como ya viene siendo costumbre en mis análisis, hemos exprimido este terminal al máximo durante los días que lo hemos probado, tomando fotos, viendo vídeos y escuchando podcast, además de jugar bastante y usar el GPS de forma esporádica, todo ello en la calle con niveles de brillo elevados.

¿Nuestras cifras? Pues más o menos llegar al final de la jornada con 4 horas de uso interno con un 15% de batería restante, mientras que en días más moderados hemos llegado a la noche con cerca de un 55% de batería. Una batería que no es de sobresaliente, pero si de notable alto.

Un detalle que si que nos ha gustado es que el propio fabricante ha incluido un cargador Quickcharge 3.0. Poco más de una hora y cuarto para cargar la batería al completo, algo que junto a la inclusión del USB tipo C nos encanta.

La batería no es sobresaliente, pero si bastante buena. Además tenemos carga rápida.

Conclusión: Uno de los mejores móviles por debajo de los 300 euros

Va siendo hora de valorar las conclusiones finales de este BQ Aquaris X, así como indicar si merece la pena o no, y a qué tipo de usuario recomendamos utilizar este móvil.

Con un precio oficial de 279,99 euros, BQ ha subido el listón de su gama una vez más. Sin duda alguna es un paso hacia adelante en el buen camino que ya estaban haciendo con su anterior generación; el BQ Aquaris X5 Plus. No creemos que sea un móvil que destaque especialmente por ningún aspecto más allá de su brillante pantalla y el compromiso de la marca española por el soporte y las actualizaciones.

No obstante, el motivo por el que nada destaca es por la ausencia de puntos débiles. Si tuviésemos que sacarle alguna pega, nos habría gustado un sonido de mejor calidad o mejor calidad en fotos nocturnas (donde realmente destaca su hermano mayor, el BQ Aquaris X Pro) pero no es algo que nos vaya a matar.

¿A quien recomendaría este móvil? A cualquier usuario que busque un móvil que por menos de 300 euros todo funcione a la perfección y busque Android puro y actualizaciones de primer nivel. Si tuviésemos que ponerlo delante de un rival, sería el Moto G5 Plus, ya que la experiencia entre uno y otro no varía, siendo al final el punto más importante la ubicación del lector de huellas, detalle por el que me quedaría con el terminal español.

El BQ Aquaris X es un teléfono que recomendamos a quien quiera un móvil en el que todo funcione bien.