En un momento en el que parecía que Samsung empezaba a levantar cabeza en la gama media con su nueva familia Galaxy A, Xiaomi ha tenido a bien traer a España un terminal que no sabemos muy bien cómo encajar.

Se trata del Xiaomi Mi 9 SE, un dispositivo que parte de un precio de 349 euros (con 6 GB de RAM y 64 GB de memoria interna) y que llega a los 399 euros (para el modelo con 6 GB y 128 GB). La cuestión es que se trata de un terminal que se parece, mucho, a su hermano mayor, casi siempre recortando en prestaciones (al fin y al cabo también es más barato).

Pero este Mi 9 SE incorpora un aspecto que es clave a la hora de elegirlo: su tamaño. En relación tamaño/potencia posiblemente este modelo es lo mejor que podáis comprar hoy en día en España.

Características Xiaomi Mi 9 SE

• Procesador – Qualcomm Snapdragon 712 de ocho núcleos.
• Memoria RAM: 6 GB.
• Almacenamiento.
  • Interno: 64/128 GB.
• Gráfica: Adreno 616.
• Pantalla.
  • Tamaño: 5,97 pulgadas.
  • Resolución: 1080 x 2340 píxeles.
  • Tecnología AMOLED.
  • Brillo: 600 nits.
• Cámara trasera.
  • Triple de 48 + 13 + 8.
  • Gran angular y telefoto.
  • Otros: LED Flash.
• Cámara delantera.
  • Resolución: 20 Mpx.
• Puertos:
  • Conector USB Tipo C.
  • Sensor de huellas óptico en pantalla.
• Otros: Bluetooth 5, WiFi, NFC, emisor de infrarrojos.
• Batería: 3070 mAh con carga rápida de 18 W.
• Medidas: 147,5 x 70,5 x 7,45 mm.
• Peso: 155 g.
• Sistema:
  • Versión de Android: Android 9 Pie.
  • Capa del fabricante: MIUI 10.

Pequeño pero matón

Cuando coges por primera vez un terminal de este tipo te extrañas. Es demasiado pequeño para ser un gama alta. Y no, no es que este en esa categoría, pero lo parece.

Xiaomi ha decidido que, con algunas salvedades como el procesador o mejoras técnicas como la carga inalámbrica o el GPS Dual, el Xiaomi Mi 9 SE sea un terminal casi clavado a su hermano mayor. De hecho vemos tanto parecido entre ellos como entre el S10e y el S10 o el P30 y P30 Pro. Sí, de nuevo el procesador no es el mismo, pero aún así la sensación es similar.

El tamaño es lo mas diferenciador y es que Xiaomi se ha quedado por debajo de las seis pulgadas en la pantalla de este modelo y ha mantenido el diseño con marcos muy reducidos y con notch en forma de gota de agua. Esto hace que el frontal sea bastante neutral pero la parte trasera no tanto.

Un acabado en espejo con las tres cámaras en vertical nos recuerdan mucho al Mi 9 y aunque no es un móvil original en cuanto a estética, no podemos decir que sea feo. Lo que sí podemos decir es que estaremos todo el día limpiando las huellas.

El canto es de metal, con un tono de acero inoxidable muy elegante, y los botones no tienen ninguna holgura. Sólo hay dos y es que una de las cosas que perdemos es el botón del asistente virtual que si tiene el Mi 9.

En la parte superior tenemos el emisor de infrarrojos y en la inferior el conector USB C, que permite cargar la batería con cargadores de hasta 18 W, el micrófono y el altavoz. No, no hay jack de audio. En la parte izquierda está la ranura de las tarjetas y en la derecha el botón de encendido y el de volumen ¿El sensor de huelas? Bajo la pantalla.

Una potencia y memoria más que suficientes

Este es el primer terminal que analizo con el nuevo procesador Snapdragon 712, y he de decir que me ha gustado mucho su rendimiento en el uso diario con juegos y aplicaciones exigentes, pero que parece que no se ha optimizado del todo en juegos, no sé si debido a la GPU o a la CPU. No es que hayamos tenido tirones ni mucho menos, pero los tiempos de carga de algunas pantallas son más elevados de lo que esperábamos. No, no es un Snapdragon de la familia 800, pero aún así esperábamos un poco más.

Pese a todo, el rendimiento en el día a día es muy elevado y junto con los 6 GB de RAM nos ofrecen una experiencia superior a la esperada si miramos su precio.

Este modelo se vende en dos capacidades de memoria, 64 GB y 128 GB. Nosotros hemos probado la última y aunque para la mayoría de usuarios la primera será suficiente, no podemos obviar que este smartphone no cuenta con bandeja de microSD. Las dos ranuras de su bandeja están diseñadas para poner dos SIM de teléfono, no una tarjeta de memoria.

La conectividad de este modelo está a la altura de los terminales de gama alta. La parte negativa es que no tiene jack de audio, pero al menos se incluye el adaptador de USB C a jack 3.5 mm en la caja. Tampoco tendremos radio FM.

Al bluetooth 5.0 se le añade Wifi de doble banda, con una buena velocidad. En nuestras pruebas hemos visto que superamos los 300 Mbps tanto en subida como en bajada, con buena recepción de la señal.

El GPS en este caso es sencillo, no es Dual como en el Mi 9, y se nota la velocidad de recepción. Aun así es algo que no destaca ni da problemas si lo comparamos con otros productos.

Otros detalles de gama alta lo aportan el NFC o el sensor de infrarrojos, aspectos que no siempre vemos combinados en los móviles más económicos y que se agradece que se integren aquí. También el sensor de huellas en pantalla, con tecnología óptica, y que si bien no es tan eficaz como el del Mi 9 (o eso nos ha parecido) se comporta bien, no siendo necesario obviarlo para ir al desbloqueo facial, también presente.

Una pantalla OLED, pero no como en gama alta

Uno de los motivos por los que este móvil es tan compacto es porque usa un panel de 5.97 pulgadas y ratio 19.5:9. Esto hace que tenerlo en la mano sea cómodo. Además, su resolución de 2340 x 1080 px da más nitidez sobre el papel que en móviles más grandes, aunque a la hora de la verdad no se aprecia demasiado.

Llevamos un tiempo esperando que las pantallas OLED pasen de la gama alta a la media y es algo que está sucediendo actualmente. Móviles como el Samsung Galaxy A50 ya la incorporan y el Xiaomi Mi 9 SE no se queda atrás.

El problema es que, al igual que en el A50, este Mi 9 SE usa un panel OLED que no es igual que el de modelo superiores. Los virajes de color cuando lo inclinamos son notorios y si bien en un uso normal no molestan, están presentes.

En cuanto a la calidad del panel, no tenemos queja dado que se ve bien en exteriores, tiene un buen brillo, que además no hace falta regular en automático, y ofrece un contraste bueno.

Las opciones de software son numerosas destacando sobre todo el modo oscuro, del que hablaremos en el apartado de la interfaz y la pantalla ambiente. Esta última es personalizable con muchos relojes aunque mientras más colores escojamos y mas grande sea el diseño más se resentirá la batería.

La versatilidad en fotografía llega a la gama media

Xiaomi ha recortado en algunos aspectos de este móvil con respecto a su antecesor pero en las cámaras no ha sido así, o al menos no mucho. Se mantienen los tres sensores traseros con una versatilidad muy elevada.

• Sensor angular principal: 48 Mpx, f/1.8, 1/2″, 0.8µm, PDAF
• Sensor gran angular: 13 Mpx, f/2.4, 1.12µm
• Sensor telefoto: zoom 2x 8 Mpx, f/2.4, 1.12µm, PDAF

En cuanto a la aplicación de cámara no hay mucho que decir ya que no hay cambios con respecto a otros modelos, pero sí que hemos notado que la velocidad de la toma de imágenes no es tan alta como en otros smartphones del mismo fabricante.

Las fotos de día nos han gustado mucho, con un rango dinámico muy correcto y un uso del HDR sencillo y pragmático. La calidad con el sensor normal y con el telefoto parece mayor que con el gran angular, que no falla estrepitosamente pero se queda en segunda línea.

De noche las fotografías son algo peores, como es lógico. Con el sensor convencional tenemos un rango dinámico y un nivel de detalle correctos pero cuando usamos el telefoto o el gran angular vemos que el detalle se reduce y hay zonas de la imagen lavadas y que las luces tienen mucho menos detalle.

Sabiendo eso, con el sensor principal de 48 Mpx, hemos de destacar la calidad de las tomas, impresionante para un móvil que se mueve en este rango de precios.

La cámara delantera, de 20 Mpx, nos da unos selfies resultones, con detalle aceptable pero con un contraste algo elevado lo que hace las fotos muy vistosas pero menos realistas que otros modelos. Aún así, el perfil de usuario que tendrá este móvil estará más que contento.

De noche las imágenes tienen un nivel de detalle más bajo, sobre todo por el maquillaje digital pero también porque el sensor no tiene una apertura elevada. Se puede usar el desenfoque por software, y funciona aceptablemente bien para no tener doble sensor delante.

El contraste es algo elevado en modo automático y aunque se puede corregir creemos que sería mejor bajarlo de serie, porque pocos usuarios van a querer usar el modo Pro. En la siguiente galería tenéis decenas de fotos de ejemplo.

En cuanto al vídeo, hemos de reconocer que aquí si vemos diferencias notables con respecto al Mi 9 porque no parece que tenga la misma estabilización.

De día el resultado es bastante bueno, con unos colores ligeramente saturados, aunque el sensor principal los resuelve mejor que el gran angular. No se nos permite grabar con el zoom óptico.

De noche el video con las cámaras traseras tiene un nivel de detalle aceptable y no hay mucho ruido pero debemos grabar parados ya que si lo hacemos en movimiento la trepidación será excesiva.

Con la cámara delantera pasa algo similar pero la estabilización es algo mejor. Aún así también es recomendable grabar sin estar andando ya que los pasos hacen que la imagen se mueva demasiado, tanto de día como de noche. Eso sí, hay que alabar el rango dinámico, bastante conseguido.

Una batería que sin deslumbrar, sorprende

La batería de este móvil no es especialmente grande. De hecho en el Mi 9 ya nos quejamos de que el amperaje podría haber sido mayor. Los 3070 mAh del Mi 9 SE rinden bien, pese a todo, y demás se pueden llenar rápido gracias a la carga de 18 W.

En la primera prueba de batería hemos estado jugando mucho en interiores, con cobertura Wifi. Hemos hecho muchas fotos y algún vídeo en exteriores, y usando apps de redes sociales y algo el GPS. Hemos llegado a las 5 horas y media de pantalla con 24 horas totales de autonomía.

En la segunda prueba de batería hemos hecho un uso mucho mas intenso, jugando mucho, escuchando música, usando auriculares bluetooth, haciendo muchas fotos, algún vídeo. Hemos llegado a las 6 horas de pantalla con 12 horas totales de autonomía.

En la tercera prueba de batería hemos hecho un uso similar, pero no hemos escuchado podcasts. Hemos llegado a casi 6 horas de pantalla con 20 horas totales de autonomía.

MIUI en versión Mi 9

Xiaomi nos ha dado algunas funciones en MIUI que por ahora están sólo en el Mi 9, como el modo noche. Poco a poco irán llegando a otros modelos pero nos alegramos de que el Mi 9 SE, también las tenga.

Como decimos, MIUI 10 es la capa que corre sobre Android, en concreto sobre la versión 9 Pie, con las funciones que ya conocemos: sección del escritorio para atajos de aplicaciones, multitarea con accesos directos, gestos de navegación para ocultar los botones…

Además, en la pantalla, tendremos las opciones de encenderla cuando cojamos el móvil, cuando pulsemos dos veces en la misma aunque esté apagada y también podremos activar la pantalla ambiente. Esto es así dado que dispone de una pantalla OLED, así que puede encender sólo los píxeles que necesitamos.

En alguna ocasión hemos visto cómo la interfaz se ha redibujado, no sabemos si por culpa de la optimización, por las pruebas que hemos hecho o por el cambio de modo entre claro y oscuro. Ha sido algo puntual y nada frecuente, así que tampoco lo vemos como un problema.

MIUI sigue siendo una interfaz muy elegante y con muchas opciones, pero Xiaomi debe corregir, ya, el tema de las notificaciones. Aunque el notch es pequeño los avisos no aparecen en la parte superior de la pantalla, que por cierto tampoco podemos ocultar poniendo esa zona en negro, como hacemos en otros móviles de la marca.

Ya lo dijimos en el análisis del Xiaomi Mi 9, del Redmi Note 7 y de este Mi 9 SE: Xiaomi necesita que los iconos de las notificaciones funcionen bien. Y ojo, porque hay una opción en los ajustes para mostrarlos, pero simplemente no aparecen siempre. Al menos podemos guiarnos por los puntos rojos en los iconos de las apps en el escritorio, como se hace en iOS.

Ah, lo olvidaba: a ver si damos la opción de usar un cajón de aplicaciones. Si hasta Huawei lo ha puesto…

Una gran opción, con un gran precio

Xiaomi ha creado un gran terminal. Es elegante, contenido en tamaño, potente y con buenas cámaras y autonomía. Mi principal duda es si este smartphone no va a quitarle ventas al Xiaomi Mi 9, porque cada vez que he recomendado un Mi 9 me he dado cuenta de que podría haber recomendado este.

Su principal baza, y su mayor problema, es el mismo: el tamaño.

El tamaño es lo mejor y lo peor de este móvil

Estoy seguro de que muchos usuarios agradecerán poder comprar un móvil compacto, como este, pero a mi se me antoja demasiado pequeño. Jugar durante largo tiempo, o leer, no me resulta tan cómodo como en el Mi 9 o en móviles con mayor diagonal de pantalla. Y sólo es media pulgada como mucho, pero se nota más de lo que esperaba.

Eso sí, si quieres un móvil potente y pequeño, ni te lo pienses. Este es el tuyo.