La industria de los móviles ha conocido gigantes desde que nació. Motorola, LG o Nokia lograron crean empresas de gran tamaño. En la era de los smartphones, Samsung y Apple tomaron su relevo y parece que, desde hace unos años, las marcas chinas quieren ocupar el trono.

Una de las menos conocidas en Europa es OPPO, un gigante en Asia que actualmente está expandiéndose en mercados como el español.

Hace unas semanas pudimos analizar su buque insignia, el OPPO Find X2 Pro, un dispositivo que puede luchar por ser el móvil del año, pero cuyo precio hace que no sea una opción para la mayoría.

OPPO lo sabe y por eso ha lanzado dos modelos de gama media con buenas especificaciones y un precio algo más ajustado, los OPPO Find X2 Lite y OPPO Find X2 Neo. Nosotros hemos pasado una semana con el primero de ellos, y esta es nuestra opinión.

Características OPPO Find X2 Lite

• Pantalla:
  • 6,4 pulgadas.
  • Resolución: 2340 x 1080 px.
  • Tasa de refresco: 60 Hz.
  • Tecnología: AMOLED.
• Rendimiento:
  • Procesador Snapdragon 765G.
  • 8 GB de memoria RAM.
  • 128 GB de almacenamiento.
• Cámaras:
  • Traseras:
    • Sensor principal: 48 Mpx.
    • Gran angular: 8 Mpx.
    • Macro: 2 Mpx.
    • Sensor de profundidad: 2 Mpx.
  • Delantera:
    • Sensor de 32 Mpx.
• Batería:
  • Capacidad: 4.025 mAh.
  • Carga rápida de 30 W.
• Dimensiones: 160,3 x 74,3 x 7,96 mm.
• Peso: 180 g.
• Conectividad: 4G / 5G, WiFi, Bluetooth 5.0, NFC.

Una gran construcción, pero con un diseño casi tradicional

Con el primer OPPO Find X la empresa sorprendió a propios y extraños con un diseño radical y futurista, que integraba un sistema motorizado tanto en la cámara delantera como trasera. Para su sucesor la compañía ha sido mucho más tradicional, y lo es aún más en el modelo que hoy analizamos.

Estamos ante un dispositivo que está realmente bien construido y no tiene ningún tipo de ruido cuando lo agitamos. El marco metálico, en un color cobrizo claro en el modelo que nos han cedido, es realmente elegante y todo está perfectamente diseñado y alineado.

Pero como decimos, es un diseño actual pero muy sobrio, con unos marcos frontales algo gruesos habiendo visto lo que es capaz de hacer la empresa. Se nota que OPPO ha echado el resto en cuanto al diseño en el modelo Neo, no en este.

Lo primero que llama la atención es la apuesta por una muesca o notch y no por una perforación en pantalla como tienen los otros dos Find X2. En la parte trasera tenemos un módulo de cámara en la parte izquierda que sobresale muy poco, sobre todo comparado con su hermano mayor.

En la parte superior tenemos un micrófono de cancelación de ruido y en la parte inferior tenemos el micrófono principal, el puerto USB C, un conector para auriculares de 3.5 mm y el único altavoz del dispositivo. Aunque entendemos que OPPO está estratificando sus modelos creemos que por 500 € se podría haber dado un segundo altavoz aunque fuera de menor potencia.

En la parte derecha tenemos el botón de encendido con un ligero acento de color verde y en la parte izquierda tenemos dos botones de volumen y la ranura para las dos tarjetas SIM. Así es, no tenemos bandeja para microSD.

El mejor procesador de gama media, con 5G

La potencia bruta no suele ser lo que busca la gente cuando mira un móvil de unos 500 euros. Pese a eso, que el rendimiento no sea un problema es desde luego algo obligatorio cuando pagamos tanto por un móvil.

En este caso tenemos un Snapdragon 765G, un procesador de gama media que es capaz de mover sin problemas todos los juegos y apps que hemos probado, y que junto con los 8 GB de RAM hace que la experiencia de uso sea muy agradable. No, no llega a los límites de los 865, pero no creemos que eso se espere en este rango de precios. Esto se nota sobre todo al jugar a Honkai Impact Third. No llega a haber lag o caída de fluidez, pero sí que se nota que no va tan rápido como el X2 Pro.

El almacenamiento es de 128 GB, una cantidad buena si no fuera porque no es ampliable, y cada vez es más normal usar decenas de GB de almacenamiento para juegos, fotos y vídeos. Yo mismo me sorprendí el otro día al mirar por casualidad la cantidad de datos que tenía ocupados en otro móvil antes de empezar a usar este: más de 61 GB.

El único problema que hemos tenido ha sido con Pocketcast, la app de podcasting, que se ha cerrado dos veces de forma accidental cuando la estábamos usando en segundo plano.

La conectividad es uno de los puntos fuertes de este modelo, aunque solo sea porque dispone de 5G gracias al procesador que utiliza. También disponemos de Wifi 6, de doble banda, claro, y de Bluetooth 5.1. Lo que no tenemos es emisor de infrarrojos, aunque no parece que eso sea un problema para la mayoría de la gente.

Se mantiene el jack de auriculares, algo que gustará mucha gente, aunque no tenemos ni radio FM ni bandeja para tarjetas de memoria.

Una buena pantalla, pero sin novedades

De este análisis hemos comentado que el diseño de este modelo era bastante convencional.  Lo mismo podríamos decir de su pantalla, un panel de 6,4 pulgadas con resolución FHD+ y 60 Hz de tasa de refresco. Es decir, un panel muy correcto para el día día pero sin ninguna novedad.

El brillo máximo supera por poco los 400 nits, y la tecnología AMOLED nos ofrece unos colores vivos y unos negros intensos. Sí, como en cualquier panel de este tipo tenemos un ligero viraje a tonos verdes cuando incluyéramos el dispositivo, pero no es algo problemático.

En alguna ocasión hemos visto cómo el brillo automático cambiaba de forma continua subiendo y bajando para encontrar un punto concreto que no acababa de hallar. En ocasiones nos ha sido más cómodo establecer el brillo manual.

No tenemos muchas opciones de Pantalla Ambiente. Es decir, podemos hacer que el móvil muestre siempre la hora, incluso con la pantalla apagada, pero no podemos cambiar el diseño de esta función, algo que sí se puede en muchos otros modelos, ni ver notificaciones. Y si queremos, podremos configurar la hora de inicio y de fin de esta característica, para que no gaste batería cuando estemos durmiendo.

A los ajustes convencionales como el brillo, el modo oscuro o el cambio de temperatura de color hay que añadir la opción de elegir entre el modo intenso, también llamado P3, y el modo suave, también denominado sRGB.

Lo que no tenemos es la opción de ocultar el notch ya que el ajuste de visualización en pantalla no parece servir para eso, aunque lo parezca.

Las cámaras del OPPO Find X2 Lite las esperábamos mejores

OPPO es una de las marcas de móviles Android que mejor procesamiento de fotografías es capaz de hacer. Pero antes de hablar de la calidad de las fotos hemos de recordar que si bien este OPPO Find X2 Lite tiene cuatro cámaras traseras, la configuración es extraña.

Tenemos un sensor principal de 48 Mpx, un gran angular de 8 Mpx y dos sensores de 2 Mpx. La cuestión es que ninguno es un telefoto o un macro. Uno es un sensor en blanco y negro y otro es un sensor de medición de profundidad. Los otros se usan de forma puntual, el primero al elegir el filtro de retrato en blanco y negro y el segundo cuando necesitamos desenfocar.

Los dos sensores principales nos dan un resultado pasable aunque se nota mucho el uso del HDR en el sensor principal y no en el gran angular en algunas situaciones. También se echa en falta mayor resolución en el gran angular. 8 Mpx en un móvil de 500 euros son pocos, sobre todo si queremos ampliar mínimamente.

Pese a todo, la calidad de la imagen, el rango dinámico y la saturación son correctos. Eso sí, el contraste es ligeramente elevado.

Al no disponer de zoom óptico hemos de usar el digital. Con dos aumentos aún tenemos una imagen usable, pero con cinco aumentos se aprecia mucho la pérdida de detalle.

El disparo macro se realiza usando la lente del gran angular, y la calidad con buena luz es de nuevo, pasable, pero de noche o con baja luz es difícil enfocar y se echa de menos un sensor dedicado, sobre todo en un móvil que cuesta 500 euros y no tiene teleobjetivo.

De noche vemos cómo el detalle baja, sobre todo en el gran angular. En algunas tomas ayuda el modo noche, que perfila más los contornos y extrae más luz, aunque deja las fotos algo más irreales.

La cámara delantera nos ha dejado de nuevo con un sabor de boca algo amargo. La calidad nos la esperábamos mejor y el rango dinámico no parece ser correcto en muchas de las tomas.

Por último, en cuanto al vídeo hemos de alabar la estabilización con buena luz, y la calidad. Pero con baja luz estamos ante un móvil más, que nos permite grabar pero cuya calidad baja.

Así es la autonomía del OPPO Find X2 Lite

El OPPO Find X2 Lite tiene una gran batería de 4025 mAh y una carga rápida que si bien no es tan espectacular como en el X2 Pro, es muy válida. Los 30W cargarán nuestro móvil en poco más de una hora.

En la primera prueba de batería hemos estado usando el móvil en interiores para jugar, hablar por teléfono y usar aplicaciones sociales. También hemos salido a la calle para hacer fotografías. Hemos llegado a las 25 horas de pantalla con 6 horas de autonomía total.

En la segunda prueba de batería hemos hecho un uso similar, aunque sin salir al exterior, sobre todo jugando y usando apps sociales. Hemos llegado a las 28 horas de pantalla con 6 horas y media de autonomía total.

En la tercera prueba hemos tenido un uso similar y también unas cifras muy parecidas al resto de pruebas. Hemos llegado a las 24 horas de pantalla con algo más de 6 horas de autonomía total.

Color OS necesita algunas mejoras

OPPO ha lanzado este modelo con Android 10, como no podía ser de otra forma. Color OS es la interfaz que corre por encima del sistema, en su variante 7.0, no 7.1.

De ella destaca el buen hacer en cuanto a opciones. Podemos elegir el modo oscuro, los gestos, y demás novedades de Android 10, además de algunas extra de personalización, como los cambios de iconos.

Eso sí, se sigue echando en falta la tienda de temas, o al menos la posibilidad de elegir entre varios ya que aunque la interfaz tiene el ajuste para cambiar de temas, la realidad es que sólo hay uno disponible.

En la parte positiva tenemos que destacar lo rápido que funciona el desbloqueo facial en este modelo, que además nos da la posibilidad de mantenernos en la pantalla de inicio o de saltar a los escritorios.

OPPO ha avanzado mucho en este apartado, pero aún le falta algo para llegar a ser de los mejores. Pese a eso, Color OS no es un problema se mire por donde se mire.

No es mal móvil, pero lo esperábamos mejor

OPPO no es precisamente una marca barata. No lo es en China y no lo puede ser en mercados externos como el español. Pese a eso, la empresa siempre ha destacado por ofrecer un gran diseño y unas cámaras por encima de las que tiene su competencia. Pero con este modelo parece que hay ciertas contradicciones.

La construcción es excelente y el detalle perimetral del marco cobrizo hace que sea un móvil muy elegante. Aún así, no tiene este terminal un diseño innovador como pudieran tener los OPPO Reno e incluso tiene unos marcos más gruesos de lo que esperaríamos en un móvil de 500 euros.

Pero sin duda lo que más me ha chocado ha sido el comportamiento fotográfico. Teniendo en cuenta el rango de precios, y el fabricante del que hablamos, esperaba un mejor desempeño en este apartado. No creo que alguien con este móvil vaya a pensar que tiene una mala cámara, pero si en algo destaca OPPO es justamente en esto, y no es el caso con el Find X2 Lite.

¿Podría ser una cuestión de software y que en unas semanas veamos una mejora notable? Es posible, pero tampoco es una garantía.

Aún así, hay apartados en los que tenemos cosas buenas que decir. El terminal es muy ergonómico y especialmente ligero, al menos bajo los estándares actuales. La potencia y el desempeño son notables y la calidad de la pantalla está en la línea de lo que buscamos en la gama media. Ah, y la batería es genial.

Es posible que las carencias que le hemos visto a este terminal las supla su hermano mayor, el OPPO Find X2 Neo, pero teniendo en cuenta que ese modelo sube a los 700 euros nos da la sensación de que la compañía debería haber perfilado algo mejor este Find X2 Lite.

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