Los teléfonos móviles se han convertido en una herramienta indispensable para prácticamente todo el mundo. Sin embargo, el uso que se hace de los mismos es muy diferente en función de nuestra edad, nuestros hobbys, nuestro presupuesto y muchos otros factores.
Ahí es donde entran los dispositivos más de nicho, aquellos que buscan solventar una necesidad muy concreta. Un buen ejemplo son los móviles gaming, terminales extremadamente potentes con funciones pensadas directamente para jugar, nada más.
Uno de los últimos móviles de este tipo es el Nubia Red Magic 5S, un dispositivo que se anunció a finales de julio y que estará disponible en España. Nosotros hemos pasado una semana con él y esta es nuestra experiencia.
Características Red Magic 5S
- Procesador – Qualcomm Snapdragon 865.
- Memoria RAM: 8/12 GB UFS 3.1.
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Almacenamiento.
- Interno: 128/256 GB LPDDR5.
- Gráfica: Adreno 650.
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Pantalla.
- Tamaño: 6,65 pulgadas.
- Resolución: 2340 x 1080 píxeles.
- Tecnología AMOLED.
- Otros: tasa de refresco de 144 Hz.
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Cámara trasera.
- Sensor principal: 64 Mpx.
- Gran angular: 8 Mpx.
- Sensor bokeh: 2 Mpx.
- Otros: LED Flash, modo noche,….
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Cámara delantera.
- Resolución: 12 Mpx.
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Puertos:
- Conector USB Tipo C.
- Sensor de huellas bajo el panel.
- Conector de auriculares de 3,5 mm.
- Sistema de enfriamiento multidimensional con ventilador activo (15 000 RPM).
- Otros: 5G, WiFi 6, Bluetooth, GPS, GLONASS,….
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Batería:
- 4.500 mAh.
- Carga rápida de 55W.
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Sistema:
- Versión de Android: Android 10.
- Capa del fabricante: Red Magic OS Cyber Edition.
Un móvil grande, bien construido
Al contrario de lo que sucede en otros móviles pensados para jugar, este Nubia Red Magic 5S se ha diseñado conteniendo bastante la estridencia. Al menos en el color gris hielo que nos han cedido ya que el modelo rojo, eld e 12 GB, es mucho más llamativo.
Estamos ante un móvil bastante grande, con una pantalla de 6,67 pulgadas y un peso que alcanza los 220 g. Teniendo en cuenta el tipo de móvil que es, tanto las medidas como el Gramaje nos parecen aceptables aunque se echa en falta algo más de batería como veremos más adelante.
En el frontal la pantalla domina pero también deja espacio para unos marcos superior e inferior más gruesos de lo que solemos ver en móviles de este precio aunque se justifican plenamente por la presencia de dos altavoces frontales estéreo.
El sonido que son capaces de emitir es de buena calidad pero, sobre todo, de un altísimo volumen. Apenas he pasado del 60 o el 70 % del volumen total en cualquiera de los escenarios de uso en los que he utilizado este teléfono.
En la parte superior tenemos uno de los micrófonos y un jack de 3.5 mm para poder poner los auriculares. Si miramos a la parte inferior veremos una rejilla de ventilación, otro micrófono, la bandeja para tarjeta SIM y un puerto USB C.
En el lateral izquierdo tenemos un sistema de pines magnético, otro micrófono, otra de las rejillas de ventilación del sistema de refrigeración y un botón físico que activa el modo de juegos del terminal. En el lateral derecho tenemos el botón de encendido, en una posición excepcionalmente baja pero que me ha gustado bastante, los dos botones de volumen, otra rejilla de ventilación y los dos botones que hacen las funciones de los gatillos de un mando de consola.
La parte trasera, como hemos comentado, es aceptablemente discreta para ser este un móvil enfocado al juego. La versión con 12 GB de RAM y 256 GB de almacenamiento interno tiene colores azul y rojo muchísimo más impactantes. En la parte superior vemos los tres módulos de cámara y el flash LED y en el centro tenemos el logotipo con un tono metálico que resalta bastante.
En la mano se siente un móvil bastante cómodo y la funda que viene en la caja tiene unos resaltes en las esquinas que a la vez que protegen el terminal de impactos en estas dos zonas nos permiten descansar los dedos índices cuando cogemos el móvil en horizontal y vamos a utilizar los gatillos.
El rendimiento no sorprende
Justo antes de empezar a analizar este dispositivo me he pasado algo más de una semana utilizando el Asus ROG Phone 3. Hablamos del que es posiblemente el móvil Android más potente y fluido del mercado teniendo en cuenta tanto su hardware, especialmente el procesador, como su software.
Al pasar a usar el Red Magic 5S he visto como esa sensación de potencia ilimitada desaparecía, dejándome con una sensación de tener un buen móvil en la mano pero al que se le echa en falta utilizar un procesador como el Snapdragon 865 Plus.
Además, la unidad que nos han prestado es la que tiene 8 GB de RAM y 128 GB de almacenamiento interno, lo que contrasta con otros modelos que utilizan el mismo procesador que este, el Snapdragon 865 pero cifras mayores de RAM, de 12 o 16 GB.
Tengo que dejar claro que casi ningún momento me ha parecido que este móvil sea lento pero es cierto que Nubia ha querido apostar por el recorte de precios y eso hace que las cifras de la memoria o el tipo de procesador no puedan ser los mejores del mercado. El casi de la anterior frase lo he puesto porque jugando a Honkai Impact Third he visto cómo el terminal no era capaz de aguantar el ritmo de os cuadros por segundo en algunas fases. Pese a eso, se soluciona activando el modo gaming con el botón rojo del lateral izquierdo.
Contamos con las memorias con la mejor tecnología, si bien no con las mayores capacidades. La RAM es LPDRR5 y el almacenamiento es UFS 3.1. Esto último se agradece mucho sobre todo a la hora de instalar juegos muy pesados como Honkai Impact Third.
Sobre los disparadores en el lateral hemos de decir que resultan útiles cuando configuramos un mapeado concreto en los juegos que solemos utilizar, pero están enfocados sobre todo a títulos deportivos o shooters.
Por otro lado, la vibración 4D de la que presume el fabricante solo está disponible en unos pocos juegos.
Lo que nos parece absurdo es que siendo este un móvil de gama alta no tenga ranura para microSD, algo que es necesario en un móvil de 128 GB al que vamos a instalarle muchos juegos, ni NFC. No tiene sentido.
Una pantalla que responde muy bien
Una de las prestaciones estrella de este modelo es su pantalla. Tenemos un panel de 6.67 pulgadas con tecnología OLED y sin bordes curvos. Además, no está recortado por orificios o muescas, haciendo algo más inmersivo el uso de aplicaciones de vídeo.
Pero lo realmente llamativo no es su resolución, 1080p, sino su tasa de refresco de nada menos que 144 Hz. Además, esta es variable y podemos elegir entre 60, 90 y 144 Hz. No tenemos la posibilidad de poner 120 Hz, pero tampoco parece un problema.
La calidad de reproducción y la velocidad con la que responde el panel nos hace darnos cuenta de que Nubia ha cuidado esto bastante.
En los ajustes de pantalla tenemos la posibilidad de modificar varios parámetros más, aunque todo queda un tanto deslucido por la interfaz, de la que hablaremos luego.
El brillo máximo es suficiente y si bien el sensor de luminosidad ambiental ha trabajado para ofrecer el brillo necesario en cada momento me ha dado la sensación de que, a veces, dudaba y subía o bajaba el brillo cuando no hacía falta. La cuestión es que lo hacía muy poco, y no llegaba a impedir seguir haciendo lo que fuera que hiciéramos, pero sí que nos desconcnetraba ligeramente.
Bajo el panel está el sensor de huellas, de tipo óptico. Al principio del análisis el funcionamiento era correcto pero a medida que iban pasando los días veíamos como cada vez fallaba más. Al usar en el día a día unas mascarilla hemos tenido que desbloquear más veces de las que nos gustaría usando el PIN o patrón de desbloqueo.
Además, está localizado muy cerca del borde inferior, lo que hace incómodo el uso en muchas circunstancias.
Triple cámara, pero el Red Magic 5S no tiene zoom óptico
El apartado fotográfico es uno de los menos cuidados en los móviles gaming. Normalmente sus potenciales compradores no valoran mucho esta función y eso hace que las marcas no gasten recursos en ella.
No obstante, en este Red Magic 5S lo que nos ha disgustado no es la calidad de las imágenes, sino el software.
Más allá de que la estética nos recuerda a los móviles chinos de hace una década, el que para hacer una foto normal, una con macro y una con gran angular tengamos que ir a tres secciones diferentes de la interfaz nos parece un despropósito.
Es como si la compañía no hubiera tenido en cuenta este tipo de cosas, algo que la mayoría de marcas implementa con un simple diseño de números. En este caso tenemos el angular normal y varios zoom digitales, pero para hacer una foto en gran angular debemos abrir el modo Pro.
Sobre la calidad de las imágenes, tenemos unas fotografías diurna aceptables, aunque con un HDR algo escaso y un procesado demasiado básico. En cuanto al angular, la experiencia es también básica, con una deformación bastante acusada, aunque nada que impida el uso del sensor.Ademas, el rango dinámico es mucho peor.
El macro también está presente, y hace fotos aceptables, aunque es una lente que, como casi siempre, se podían haber ahorrado.
De noche la calidad de las imágenes ha bajado bastante. El sensor principal aún es usable pero cuando pasamos las fotos a un ordenador y las examinamos vemos que no es este un aspecto destacable del móvil. La calidad del gran angular también decrece, más aún, y el ruido se hace presente a poco que ampliemos la fotografía.
La cámara delantera es poco menos que testimonial y ofrece unos tonos especialmente oscuro dado que el HDR no siempre ayuda lo suficiente.
El vídeo no es uno de los aspectos clave, por mucho que en teoría se pueda grabar en 8K. La calidad es pasable pero a poco que las condiciones no sean las ideales echaremos en falta más calidad y mejor estabilización. Tanto delante como detrás se aprecia que Nubia no ha prestado especial atención a esto, algo que es bastante normal en móviles gaming.
Una gran carga rápida para una batería muy normal
Jugar en un móvil es una de las tareas que más energía consume, motivo por el cual los fabricantes suelen optar por poner baterías de gran tamaño. Pero no es lo que ha hecho Nubia.
El Red Magic 5S tiene una batería de 4500 mAh, más propia de un móvil de gama alta normal que de un móvil gaming, y teniendo en cuenta el peso, la esperábamos mayor. Eso sí, con la carga de 55W no tenemos queja alguna.
En la primera prueba de batería hemos estado utilizando el móvil tanto en interiores como en exteriores. Hemos visto vídeos, hemos hecho fotografías y en todo momento hemos dejado la tasa de refresco en 144 Hz. Hemos rozado las 28 horas de autonomía con algo más de 4 horas de pantalla totales.
En la segunda prueba de batería hemos configurado la pantalla a 60 Hz. Hemos hecho un uso similar a la anterior prueba, pero escuchando algo más de podcasts. Y se ha notado en la autonomía. Hemos llegado a las 22 horas de autonomía con 4 horas y media de pantalla totales.
En la tercera prueba de batería hemos vuelto a los 144 Hz. Hemos hecho un uso muy intenso de juegos, sin salir de casa. Hemos llegado a las 12 horas de autonomía con 6 horas de pantalla totales.
La cuarta y última prueba de batería ha tenido lugar de nuevo 144 Hz, hemos escuchado música, hablado por teléfono, jugado… Hemos llegado a las 23 horas de autonomía con 5 horas y media de pantalla totales.
Una interfaz recargada que necesita pulirse
Una de cosas que más me llamó la atención del ASUS ROG Phone 3 fue su interfaz. Parecía que estuviéramos utilizando un móvil Pixel salvo por algunos detalles relacionados con la experiencia de juego.
En esta ocasión Nubia ha optado por un acercamiento totalmente diferente, con una interfaz mucho más personalizada en la que vemos algunos detalles que no se han pulido del todo, como traducciones al castellano que no son del todo correctas.
Además, hay elementos de la interfaz que tardan en mostrarse, como los iconos de los escritorios cuando salimos de Discover. Como es lógico, esto no es un problema de potencia del móvil, sino de una falta de trabajo en la interfaz.
Las opciones de juegos tenemos que destacar Game Space 2.1, un conjunto de acciones disponibles mediante un gesto de deslizamiento cuando jugamos que nos permite activar y desactivar algunos elementos para poder jugar de la mejor forma posible.
Pero parece que esta función no se ha pensado para usar con los gestos del sistema de Android 10 ya que sustituye al botón de volver al escritorio. Para activar este modelo hemos de pulsar el botón rojo del lateral.
Con esta acción se activa también el ventilador interno, que suena bastante cuando lo activamos, pero que baja de forma notable la temperatura del móvil.
Conclusión: el precio es la clave del Red Magic 5S
Los Red Magic de Nubia siempre se han pensado para aquellos usuarios que valoran mucho jugar en su móvil, está claro. Sin embargo, lo hacen desde una aproximación en la que el precio es muy importante.
A lo largo de este análisis he mencionado uno de los principales rivales del Red Magic 5S, el ASUS ROG Phone 3. Pero ese modelo es notablemente más caro que el Nubia, que cuesta 579 euros con 8+128 GB (color gris) o 649 euros con 12 + 256 GB (color rojo).
Es ahí donde este móvil brilla, en el ser uno de los móviles gaming actuales con mejor precio.