Análisis Huawei Mate 40 Pro: el Aquiles de los móviles
El nuevo móvil Android de Huawei lleva entre nosotros una semana. Te contamos cual es nuestra opinión del Huawei Mate 40 Pro.
30 octubre, 2020 17:00Analizar un móvil suele llevarnos por un camino común en todos los casos. Aunque en España lo que más se vendan sean móviles de gama media, la realidad es que la forma de analizar la gama alta no es diferente, salvo en un aspecto: somos mas exigentes.
Esto es normal, dado que estamos pagando mucho dinero y nuestras expectativas son mayores.
Para probar el nuevo Huawei Mate 40 Pro hemos realizado ese ejercicio, el de exigir lo máximo, algo que es obligatorio dado que es un terminal que cuesta 1199 euros. Hemos estado una semana con él y nuestra conclusión, ya os la avanzamos, es que estamos ante el Aquiles de los móviles.
Características Huawei Mate 40 Pro
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Pantalla:
- 6.67 pulgadas.
- Resolución: 2.772 x 1.344 px.
- Tasa de refresco: 90 Hz.
- Tecnología: AMOLED.
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Rendimiento:
- Procesador Kirin 9000.
- 8 GB de memoria RAM LPDDR5.
- 256 GB de almacenamiento UFS 3.1.
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Cámaras:
- Traseras:
- Sensor principal: 50 Mpx.
- Ultra gran angular: 20 Mpx.
- Telefoto: 12 Mpx con zoom óptico de 5 x.
- Delantera:
- Sensor de 12 Mpx.
- Sensor de medición 3D.
- Traseras:
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Batería:
- Capacidad: 4.400 mAh.
- Carga rápida de 65 W.
- Dimensiones: 167 x 78 x 9.1 mm.
- Peso: 212 g.
- Conectividad: 4G / 5G, WiFi, Bluetooth 5.0, NFC.
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Sistema:
- Android: 10
- Interfaz: EMUI 11.
El Huawei Mate 40 Pro no se puede confundir
Son muchos los fabricantes que buscan una identidad visual que logre que sus móviles sean icónicos. Huawei ha invertido mucho en ello y ya vimos cómo con el Huawei P30 Pro logró algo así con el color.
El Huawei Mate 40 Pro es fácilmente reconocible
La estética del Mate 40 Pro lleva eso más allá, no tanto por el color (aunque hay uno con tonos claros cambiantes más llamativo que este gris), sino porque tanto su frontal como su trasera son únicas.
En la parte posterior llama la atención el módulo de cámara, circular, con la parte interior el mismo tono que el resto del móvil.
En la parte frontal tenemos una pantalla de gran diagonal con una perforación generosa ya que además de la cámara delantera ha de alojar el sensor de profundidad. Pero lo más llamativo es posiblemente la doble curvatura.
Al contrario que otras firmas, Huawei no sólo se aleja de las pantallas planas, sino que curva tanto los laterales mayores del Mate 40 que resulta inconfundible. El cristal gira nada menos que 88º, haciendo casi que cuatro de los seis lados del móvil sean de cristal.
Eso sí, no vemos el sentido práctico de esto, pese a que estéticamente llame mucho la atención.
Un rendimiento fuera de toda duda
Huawei ha estrenado en este móvil el Kirin 9000, el que podría ser su último procesador por culpa del veto de Estados Unidos. Es el primer chiptset que podemos probar en un móvil Android con tecnología de 5 nm, la misma que usa el Apple A14 del iPhone 12.
El rendimiento que demuestra este procesador es más que notorio, y se ve en las pruebas de benchmarks. Pero, como siempre decimos, eso no es lo importante. Lo relevante es cómo se porta en el día a día, jugando y usando apps.
Ahí tenemos que decir que no va mal, obviamente, pero el que tenga 8 GB de RAM en vez de los 12 GB que vemos en modelos de precio similar, hace que tengamos que torcer el gesto.
La realidad es que muchos usuarios no notarán esa diferencia, pero cuando usamos juegos como Genshin Impact podemos exprimir todos los componentes de un móvil y ahí si notamos algunas diferencias.
No hay queja en el almacenamiento, que con 256 GB nos permite no preocuparnos porque Huawei haya eliminado la ranura para la tarjeta de memoria.
Tenemos que dedicar una parte del análisis al desbloqueo biométrico de este terminal. Además de un sensor de huellas bastante competente, el Mate 40 Pro mantiene el desbloqueo facial con sensor 3D que tenía el Mate 30 Pro, y lo hace sin usar un notch.
Esta es la explicación a que tenga una perforación en pantalla tan grande. No se desbloquea con la cámara delantera, sino que mapea nuestra cara con rayos infrarrojos, lo que aporta una seguridad que, a día de hoy, solo da el iPhone.
Otro aspecto en el que destaca este móvil es el sonido. Huawei ha implementado dos altavoces, y no los ha puesto donde suele ser normal. Bueno, el principal sí, junto al cargador, pero el secundario está en el marco superior.
No ofrece la misma potencia que el primero, pero desde luego es mucho mejor que la mayoría de móviles del mercado, si exceptuamos los móviles gaming.
La pantalla del Huawei Mate 40 Pro es extrema
Decíamos en el apartado del diseño que la pantalla de este modelo era llamativa. No podía ser de otra forma con una curvatura de nada menos que 88 grados.
Esto hace que tengamos que tocarla sí o sí al cogerla, pero hemos de reconocer que no hay toques fantasmas. Lo que sí tenemos son sombreados a verde en los laterales, sobre todo con fondos blancos.
Esto es normal cuando miramos un panel OLED desde un punto de vista que no es perpendicular al mismo, pero aquí siempre pasará eso al tener la pantalla esas curvas tan pronunciadas.
En cuanto a la calidad de la pantalla, tenemos que decir que ofrece una nitidez elevada, con una resolución que roza el QHD, y con compatibilidad con HDR10.
El problema es que al no poder usar algunas apps de streaming como Youtube no le sacamos el partido adecuado. Otras como Netflix se pueden instalar de formas alternativas y algunas funcionan bien, como Amazon Prime Video.
En cuanto a las novedades de software que Huawei ha implementado relacionadas con la pantalla tenemos una práctica y otra que no es especialmente útil.
La primera se llama Eyes on Display y nos permite que la pantalla se encienda mostrando las notificaciones y la hora solo cuando la miramos. Esto supone un ahorro de energía importante y nos demuestra que desbloqueo facial avanzado sirve para más cosas que securizar el terminal.
La segunda es la existencia de gestos en el aire para controlar lo que estamos viendo. En teoría esto es practico cuando estamos en la cocina con las manos manchadas y queremos realizar alguna acción cómo hacer scroll en una receta. La realidad es que no es el primer móvil que intenta que esto se convierta en una función útil, pero esperemos que sea el último.
Pese a todo, al ser una función de software sobre un hardware que ya nos ha demostrado dos veces su validez, tampoco es un problema.
Manteniendo el nivel en cámaras… pero con más competencia que nunca
Recuerdo cuando Huawei presentó el Huawei P20 Pro, un dispositivo que inauguraba su nueva trayectoria en el apartado fotográfico. En algunos aspectos ese móvil estaba muy por delante de sus rivales. En otros, su efectismo hacía que las fotos fueran más llamativas que fieles a la realidad.
Desde entonces la compañía ha ido perfeccionando este apartado y ya vimos pasos importantes con el Huawei P30 Pro en fotografía y con el Mate 30 Pro en vídeo.
Con el Huawei Mate 40 Pro me ha dado la sensación de estar ante una iteración de estos móviles, de que este móvil es un producto fiable y competitivo, pero que no destaca tanto como sus antecesores.
Firmas como OPPO y Vivo han entrado con fuerza en España y ofrecen modelos mucho más baratos con la misma versatilidad fotográfica, aunque es cierto que a nivel de detalle en ocasiones se queden más cortos.
Huawei se acerca a Apple y Google en fotografía
El sensor principal de este móvil ofrece 50 Mpx, aunque por defecto disparemos a 12.5 Mpx. La calidad obtenida es buena aunque más que un detalle muy elevado obtenemos un rango dinámico fiel y real. Las cámaras de Huawei nunca habían estado tan cerca de las de Apple o Google en la búsqueda de una imagen real, no artificial.
También hay que destacar el buen hacer del zoom de este móvil, con un sistema periscópico de 5 aumentos. Pese a que ya no es raro ver un móvil con esta tecnología Huawei sigue siendo uno de los que mejor la usa. Sobre todo esto se ve en la colorimetría, muy similar al angular y al gran angular.
Y hablando del gran angular, aquí hemos de hablar del vídeo. Huawei ha usado esta lente para que sea su cámara principal a la hora de grabar. De día el resultado es muy bueno, pero de noche vemos cómo el estabilizador óptico no es capaz de mantener las luces en el mismo sitio y hay ligeros movimientos. Esto pasa en casi todos los móviles, pero desde que probamos el Vivo X51 5G no podemos decir que pase en todos.
En la parte delantera tenemos un sensor gran angular de 13 Mpx que por defecto recortará la imagen para darnos más detalle. Cuando detecte que hay mas gente en escena ampliará el encuadre para alojar a todo el mundo.
De día los resultados son muy buenos, incluso en vídeo, con un gran rango dinámico. Pero de noche la calidad baja demasiado, aunque el software de la cámara active parte de la pantalla para que sirva de flash.
Por último, hay que hablar de la aplicación de cámara, que mantiene gran parte de los ajustes de sus antecesores aunque muchos de ellos los engloba en el apartado Más, como la grabación a cámara ultra lenta, algo en lo que Huawei sigue destacando, aunque sólo podamos usar la mayor ralentización a 720p.
Huawei sigue liderando en carga y autonomía
Uno de los aspectos más notables de la mayoría de móviles de Huawei es su autonomía.
Aquí tenemos una pila de 4400 mAh capaz de cargar a 66W con cable y nada menos que a 50 W con carga inalámbrica. No es que no tengamos queja, es que este móvil se coloca en primera posición en este aspecto.
Hemos hecho arias pruebas de autonomía, como siempre. Cuando usamos la tasa de refresco en modo automático y hacemos fotos, jugamos y usamos apps sociales, llegamos a rozar las 6 horas pantalla con 30 horas de autonomía total
Si por el contrario forzamos la tasa de refresco de 90 Hz las cifras son algo peores, aunque no demasiado. Llegamos a las 6 horas de pantalla con 24 horas de autonomía total.
El problema del Huawei Mate 40 Pro es el software
Y hemos llegado al que es posiblemente el único débil de este terminal. Huawei lleva ya casi dos años sufriendo el bloqueo de Estados Unidos, y eso le sigue impidiendo usar las apps y servicios de Google. No queremos extendernos en cómo es la experiencia porque ya hicimos un vídeo sobre ello.
Sí que tenemos que remarcar que aunque podamos instalar algunas apps, muchas de ellas no funcionarán al usar las APIs de Google.
La empresa ha puesto mucho empeño en desarrollar los HMS, los Huawei Mobile Services, que permiten a esas apps usar otras APIs en los terminales de Huawei.
Pese a eso, hay detalles como el no poder restaurar una copia de seguridad de WhatsApp que para muchos será un problema. Para otros no, he de reconocer que la mayoría de personas que conozco no valoran el historial de chats de su móvil.
Algunos juegos dan fallos en algunas secciones, como Honkai Impact Third, si bien podemos jugar sin problemas. Esos fallos suelen estar relacionadas con las compras dentro de los mismos ya que, al no usar las APIs de Google, a veces se bloquean.
Pero EMUI no está libre de pecados propios. En un momento en el que vemos cómo fabricantes cómo Vivo o OnePlus intentan disminuir la cantidad de aplicaciones preinstaladas en sus móviles sorprende mucho que Huawei haya incrementado el número de las mismas. Eso sí, muchas son sugerencias y las que están instaladas se pueden eliminar de forma sencilla.
El Mate 40 Pro es el Aquiles de los smartphones
Si la introducción de este análisis te ha dejado algo extrañado por la referencia mitológica, no es culpa tuya. Es una metáfora algo extraña pero es la mejor que hemos encontrado para describir este dispositivo.
Al igual que el héroe griego, el Mate 40 Pro es capaz de pelear de tú a tú con muchos rivales y salir victorioso. La pantalla, la batería, el sistema de carga, la cámara, el diseño… en todos los aspectos principales es capaz de mostrar músculo de forma notoria.
El problema está en su talón, como le sucedía a Aquiles. Un único punto débil que hacía que cualquiera supiera cómo golpearle. En el caso del Mate 40 Pro es el software.
Como habéis leído en el apartado correspondiente, el uso diario de este móvil es muy mejorable y si eso en un gama de entrada es difícil de gestionar, en un gama alta la exigencia es aún mayor.