OnePlus ha cambiado mucho desde que fuese la auténtica referencia en Android para encontrar móviles que apuntaban alto sin subir demasiado el precio. Si OnePlus ha cambiado a mejor o a peor, es algo que dejaremos a juicio del lector, pero la buena noticia es que la filosofía original de la compañía aún perdura, de alguna manera.

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Esa es la conclusión a la que he llegado después de probar el OnePlus Nord 2T durante un par de semanas. Esto es lo más parecido a un “OnePlus de los de antes”, y el mejor sucesor hasta ahora de aquellos modelos legendarios. Que pertenezca a la gama Nord, la que supuestamente apunta más bajo, no deja de ser irónico.

Características OnePlus Nord 2T

Bonito gracias a algunos ‘trucos de belleza’

Si tenemos veteranos entre nuestros lectores, probablemente recordarán una época en la que OnePlus no intentaba competir contra los mejores en cuestión de lujo, llegando incluso a ir en contra de la moda de las traseras de cristal. La lógica era que el usuario entusiasta daba prioridad a otros elementos, como el procesador o la pantalla, antes que al diseño.

Con el Nord 2T, siento algo parecido. No es que el diseño no haya tenido importancia, de hecho, creo que este móvil está mejor diseñado que la mayoría de modelos de la compañía; es sólo que la prioridad ha estado en aparentar que es premium, y no tanto en serlo.

Este móvil se ve mejor de lejos que de cerca, y eso es algo evidente en cuanto lo tenemos en la mano y nos damos cuenta de que da una sensación más barata de lo que esperábamos. A simple vista, puede parecer que este es un móvil caro, con trasera de cristal (y un gigantesco conjunto de cámaras) y bordes metálicos muy brillantes. En realidad, eso no es del todo cierto: es un móvil construido con bordes en plástico, pero eso es algo que sólo notarás tú.

Por si no ha quedado claro, esto es un elogio. He probado muchos móviles construidos en plástico que en ningún momento han conseguido engañar a nadie de que lo son; este Nord 2T, por alguna razón, es diferente. Puede que sea el efecto tridimensional de la trasera de cristal; o puede que sean los colores escogidos, como el agradable “Jade Fog” que he podido probar, un verde pastel muy elegante y nada estridente (también está disponible en gris, “Gray Shadow”).

Y, sobre todo, sigue siendo un OnePlus. El fallo que tienen muchos modelos de la gama Nord es que, en realidad, son móviles de las marcas ‘hermanas’ de OnePlus, como Oppo o Realme, a los que les han cambiado el logotipo.

Este Nord 2T se nota como un OnePlus de principio a fin, y eso se aprecia en pequeños detalles como la presencia del Alert Slider, el interruptor lateral que nos permite cambiar rápidamente entre el modo silencio, vibración y sonido de nuestro móvil. Toda una seña de identidad de la marca que se está perdiendo, ya que el reciente OnePlus 10T no lo tiene y hay dudas de que la 11ª generación lo tenga; una pena, porque este Nord 2T demuestra el gran valor que tienen los elementos originales en el competitivo mercado Android.

El único aspecto que tal vez no me convence del diseño del Nord 2T está en el conjunto de cámaras, que parece seguir la moda de hacerlos más grandes, incluso si no hay motivo aparente. Sólo con fijarse es fácil darse cuenta de que las supuestas aperturas para las cámaras en realidad son plástico negro, y que las cámaras en sí ocupan muy poco espacio. En otras palabras, es grande simplemente para ser grande, sin ninguna razón técnica detrás.

Hardware, justo lo que necesitamos, nada más

Si el diseño externo del móvil me ha llamado la atención por su cuidado, lo mismo puedo decir del diseño interno, o dicho de otra manera, el hardware. Da la sensación de que OnePlus ha escogido los componentes con una clara visión, en vez de simplemente meter lo primero que estaba disponible por el presupuesto (o, como he dicho antes, de renombrar un móvil de otra marca).

Todos los componentes tienen algo en común: no son lo mejor, pero dan la talla. No puedo decir que destaque en absolutamente ningún elemento, pero eso también supone que tampoco destacan de manera negativa. Es uno de los móviles más equilibrados del año, eso sin duda alguna.

Pongamos como ejemplo la pantalla. Todas sus características técnicas son de gama media, y no la elogiaría por ningún aspecto; pero la experiencia ha sido muy buena, y en ningún momento he sentido que le faltase algo. Con su tecnología AMOLED, es una pantalla con un gran contraste que se traduce en unos negros casi perfectos, algo que notaremos especialmente en escenas oscuras y con sombras. Es compatible con HDR10+ y en mis pruebas el rendimiento ha sido bueno, si bien no ha conseguido dejarme con la boca abierta; cumple su función ni más ni menos.

El brillo es tal vez el aspecto técnico más criticable de la pantalla, algo que se nota tanto en la reproducción de contenido como a la hora de usar el dispositivo en exteriores. Incluso si ponemos el brillo al máximo, puede ser difícil apreciarlo, pero en un uso convencional no debería dar problemas.

La frecuencia de refresco, de 90 Hz, de nuevo no es lo mejor del mercado, teniendo en cuenta que ya empieza a haber modelos de gama media que alcanzan los 120 Hz; pero es más que suficiente para notar esa fluidez adicional, que es de esas cosas que, una vez has notado, es difícil volver atrás.

Pero ningún componente explica mejor la apuesta del Nord 2T como el procesador. En vez de optar por un Snapdragon como muchas alternativas, OnePlus apuesta por un Mediatek Dimensity 1300, una marca que estamos más acostumbrados a ver en modelos baratos. Pero, en honor a Mediatek, hay que decir que ya está empezando a ser un rival a tener en cuenta en las gamas más altas.

Este Dimensity 1300 no nos impactará con su potencia, pero cumple perfectamente con su cometido. En ningún momento he echado en falta más potencia con un uso normal, con varias aplicaciones y navegadores web; evidentemente, no va tan rápido como los Snapdragon de móviles premium, pero esa es una comparativa injusta. Es algo que queda en evidencia con pruebas como la de Geekbench 5, donde he obtenido picos de 420 puntos en un núcleo y de 2600 puntos aproximadamente en multinúcleo. De nuevo, algo por debajo de los 3000 puntos que otros móviles más caros alcanzan sin problemas, pero no es algo que se traduzca en un rendimiento claramente inferior.

Es algo que quedó muy claro cuando ejecuté Genshin Impact y comprobé cómo el Nord 2T pudo sin problemas contra uno de los juegos más exigentes del mercado. Pude jugar sin problemas, aunque evidentemente la calidad de los gráficos tuvo que bajar, pero en general el rendimiento es ciertamente sorprendente.

La experiencia multimedia, ya sea con películas y vídeos o con videojuegos es por lo tanto, muy buena.

Tal vez el elemento del hardware más llamativo lo tenemos en la carga rápida, que es de nada menos que de 80 W; además, el cargador viene incluido en la caja, a diferencia de muchos modelos de gama alta que no lo incluyen, lo cual es una gran ventaja económica.

Cámaras que cumplen

En las cámaras del Nord 2T no encontramos muchas sorpresas, en el buen sentido. El sensor principal es bien conocido, un Sony IMX 766 que ya ha sido usado en muchos dispositivos en el mismo rango de precios. Por lo tanto, la clave aquí está en los algoritmos de OnePlus y en el tratamiento de la fotografía.

La buena noticia es que OnePlus ha optado por potenciar los puntos fuertes de este sensor, y eso se traduce en un buen contraste, algo especialmente notable en escenas al aire libre, y en un buen detalle. El sensor es de 50 Mpx, pero por defecto las fotos se toman a una resolución de 12,5 Mpx; de esta manera, cada píxel obtiene más información, obteniendo fotografías más luminosas. Sin embargo, en todo momento tenemos la opción de hacer fotos de 50 Mpx sólo con pulsar un botón en la app de Cámara, aunque la subida de resolución viene con algo de grano en las partes más oscuras de la foto.

La cámara principal del OnePlus Nord 2T es perfectamente válida para todo tipo de escenas, y OnePlus potencia esto activando el HDR automáticamente, lo que mejora el contraste sin perder excesivo detalle en las partes más iluminadas.

También tenemos un zoom de 2x, aunque es completamente digital, ya que el móvil no tiene cámara telefoto. Sin embargo, los resultados del zoom digital me han sorprendido, y creo que las fotos aumentadas de esta manera pueden pasar perfectamente como fotos convencionales, ya que no aprecio artefactos visuales importantes.

No puedo decir lo mismo del gran angular de 8 Mpx, que es sin duda alguna el punto flaco del móvil en cuestión de fotografía. No es que sea el peor que he probado, ni mucho menos, pero no destaca en absoluto, algo evidente cuando comparamos las fotos con las tomadas por el sensor principal. No es una cuestión de resolución: el gran angular produce fotos con una saturación de color muy pobre y un contraste muy reducido, resultando en fotos ‘planas’ que no destacan ni en las mejores escenas. Por último en la trasera, nos encontramos con un sensor de profundidad de 2 Mpx, que sirve sólo para mejorar las fotos en modo retrato.

Las buenas noticias vuelven con la cámara frontal de 32 Mpx, que me ha gustado tanto por la resolución, como por los detalles y el tratamiento de los colores. Consigue fotos muy nítidas, tanto que es buena noticia que OnePlus ofrezca acceso a filtros de belleza para eliminar imperfecciones. El modo retrato con esta cámara también es bueno, aunque tal vez el fondo se difumina demasiado para mi gusto, es un efecto muy llamativo; además, por lo general ha sido capaz de detectar bien mi pelo, aunque algunos “pelos locos” han sido difuminados como el fondo, por lo que hay potencial de mejora.

OxygenOS 12.1, pequeñas mejoras

El lanzamiento de la versión 12 de OxygenOS, la capa de personalización de OnePlus, fue recibido de manera amarga por la mayor parte de los usuarios. Daba la sensación de que OnePlus había perdido uno de sus grandes diferenciadores, otro más.

El lanzamiento de la versión 12.1, basada en Android 12, mejora las cosas, aunque no mucho. Sigue siendo evidente que esto no es más que ColorOS de Oppo con un lavado de pintura, lo cual puede ser chocante para alguien que venga de un dispositivo Nord antiguo.

Hay que aclarar que este no es un mal sistema; es sólo que no es lo que esperábamos de OnePlus. Una vez que dejamos estos prejuicios atrás, es difícil criticar OxygenOS 12.1, al menos en lo que respecta al sistema en sí. Funciona y tiene algunas cosas curiosas, pero ya está; siempre y cuando no esperes más, no te decepcionará.

Hablando de esas “cosas curiosas”, tal vez mi preferida es Horizon Light, que enciende los bordes de la pantalla con una luz personalizable cuando recibimos una notificación. Es algo que llama más la atención que una notificación simple de cualquier otro sistema Android. También tenemos la opción de dejar la pantalla siempre activa, con varias opciones como poner un bitmoji o “Canvas”, que genera un dibujo a partir de una foto, como puede ser nuestra cara o un objeto favorito.

Otro elemento original es Shelf, que podemos abrir deslizando hacia abajo desde los iconos de arriba a la derecha. Es básicamente un lugar en el que guardar los widgets para que no ocupen espacio en la pantalla de inicio, un sitio desde el que comprobar el tiempo, los pasos que hemos dado o la música que estamos reproduciendo. Es curioso, y puede ser útil, pero realmente no cambiará nuestras vidas.

Por lo demás, OxygenOS 12.1 responde a algunas quejas, pero es imposible que responda a todas, simplemente por el hecho de que OnePlus ha perdido control sobre el futuro de su propio sistema. Al menos, las animaciones se notan rápidas, el dispositivo se desbloquea muy rápidamente con el lector de huellas bajo la pantalla, y hay poco bloatware, apenas algunas apps preinstaladas como TikTok o Netflix, además de las propias de OnePlus, que tampoco son muchas, como la app de galería (que se llama Fotografías) y un gestor de archivos.

Al precio adecuado, es difícil no recomendarlo

El OnePlus Nord 2T es un móvil centrado en una cosa: ofrecer justo lo que necesita el usuario medio en el 2022 y nada más. Para conseguirlo, OnePlus ha dejado atrás el lujo de modelos de gama superior, y se ha centrado en escoger un hardware equilibrado en todos los aspectos.

El resultado, es un móvil que puedo recomendar sin problemas, si lo único que queremos es un “móvil”. Me explico. Los potenciales compradores del OnePlus Nord 2T deberían tener en cuenta que este móvil no les va a sorprender en ningún aspecto concreto; no tiene nada que realmente lo haga destacar, pero eso también supone que no tiene nada en lo que cojee. Es un buen móvil, no una revolución, y hay veces que sólo queremos eso.

Es más fácil recomendar el OnePlus Nord 2T cuanto más barato sea, y afortunadamente, ese es un fenómeno común. Aunque tiene un precio base de 409 euros, en el momento de escribir estas palabras es posible conseguirlo por 359 euros en la página oficial de OnePlus y por 375 euros en Amazon, y a esos precios es muy atractivo; también ha sido fácil encontrarlo con varias rebajas en diferentes tiendas desde que fuera lanzado al mercado. En cambio, la versión con 12 GB y 256 GB de almacenamiento es decididamente menos atractiva, al superar los 500 euros y quedarse en los 459 euros incluso con rebaja; a ese precio ya es posible encontrar alternativas muy interesantes.

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