El otoño es posiblemente el momento del año en el que más dispositivos se anuncian. Marcas como Apple y Google presentan en esta época sus creaciones, y otras como Xiaomi también dan un golpe en la mesa con dispositivos como los recientes Xiaomi 12T y 12T Pro que se anunciaron hace unos días en un evento en Munich en el que pudimos estar. Hemos estado usando desde entonces el Xiaomi 12T Pro tanto de móvil principal como en comparativas con otros modelos y esta es nuestra experiencia.
Características Xiaomi 12T Pro
- Snapdragon 8+ Gen 1.
- Memoria RAM: 8 / 12 GB LPDDR5+.
- Almacenamiento interno: 128 / 256 GB UFS 3.1.
- Tamaño: 6,67 pulgadas.
- Resolución: 2712 x 1220 píxeles.
- Tecnología: AMOLED DotDisplay.
- Tasa de refresco: 120 Hz.
- Dolby Vision, HDR10+.
- Adaptative HDR.
- Brillo: 500 nits (típico), 900 nits (máximo).
- Protección: Gorilla Glass 5.
- Principal: Samsung ISOCELL HP1 200 Mpx, f/1.69, OIS, 16-in-1 Super Pixel, zoom 2x.
- Gran Angular: 8 Mpx f/2.2, 120º.
- Macro: 2 Mpx, f/2.4.
- Grabación de vídeo: Hasta 8K.
- Otros: LED Flash.
- Resolución: 20 Mpx f/2.24.
- 5G.
- Bluetooth 5.2
- Wifi 6.
- Dual SIM.
- Batería: 5.000 mAh.
- Carga rápida: 120 W.
- Puerto USB-C.
- Altavoces duales de Harman Kardon con Dolby Atmos.
- Sensor de huellas bajo la pantalla.
- Dimensiones: 163,1 x 75,9 x 8,6 mm.
- Peso: 205 g.
- Versión de Android: 12.
- Interfaz del fabricante: MIUI 13.
El diseño no es su fuerte
Desde hace mucho tiempo Xiaomi puede presumir de tener móviles de gran calidad de construcción, con buen diseño... pero es algo que muchas veces se deja para los flagships de cada año.
El Xiaomi 12T Pro no es un móvil que destaque ni por sus materiales ni por su estética. En ese sentido es todo lo contrario que el Motorola Edge 30 Ultra. Pero, siendo sinceros, ¿cuántos de vosotros usáis el móvil sin funda?
Yo soy una de esas personas, pero puede contar con los dedos de una mano la gente que conozco que use el móvil sin ningún elemento protector. Y en el momento de ponerle una funda el móvil pierde lo bueno y lo malo de sus materiales.
Por otro lado, no es que la construcción de este terminal sea mala, en absoluto, pero se nota que Xiaomi ha querido recortar aquí. Puestos a abaratar algo, no es esta una mala elección. Además, el acabado mate evita que se queden las huellas, y eso es algo que se agradece.
Por suerte han logrado controlar el peso, incluso con una generosa batería de 5000 mAh. Y esto no ha penalizado tampoco el poner un buen sistema de sonido. Parece que Xiaomi sigue queriendo ser la referencia en este apartado en todas las gamas de precios.
Pese a no tener jack de auriculares o tarjeta microSD sí que se mantiene el sensor de infrarrojos, siendo esta empresa una de las pocas que sigue apostando por ello.
Un gama alta con todas las letras a la hora de jugar
El procesador elegido para el modelo anaizado (el 12T lleva un MediaTek), es el Snapdragon 8+ Gen 1, un procesador que pasará a la historia de Qualcomm como uno de los más equilibrados en potencia y eficacia.
Además, Xiaomi ha querido potenciar esto con un gran sistema de refrigeración que permite que el procesador dé el máximo de potencia más tiempo. Ni una sola vez en la semana que he estado con este móvil he tenido la sensación de que se calentara demasiado. Y eso es algo que no puedo decir de rivales directos como el Pixel 6 Pro.
Lo único que llama la atención es que el launcher de MIUI siga teniendo unas animaciones que dan la sensación de que el móvil se ralentiza. No es así, lo dejamos claro, pero parece que la empresa no ha cuidado esto. Ya pasaba en modelos anteriores y sigue pasando.
Incluso en la memoria interna vemos un movimiento curioso, porque solo hay una capacidad, 256 GB. Eso sí, en función de lo que paguemos podremos optar por una versión con 8 GB de RAM y por otra con 12 GB de RAM. Aquí aún Xiaomi da opciones.
La conectividad también está a la altura de lo esperado, con GPS de doble banda, Wifi 6, NFC y bluetooth 5.2. Hubiéramos querido bluetooth 5.3 para poder sacarle el máximo partido a los nuevos Redmi Buds 4 Pro, pero no es esto algo que vaya a ser ni mínimamente importante.
Sin bordes curvos ni resoluciones locas
La pantalla de este modelo es el ejemplo de lo que Xiaomi quiere para los 12T Series. Es un panel de gama alta, no cabe duda, pero se queda lejos de las cifras máximas para poder contener el precio y no dañar la autonomía.
El panel, con tecnología OLED, tiene la capacidad de mostrar hasta 68000 millones de colores, con una veracidad de reproducción de color muy alta. Además, es compatible con Dolby Vision y HDR10+.
Su brillo máximo es de 900 nits, pero el normal se queda en unos 500. No es la pantalla más brillante que hemos visto pero desde luego que se puede usar perfectamente en cualquier circunstancia. Y no tiene los problemas de la pantalla del Pixel 7 Pro.
La resolución es FHD+, aunque Xiaomi habla de cosas como 1.5K o FHD++ dando a entender que hay más píxeles que en una pantalla normal. En concreto la resolución es de 2710 x 1220 px y el ratio de pantalla 20:9.
A la tasa de refresco máxima de 120 Hz se suma la tasa de 480 Hz para el muestreo táctil y, aunque no va mal, no hemos notado un salto en comparación con otros modelos.
El panel está protegido por un cristal Corning Gorilla Glass 5, y bajo el mismo está el sensor de huellas, que funciona muy bien y muy rápido. Mucho mejor aquí que en el Motorola Edge 30 Ultra.
Sólo una cámara destaca
El Xiaomi 12T Pro es el primer móvil de la empresa con un sensor principal de 200 Mpx. Esto podría hacernos pensar que la cámara es uno de los elementos más importantes del mismo, y solo es así en parte.
Decimos esto porque el sensor secundario trasero es un gran angular de 8 Mpx y el terciario es un macro de 2 Mpx.
El sensor principal es el HP1 de Samsung, el primero con esta loca resolución. ¿Se nota? Juzgad por vosotros mismos la diferencia de detalle con una foto tomada con el modo normal y el de 200 Mpx.
La cuestión es que el detalle no lo es todo y, en teoría, el modo de 12 Mpx debería ser más eficaz a la hora de realizar un HDR, como vemos en la siguiente imagen.
La cuestión es que si el HDR no es clave y tenemos buena iuz, el modo de 200 Mpx puede sustituir perfectamente al modo normal, sobre todo si vamos a sacarle partido a las nuevas funciones de software.
En el recorte de una imagen de una ventana vemos cómo el modo de 200 Mpx, a la izquierda, no realiza el HDR necesario para mostrar el cielo, algo que sí logramos en el de 12 Mpx.
Sin embargo, en algunas tomas, como decimos, eso es irrelevante, y tenemos la posibilidad de tener mucho más detalle sin perder información.
Además, con el modo de 200 Mpx obtenemos unos colores más realistas, lo que gustará a algunos, pero no a todos.
Este sensor, además, permite realizar fotos de 12 Mpx con zoom de 2x, es decir, imitando un zoom óptico, pero recortando la imagen de la parte central del sensor. Estos dos retratos han sido tomados así.
La calidad no llega a la de un buen zoom de dos aumentos, pero puede sacarnos del paso en alguna ocasión, ya que no es zoom digital.
Por último, tenemos que destacar las funciones de software de Xiaomi, como Xiaomi ProCut, que extrae varios encuadres de una foto de 200 Mpx para permitirnos elegir el que más nos guste.
También tenemos Xiaomi ProFocus, que mantiene el enfoque en un objeto de la escena y evita que el autoenfoque se vuelva loco.
El sensor secundario, como decíamos, es un gran angular de 8 Mpx, una resolución que nos parece del todo insuficiente teniendo en cuenta lo que vale este móvil. Incluso los Pixel 7 tienen un mejor sensor de este tipo.
La calidad de día no es especialmente alta, y la deformación en los laterales se hace notar bastante.
El tercer sensor es un macro de 2 Mpx, algo absurdo de ver en un móvil de gama alta, que podría haber integrado esta función en un mejor gran angular. Decir que es una cámara testimonial es ser generosos.
En cuanto a la cámara frontal, tenemos malas noticias. No permite grabar en 4K, si eso es importante para vosotros. Además, la calidad de las fotos, incluso con buena luz, no es especialmente alta, y la grabación de vídeo parece que no es tan estable como en otros modelos de la marca, incluso con buena luz, donde vemos trepidaciones que hasta ahora solo habíamos visto en la grabación nocturna.
Una gran carga rápida para una autonomía normal
Xiaomi es una de las marcas que más está apostando por la carga rápida, y este modelo no es una excepción. Tenemos hasta 120 W de carga por cable, pero no hay carga inalámbrica, una de las mayores flaquezas de este terminal. Los 5000 mAh de la batería se llenan en menos de 20 minutos si usamos el cargador que viene en la caja.
La empresa garantiza 800 ciclos sin degradación excesiva si usamos la carga rápida, lo que debería quitarnos el miedo de usarla en todo momento.
En la primera prueba de batería hemos estado haciendo uso del móvil en interiores, bajo Wifi, con la pantalla con brillo automático y la tasa de refresco en modo automático. Hemos llegado a las 6 horas de pantalla con 24 horas de batería. Hubiéramos esperado mucho más, sobre todo tras el análisis del Edge 30 Ultra.
En la segunda prueba de batería hemos estado haciendo fotos, escuchando podcasts, usando el GPS, hablando por teléfono, navegando... Hemos llegado a las 3 horas de pantalla con 30 horas de batería.
En la tercera prueba de batería hemos estado de nuevo en interiores, con el brillo más bajo, usando el móvil bastante para jugar, usar Instagram, redes sociales varias... Hemos llegado a las 6 horas de pantalla con 24 horas de batería.
MIUI sigue siendo MIUI
El Xiaomi 12T Pro incluye MIUI 13 y Android 12, lo que no nos sorprende, por mucho que Android 13 lleve ya varios meses disponible. Xiaomi no es una de las marcas que más prioridad le da a las actualizaciones, y eso es algo a tener en cuenta.
MIUI sigue funcionando muy bien, pero la interfaz cada vez da la sensación de ser algo más anticuada, con una identidad que no deja de intentar inspirarse en iOS de Apple y con unas animaciones que en alguna ocasión nos ha dejado un mal sabor de boca.
Todo eso no es problema en el día a día, donde el sistema se muestra más que solvente, muy rápido y fluido, con muchísimas opciones de personalización.
También hay que destacar que el desbloqueo facial de Xiaomi sigue siendo uno de los que mejor funcionan, aunque no aporta ningún tipo de seguridad adicional (prácticamente ninguno lo hace).
Un móvil válido con fuertes competidores
Xiaomi ha sido durante mucho tiempo la referencia en los móviles baratos. Desde hace unos años se pelea con los jugadores mayores para serlo también en la gama alta, y este es un buen ejemplo.
El Xiaomi 12T Pro tiene dos rivales directos que, aunque cuestan algo más, también ofrecen más. Uno es el Motorola Edge 30 Ultra, que lo mejora en diseño, materiales y batería. El otro es el Pixel 7 Pro, que lo mejora en software, diseño y cámara.
Es cierto que ambos cuestan 150 euros más (con diferentes memorias), y eso es algo a considerar, pero también hay un rival indirecto, el Pixel 7. En ese caso el modelo de Google destaca en cámara, diseño y sofware, pero pierde en velocidad de carga, pantalla y memoria. Eso sí, cuesta 100 euros menos.
Este terminal está llamado a ser una referencia si baja algo de precio, cosa que presumiblemente hará, o si lo cogemos con algún regalo, como la oferta de lanzamiento en la que se regalaba una tablet. Eso ya no es así, pero ese tipo de acciones sí que pueden poner este móvil por encima de sus rivales de forma muy eficaz.