La industria de los smartphones lleva casi dos décadas centrada en un factor de forma que, aunque ha evolucionado mínimamente, se ha estancado. Los móviles son siempre rectángulos con un frontal de cristal y una trasera que intenta destacar en un mar de opciones. Los plegables parece que quieren cambiar eso, pero aún no son una opción para la mayoría.
Hay firmas que, sin haber dejado el mercado, saben que tendrán unas ventas pequeñas, y prefieren eso que sucumbir a unas modas que harían que perdieran incluso su esencia de marca. Una de ellas es Sony, que en el Sony Xperia 1 V ya demostró que sabía hacer las cosas de manera diferente, aunque eso supusiera ir a contracorriente.
Ahora toca probar el segundo móvil de los que ha anunciado este año, el hermano pequeño del 1 V, el Sony Xperia 5 V (999 euros), un terminal de gama alta pero con un factor de forma que nos retrotrae a lo que eran los móviles en la primera década de este siglo: pequeños y cómodos.
Una rara avis
Este Xperia es un terminal que destaca, para empezar, por sus dimensiones, de 154 x 68 x 8.6 mm. Puede que eso no os diga nada, pero sí que su pantalla es de 6.1 pulgadas y su ratio es de 20:9. En resumen, es un móvil pequeño, compacto y muy alargado, lo que lo convierte en uno de los pocos móviles de gama alta pequeños del mercado, junto con el ASUS Zenfone 10.
Eso sí, la estética de Sony sigue siendo la misma, apostando por un marco que rodea la pieza central en la que está la pantalla y la parte trasera, creando un resalte que en la mano se siente raro, algo cortante. Es todo lo contrario a lo que presentan marcas como Apple o Samsung, con formas cada vez más ergonómicas. En lo que sí se parece a esas marcas es en la resistencia al agua y polvo IP68.
Entre las rarezas de este modelo está también la presencia de un sensor de huellas lateral, en vez de uno bajo la pantalla como hacen todos los móviles de este segmento de precio salvo los plegables, el jack de auriculares para poder usar modelos de alta calidad de sonido o la bandeja para la SIM que también admite tarjetas de memoria, algo que prácticamente ninguna otra marca permite en sus topes de gama. Por si fuera poco, se mantiene el diseño con altavoces en la parte frontal y el botón dedicado a la cámara, lo que favorece mucho el disparo, sobre todo en momentos en los que queremos sacarle el máximo partido a las cámaras.
Máxima potencia
Pese a no tener las especificaciones de su hermano mayor este Sony Xperia 5 V viene con el mejor procesador del mercado, al menos hasta el momento del anuncio, el Qualcomm Snapdragon 8 Gen 2. Hace unos días se presentó el Snapdragon 8 Gen 3, que suponemos será el chip del sucesor de este modelo. El problema viene en las memorias. Este terminal dispone de 8 GB de RAM y 128 GB de memoria interna, cifras del todo insuficientes para un móvil que cuesta 1000 euros. Es cierto que no es el único que tiene estas memorias, pero sus rivales hace tiempo que dieron el salto a, mínimo, 12 GB de RAM y 256 GB de almacenamiento. Incluso la tecnología de las memorias no es la máxima vista, quedándose la ROM en UFS 3.2 y la RAM en LPDDR5.
Parece que Sony quiere alejar artificialmente así sus modelos, dejando las memorias más altas para el Xperia 1 V. Sin embargo, en cuanto a fluidez, no es que tengamos muchas quejas, con un rendimiento sobresaliente y una conectividad al máximo nivel. Tenemos Wifi 6e, GPS de doble banda, NFC, bluetooth 5.3...
Donde no tenemos queja es en la batería. Los 5000 mAh de este móvil, junto con una pantalla que cumple en eficiencia, disparan la autonomía por encima del día, incluso rozando los dos días si no se hace un uso intensivo de la cámara o de juegos. La carga rápida, de 30W, se acompaña de carga inalámbrica, aunque no hay ni cargadores ni cables en la caja de venta.
La interfaz es muy similar a la de Android puro, en su versión 13, ya que este modelo se presentó antes de la llegada de Android 14. Hay modificaciones encima de la interfaz pura del sistema, como las múltiples aplicaciones para usar la cámara, funciones extra en el botón de encendido y sensor de huellas, etc.
Sony sigue el camino de marcas como Motorola, que se centran en ofrecer una experiencia pura pero mejorando la misma con algunas funciones que los terminales de Google no tienen. Eso sí, algunas partes de la interfaz, como el configurador inicial, parecen aún basados en diseños de hace casi una década, cuando HoneyComb se lanzó.
Una pantalla de calidad, sin 4K
La mayor diferencia del Sony Xperia 1 V con sus competidores era la pantalla. Un panel 4K con una densidad de píxeles que avergonzaba a muchos rivales. Este Xperia 5 V no tiene esa resolución, conformándose con un panel FHD+ de 6.1 pulgadas, con tecnología OLED.
Sí que integra una tasa de refresco variable de hasta 120 Hz, y un ratio 21:9 que le da ese aspecto alargado tan característico de los móviles de Sony. Tendremos soporte para HDR10, pero no para Dolby Vision. Además, Sony lo ha hecho especialmente bien en los ajustes, y la calibración de esta pantalla puede ser mucho más precisa que en la de otras marcas.
A esto hay que sumar la experiencia inmersiva que dan sus dos altavoces, ambos colocados en el frontal. Este tipo de decisiones son la que alejan a Sony de la competencia, en el buen camino.
Una cámara menos
Sony ha apostado por usar solo dos cámaras en este terminal. Pierde el teleobjetivo con respecto al Xperia 1 V. Es lo mismo que hacen firmas como Apple o Google, pero teniendo Samsung tantos modelos de este precio o inferior con zoom óptico, aquí Sony sale perdiendo. La marca dice que con el sensor principal podemos hacer fotos a 2x sin pérdida, pero ya sabemos que la calidad de este tipo de recortes no es la misma que en un zoom dedicado.
La calidad de las cámaras traseras es buena, y hay que hacer una mención especial a la previsualización de la aplicación de cámara, que es una de las mejores que hemos visto. El sensor principal, de 48 Mpx con estabilización óptica y enfoque PDAF, nos da unas fotos muy correctas, tanto de día como de noche, con un rango dinámico muy bueno y el contraste justo para que las fotos llamen la atención sin llegar a ser irreales. También hay un ultra gran angular de 12 Mpx, con una calidad algo menor.
Hay un pequeño fallo que impide que la interfaz rote libremente cuando hacemos fotos, lo que impide hacer una foto con la mano izquierda en formato horizontal. Seguramente se haya hecho adrede para que se use el botón dedicado, pero impedir que la interfaz gire, algo que se hace por software, no nos parece correcto.
En cuanto al vídeo, la calidad es mejor de la esperada, aunque el rango dinámico no es tan bueno como en las fotos. Eso sí, la estabilización es una de las mejores que hemos visto en los últimos años.
¿Me lo compro?
Sony solo tiene dos móviles a la venta en España, al menos dos enfocados al gran público, si nos olvidamos de los PRO. Este Sony Xperia 5 V viene a ser una versión más económica del Sony Xperia 1 V, con una pantalla de menor resolución, sin cámara zoom y sin pantalla 4K. A cambio, aparte del ahorro de 400 euros, tenemos un terminal excepcionalmente compacto que no ve mermada su autonomía, algo que solía ser el fallo de los móviles pequeños.
En cuanto a rivales, tenemos modelos como el ASUS Zenfone 10, pero no muchos más. Si el tamaño es un factor crítico y el precio no es un obstáculo, la experiencia con este terminal puede ser muy positiva. Pero si el factor económico entra en juego, hay muchos modelos que pueden ser interesantes, como el Samsung Galaxy S23.