El fabricante británico Nothing ha logrado en pocos años abrir abrirse un hueco en el sector de la electrónica de consumo apostando por algo que muchas otras marcas no tienen en cuenta, el diseño. La firma fundada por Carl Pei ha sabido diferenciarse de sus rivales con una estética basada en los colores neutros y las transparencias.
Esto es lo que vimos en su primer lanzamiento, los Nothing Ear (1), unos auriculares que llamaron la atención también por su precio, muy ajustado para el momento. Desde entonces han lanzado otros modelos, como los Nothing Ear (2) y los Nothing Ear Stick, y también móviles, el último de los cuales analizamos hace poco.
El último movimiento de la compañía nos ha dejado con dos productos más, dos auriculares pensados para dos públicos diferentes pero que mantienen la línea estética a la que nos tiene acostumbrados la empresa. Son los Nothing Ear, sucesores de los Nothing Ear (2) y los Nothing Ear (a), sucesores de los Nothing Ear (1). Por el camino se queda el modelo sin almohadillas, más complejo de fabricar y que no ha tenido tanto impacto.
Ambos modelos están ya en preventa y se podrán recibir a partir del 22 de este mismo mes de abril. Los Nothing Ear de nueva generación tienen un precio de 149 euros, siendo los auriculares más avanzados de la empresa hasta la fecha. Por su parte, los Nothing Ear (a) se lanzan a 99 euros, un precio mucho más competitivo que va de la mano con algunas ausencias, ninguna de las cuales supone un problema para el usuario medio, como se verá en este análisis.
Diseño y ergonomía
Una de las fijaciones de Nothing es mantener una línea de diseño muy consistente con lo que han hecho hasta la fecha, lo que les permite tener una imagen de marca potente, que sea casi un anuncio en sí misma. es algo que muchas empresas buscan y que pocas logran. De hecho, el fabricar productos con partes transparentes es muy complicado, pero también permite una gran diferenciación a golpe de vista.
Los nuevos Nothing Ear tienen un diseño prácticamente idéntico a sus antecesores, con la misma caja y la misma forma, estando las diferencias en el interior, sobre dodo en el nuevo diafragma cerámico y una rejilla de audición con una malla perforada distinta. Estos auriculares permiten así una mejor recirculación de aire, para educir distorsión de los sonidos. Los Nothing Ear tienen IP54 en los auriculares e IP55 en la funda mientras que los Nothing Ear (a) tienen IP54 en los auriculares pero solo IPX2 en la funda.
Los Nothing Ear (a) son la apuesta económica de la empresa para este 2024, y llegan con una tecnología a medio camino entre la de los Nothing Ear (1) y los Nothing Ear (2). La mayor diferencia es que en este modelo existe una variante de color amarillo realmente llamativa, siendo el primer producto de Nothing que no es blanco o negro, más allá de los lanzados bajo la marca CMF.
También destaca su caja, de menor tamaño que la de su hermano mayor, con menos capacidad de carga pero mucho más cómoda de llevar encima. Una de las pocas pegas que tenían los auriculares de esta empresa es que la caja de carga era bastante voluminosa.
Mejor sonido, mejores códecs
Los Nothing Ear y los Nothing Ear (a) se diferencian mayormente en la calidad de sonido. El primero tiene un sonido más potente y con mayor rango dinámico. Además, soporta más códecs, como audio en alta resolución y dispone de mejores graves. Esto es algo que se nota si hacemos una comparativa mano a mano, pero difícilmente el usuario medio va a notarlo.
Además, para exprimir al máximo los Nothing Ear es aconsejable un servicio de streaming de música que nos de una gran calidad, porque en los normales que usan la mayoría de compradores, las diferencias no son tan notables. Donde sí que se aprecian diferencias es en el ecualizador ya que los Nothing Ear tienen un modo Pro y permiten calibrar el software para que se adapte a cada persona de forma independiente.
Ambos disponen de cancelación de ruido activa y adaptativa de hasta 45 dB, que funciona realmente bien con ruido de fondo e incluso con voces lejanas. Se puede activar desde la aplicación o desde los propios auriculares, que mantienen los gestos que ya tenían modelos anteriores, con un pellizco, dos, pulsaciones prolongadas, etc. En Nothing nos han confirmado que no han optado por los toques porque esta forma evita las pulsaciones accidentales, así como la incomodidad que tienen algunas personas al pulsar en algo puesto en la oreja.
Los Nothing Ear tienen nuevos micrófonos con mejor calidad de llamada, así como conexión dual por si queremos emparejarlos a dos dispositivos a la vez. Esto último también está presente en los Nothing Ear (a), al tener ambos la tecnología bluetooth 5.3.
Por último, hay que destacar la integración con ChatGPT. Nothing lo ha incluido en Nothing OS, el sistema operativo de sus móviles, y si se usan cualquiera de estos dos auriculares con esos teléfonos se podrá usar ChatGPT desde estos accesorios. Eso sí, sólo funcionará si tenemos un móvil de la marca.
Autonomía y carga
La batería de los auriculares de Nothing nunca ha sido ni de las más destacadas ni de las que ha dado problema. No obstante, en los Nothing Ear la empresa ha mejorado sustancialmente esto con una autonomía un 25% mejor que en los Nothing Ear (2), llegando a las 40 horas con la caja de carga y hasta 8 horas y media con cada carga de los auriculares. Obviamente esta duración es menor si se usa la cancelación de ruido o se pone el volumen muy rápido.
La carga rápida permite tener 10 horas de autonomía en la caja con tan solo 10 minutos de carga que, además, puede ser inalámbrica. Esta es una de las ausencias de los Nothing Ear (a), que solo tienen carga por cable. La realidad es que no todo el mundo con auriculares con carga inalámbrica la usa.
¿Cuál me compro?
Esta es la primera vez que Nothing anuncia dos auriculares tan parecidos de forma simultánea, pero tiene sentido. Los Nothing Ear son una evolución menor de los Nothing Ear (2), con un nuevo nombre y cambios en la calidad de sonido y en la autonomía, posiblemente las dos partes más importantes de unos auriculares inalámbricos.
Los Nothing Ear (a) son incluso más importantes. Tienen un precio que está justo por debajo del límite psicológico de los 100 euros, y ofrecen un nuevo color muy adecuado (solo disponible en la web y en FNAC) para los más jóvenes. Pese a eso no dejan de lado un diseño muy llamativo, la cancelación de ruido activa o una buena autonomía.
Para la mayoría de usuarios, los Nothing Ear (a) son la apuesta segura, con un precio adecuado, muy buen diseño y prestaciones a la altura de lo que se espera en este tipo de productos en 2024. Para los más audiófilos los Nothing Ear son mejores, porque no llegan a costar lo mismo que propuestas más profesionales pero ofrecen funciones de ese tipo de auriculares, que solo los más melómanos difrutarán pero que no obligan a realizar tampoco un gran desembolso.